EN EL CAMINO APRENDÍ...

Que ir más alto no es crecer,

Ni que escuchar es oír,

Ni lamentarse es sentir.

Que mirar no siempre es ver,

¡Ni acostumbrarse es  amar!

En el camino aprendí...

Que andar solo no es soledad,

Que cobardía no es paz,

Ni ser feliz sonreír.

¡Y que peor que mentir es silenciar la verdad!

Que puede un sueño de amor abrirse como una flor y como esa flor morir.

APRENDÍ...

Pero en su breve existir ¡ser todo aroma y color!

Más..., si es Amor, no morir.

El camino me enseñó:

que humildad no es sumisión.

Porque la humillad es un don y se suele confundir:

“no es lo mismo ser servil,

que ser un buen servidor”.

Cuando vayan mal las cosas  como a veces suelen ir,

Cuando ofrezca tu camino sólo cuestas que subir,

Cuando tengas poco haber pero mucho que pagar,

Y conviene sonreír pero cuesta no llorar,

Y el dolor te agobie tanto que no lo puedas sufrir

Descansar acaso debes, ¡pero nunca DESISTIR!

¡CUANDO TODO ESTÉ PEOR ...,

MÁS DEBEMOS INSISTIR!