Muy buenas, amiga Sccherezada.
Amiga, sí, amiga.
Voy hoy a atreverme a llamarte amiga. Desconozco en qué
medida la palabra se acerca al cuate del español de México.
Sabemos que la palabra amigo se utiliza, no siempre pero sí
frecuentemente, con mucho desparpajo, con excesiva desen-
voltura y demasiada ligereza.
En todo caso, entiendo que nunca hay nada de malo al llamar
amigo a éste, a ése o a aquél.
En realidad y por lo general, cuando a alguien llamamos amigo
estamos tratando de dar un tono amable a la conversación o
a la plática y, al mismo tiempo, estamos tratando de transmitir
o introducir en el encuentro, contacto o relación una muy sana
intencionalidad, que no siempre es confesable.
Vamos ahora, dama del Estado de Nuevo León (México), a ocu-
parnos de dos locuciones o expresiones. Me refiero a eso de
NO DAR PIE EN BOLA y a lo de PICA-BUCHES.
Consultando páginas de Yahoo, Google, etc. encontraríamos, muy
probablemente, información que despeje las dudas y nos dé respues-
tas precisas o suficientemente válidas.
Yo no voy a ir a mirar ni a consultar nada, sino que te voy a decir,
como mejor pueda, qué es lo entiendo o cómo interpreto las dos.
1. NO DAR PIE EN O CON BOLA
Intervienen un pie y una bola.
Pensemos en un futbolista.
Los futbolistas son deportistas muy hábiles en el manejo de una
bola o balón o pelota con un pie y, por supuesto, tambien con los
dos pies.
¿Qué hace un futbolista?
Está muy claro : dar o pegar con el pie a la bola o pelota.
Si el futbolista no golpea con su pie la bola o balón, algo está
haciendo mal (salvo que se trate de una finta) y, por tanto, no
está siendo muy acertado.
Si digo que hoy no he dado pie con bola estoy diciendo que todo
lo he hecho mal, que he fallado en lo que hacía, en resumen, que
todo me ha salido mal hoy y que ha sido un día de completo fracaso.
2. PICA-BUCHES
Nunca antes había ni leído ni oído esto de pica-buches.
Vamos a ver.
Por buche entiendo algo así como estómago.
Picar es verbo complicado, tiene muchos significados y matices.
La verdad es que estoy un poco perdido y desorientado.
Me aventuro a decir que andar de pica-buches vendría a ser
algo parecido a picotear, a probar por aquí y por allí, a recoger
información de unos y otros lugares, o a inspeccionar por allá
y por acullá.
Leo que me invitas a que te cuente cosas de donde vivo.
Son tantos los temas que me preguntas, que, inevitablemente, habré
de posponer para otro momento más reposado tan prolijo cuestionario.
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