Ni él ni nadie esperaba que perdiera por más de 15 puntos contra Alberto Fernández, el candidato del Frente de Todos, una alianza de inmensa mayoría peronista en la que la ex presidenta Cristina Fernández de Kirchner va como candidata a la vicepresidencia. Hasta ayer, Macri creía que quedaría abajo solo por tres o cuatro puntos, que emparejaría en la primera vuelta de octubre y que ganaría la reelección en la segunda vuelta prevista para noviembre. Que sería presidente hasta 2023.
Pero todos los escenarios cambiaron y, de confirmarse esta diferencia de votos en las elecciones del 27 de octubre, el 'ballotage' ya ni siquiera sería necesario. Tan fuerte fue el golpe que en varios tramos del discurso, en el que el presidente reconoció su fracaso, parecía que se estaba despidiendo. Fue la primera noche electoral de su carrera política en la que no hubo festejos, ni globos, ni sonrisas, ni música, ni bailes, ni lluvia de papelitos. Sabe que cuenta con poco más de dos meses de campaña y que modificar una distancia electoral de esta magnitud sería una proeza. Aunque Argentina, bien lo sabemos, es un país impredecible en el que las expectativas pueden cambiar de un momento a otro.
Ninguna encuesta había logrado detectar que el descontento contra el macrismo fuera tan alto, que ayer lo votaría el 32% y que la fórmula Fernández-Fernández de Kirchner se quedaría con el 47,65%.Cecilia González, periodista y escritora mexicana en Argentina.
Los resultados de las elecciones Primarias, Abiertas, Simultáneas y Obligatorias (PASO), en las que cada fuerza política confirma a sus candidatos para las elecciones generales, sorprendieron al gobierno, a la oposición, a la prensa y a la población en general. Ninguna encuesta había logrado detectar que el descontento contra el macrismo fuera tan alto, que ayer lo votaría el 32% y que la fórmula Fernández-Fernández de Kirchner se quedaría con el 47,65%. Rumbo a octubre, para ganar en primera vuelta, cualquier candidato necesita el 45% de los votos o, en una segunda opción, el 40 %, pero con una distancia de 10 % con respecto al segundo lugar. La oposición ya tiene esos votos, por ahora.