SANTIAGO.- Como siempre… cuanto más conocemos acerca de algo, es más fácil saber como comportarse. De la misma manera ocurre con las enfermedades: si uno reconoce tempranamente que algo se salió de la normalidad, más rápido se puede buscar la solución. Por ello es importante conocer algunos puntos sobre los trastornos nutricionales.

Anorexia significa falta del deseo de comer. Esta pérdida puede obedecer a diferentes motivos, esto genera la división entre anorexia primaria o secundaria.

• Primaria o sin causas aparentes, como en el caso de la Anorexia nerviosa.

• Secundaria, es la que aparece en respuesta a varios causas, por ejemplo, enfermedades consuntivas, tumores, problemas metabólicos, depresión y consumo de drogas entre otras.

La anorexia nerviosa es una enfermedad muy antigua, la sufrieron muchas personalidades en el mundo y hasta ciertas santas, como Santa Catalina de Siena, que fue el primer caso reportado en la historia.

Sus características

Es interesante saber que este trastorno se caracteriza por la sumatoria de los siguientes parámetros:

* Deseo irracional por bajar de peso: éste es el generador de conductas compulsivas e incontroladas orientadas al control de la ingesta calórica diaria.

* Distorsión corporal: la persona se percibe a si misma con un tamaño irreal. Estas chicas y chicos se ven más gordas/os o de mayor peso y tamaño del que muestra la realidad. Este sentimiento no los abandona, haciéndose presente también en la comparación con el cuerpo de sus pares.

* Cambios en estado de animo: es frecuente ver cómo se tornan de personas alegres, dóciles y comunicativas a individuos con cierto encerramiento en si mismos, alta competitividad, desconcierto, desconfianza, retracción en las relaciones interpersonales (aislamiento social), tristeza, desmedida exigencia y control.

En general el estado anímico se vuelve depresivo y negativo.

Rápidamente aparecen signos de alarma en la persona que enferma de este trastorno y es fundamental como familiar observar la aparición de los cambios sin tratar de justificarlos o de ocultarlos. El mejor camino es la consulta con el profesional indicado, dejando de lado la creencia de que son conductas pasajeras o caprichosas.

Consejo: Al buscar ayuda, el orden de prioridades es consultar con el médico familiar y luego con el especialista en trastornos nutricionales.

¿Qué puede ser un indicio de anorexia?

Desde el punto de vista clínico o sea de la salud corporal podremos notar que aparecen:

• Alteraciones en la piel, como sequedad, opacamiento y falta de luminosidad.

• Manos y pies muy fríos.

• Pelo quebradizo, aumento del vello en brazos, piernas y espalda.

• Quejas de mala digestión y de dolores abdominales sin causa, también de nauseas y asco marcado por ciertos alimentos principalmente carnes rojas.

• El rechazo hacia las carnes es un indicio temprano que debe ser tenido en cuanta.

• Aparece una severa alteración del ritmo evacuatorio con predominio de la constipación, la que suele ser pertinaz y muy rebelde, lo que empuja al adolescente a usar y abusar de los laxantes, complicando el cuadro.

• También son frecuentes las alteraciones dentales, como pérdida del esmalte, aparición de caries, dolor y sangrado de las encías.

• Por último, la pérdida del ciclo menstrual, pasando desde la irregularidad hasta la falta total del mismo, siendo éste uno de los síntomas más graves y lamentablemente el que genera alarma en la familia. Lamentablemente porque la enfermedad ya está establecida cuando se reciente el ciclo menstrual y se han perdido otros signos de alarma previos, que de ser detectados hubieran mejorado el pronóstico y la evolución del cuadro.

• Son tendencias comunes la de comprar, manipular y acopiar alimentos. Así como alimentar y cocinar para todos los familiares y amigos, pero sin probar bocado de lo producido, es frecuente ver como estas jovencitas se vuelven expertas cocineras y hasta acumulan conocimientos pseudocientificos sobre los alimentos y las calorías encerradas en ellos.

• Todo lo anterior puede coexistir con trastornos del sueño y con la clara tendencia a vestirse con ropa ancha y oscura, sumado a algunos o muchos de los cambios en la conducta de relación que ya fueron comentados.

La influencia familiar

No olvide tener en cuenta la existencia de familiares con trastornos de la conducta alimentaria, con el consumo de alcohol y drogas, con el empleo de cirugías y métodos de embellecimiento. Un dato que no es menor, es que la anorexia es ocho veces más común en personas que tienen familiares con alguno de estos desórdenes. También cabe revisar el grado de exigencia del medio social y el momento histórico por el que transita la familia cuando hace su aparición la enfermedad.

Por último, sepa que hay personas predispuestas y que es el ambiente el que va a favorecer que la enfermedad se desarrolle o no.

Ahora tiene más información solo úsela adecuadamente y se sentirá capaz de proteger a los suyos con una conducta acertada.