Página principal  |  Contacto  

Correo electrónico:

Contraseña:

Registrarse ahora!

¿Has olvidado tu contraseña?

۞۞۞ ElCirculoMagico۞۞۞
 
Novedades
  Únete ahora
  Panel de mensajes 
  Galería de imágenes 
 Archivos y documentos 
 Encuestas y Test 
  Lista de Participantes
 RADIO MAGIC 
 MUNDO DESCONOCIDO 
 Actualidad RT 
 CHAT EN BUZZEN 
 LA GRANJA HUMANA 
 MIRAR DE NUEVO 
 EL CUARTO CAMINO 
 
 
  Herramientas
 
۞ POESIA: BODA NEGRA
Elegir otro panel de mensajes
Tema anterior  Tema siguiente
Respuesta  Mensaje 1 de 2 en el tema 
De: Georgina  (Mensaje original) Enviado: 17/03/2011 20:30

BODA NEGRA

Oye la historia que contóme un día

el viejo enterrador de la comarca:

era un amante a quien por suerte impía

su dulce bien le arrebató la parca.

Todas las noches iba al cementerio

a visitar la tumba de la hermosa;

la gente murmuraba con misterio:

es un muerto escapado de la fosa.

En una horrenda noche hizo pedazos

el mármol de la tumba abandonada,

cavó la tierra... y se llevó en los brazos

el rígido esqueleto de la amada.

Y allá en la oscura habitación sombría,

de un cirio fúnebre a la llama incierta,

dejó a su lado la osamenta fría

y celebró sus bodas con la muerta.

Ató con cintas los desnudos huesos,

el yerto cráneo coronó de flores,

la horrible boca le cubrió de besos

y le contó sonriendo sus amores.

Llevó a la novia al tálamo mullido,

se acostó junto a ella enamorado,

y para siempre se quedó dormido

al esqueleto rígido abrazado.

Julio flores


Primer  Anterior  2 a 2 de 2  Siguiente   Último  
Respuesta  Mensaje 2 de 2 en el tema 
De: Dream7 Enviado: 18/03/2011 14:23


Elegía a Ramón Sijé - Miguel Hernández

(En Orihuela, su pueblo y el mío, se
me ha muerto como del rayo Ramón Sijé,
a quien tanto quería)

Yo quiero ser llorando el hortelano
de la tierra que ocupas y estercolas,
compañero del alma, tan temprano.

Alimentando lluvias, caracolas
y órganos mi dolor sin instrumento,
a las desalentadas amapolas
daré tu corazón por alimento.
Tanto dolor se agrupa en mi costado
que por doler me duele hasta el aliento.

Un manotazo duro, un golpe helado,
un hachazo invisible y homicida,
un empujón brutal te ha derribado.

No hay extensión más grande que mi herida,
lloro mi desventura y sus conjuntos
y siento más tu muerte que mi vida.

Ando sobre rastrojos de difuntos,
y sin calor de nadie y sin consuelo
voy de mi corazón a mis asuntos.
Temprano levantó la muerte el vuelo,
temprano madrugó la madrugada,
temprano estás rodando por el suelo.

No perdono a la muerte enamorada,
no perdono a la vida desatenta,
no perdono a la tierra ni a la nada.


En mis manos levanto una tormenta
de piedras, rayos y hachas estridentes
sedienta de catástrofes y hambrienta.

Quiero escarbar la tierra con los dientes,
quiero apartar la tierra parte a parte
a dentelladas secas y calientes.

Quiero minar la tierra hasta encontrarte
y besarte la noble calavera
y desamordazarte y regresarte.

Volverás a mi huerto y a mi higuera:
por los altos andamios de las flores
pajareará tu alma colmenera

de angelicales ceras y labores.
Volverás al arrullo de las rejas
de los enamorados labradores.

Alegrarás la sombra de mis cejas,
y tu sangre se irá a cada lado
disputando tu novia y las abejas.

Tu corazón, ya terciopelo ajado,
llama a un campo de almendras espumosas
mi avariciosa voz de enamorado.

A las ladas almas de las rosas
del almendro de nata te requiero,
que tenemos que hablar de muchas cosas,
compañero del alma, compañero.

(El rayo que no cesa)



 
©2024 - Gabitos - Todos los derechos reservados