Las posibilidades para cubrir senderos o decorar espacios del jardín en cuanto a tipos de grava y piedras se refiere son realmente variadas. Poco a poco se le irán dando a conocer las características principales y posibilidades de cada elección, pero en esta ocasión empezaremos por la lava volcánica.

Respecto a la tierra y piedras volcánicas se puede decir que son especialmente indicadas para ser empleadas como elemento de drenaje. Su porosidad permite airear los suelos que así lo precisen, además de evitar los posibles encharcamientos que se pueden producir en tierras arcillosas.

Estas piedras de naturaleza volcánica también sirven para decorar caminos, parterres y jardines en general, tanto por su variado colorido, como por sus dimensiones más bien reducidas, que las hacen especialmente cómodas para pisar sobre ellas. La porosidad de las mismas no sólo evita el encharcamiento de las plantas sino también la acumulación de agua en caminos y parterres que suele producirse en época de lluvias.