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¨No me des pobreza ni riquezas;
Manténme del pan necesario.¨ Proverbios 30:8.
Este es un proverbio que mi esposa recuerda a cada instante, porque su papá, que fue un siervo del Señor, recitaba en sus oraciones, pidiendo a Dios porque el alimento nunca faltara a su familia.
Los tiempos en la actualidad son cada vez más dificiles. La economía mundial se está derrumbando. Los países están en crisis financiera. El alimento escacea. El precio de los energéticos se desploma. Los comercios y las grandes empresas están cerrando. Los trabajos se están acabando. Tal parece que todo es gris en la economía mundial.
Claro, los pobres son los que mas sufren por las carestías. Las familias numerosas que dependen sólo del sostén paternal, se ven en la desesperación.
este proverbio me hace meditar y clamar a mi Dios, de que no se olvide de sus hijos. Que nadie sufra por falta del alimento. Que cada uno tenga lo que necesita en su vida. pero que también derrame su misericordia para con toda la gente: ¨para que seáis hijos de vuestro Padre que está en los cielos, que hace salir su sol sobre malos y buenos, y que hace llover sobre justos e injustos.¨ Mateo 5:45.
Tengamos esa confianza en Dios, de que si le pedimos que nos ayude y cubra nuestras necesidades, Él va a derramar su misericordia para con todos. Especialmen-
¨Mi Dios, pues, suplirá todo lo que os falta conforme a sus riquezas en gloria en Cristo Jesús.¨ Filipenses 4:19.
ORACION: Señor, te ruego que siempre proveeas del alimento a tus hijos y aún a toda la gente. En el nombre de Jesús, amén.
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