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   Poema 
 Esta noche llevo un blanco luceropartido en la sombra de mis dos ojeras,
 y mis ojos tristes de un verde marino
 parece que sueñan...
 ¡Oh si tu me vieras! Quizás anhelarasel cálido aliento de mi boca fresca,
 quizás suspiraras por los besos trémulos
 de mis labios finos, húmedos y rojos
 que esta noche tienen el sabor de una
 granada entreabierta.
 ¡Oh si tu vinieras! Cómo se posaran
 tus negras pupilas
 entre la cascada de mi cabellera
 que lleva tan solo
 el pálido adorno de un broche de luces
 que la luna borda con su luz enferma,
 mientras que mi cuerpo desceñido todo
 y envuelto en el manto azul e inconsútil
 de la primavera,
 tiembla con el beso tibio de esta noche
 que tiene un perfume fugaz de violetas.
 Qué alegres podríamos juntostejer el poema;
 yo con el prestigio de mi cuerpo joven,
 de mis ojos claros y mi boca fresca;
 tú con tus pupilas ardientes que llevan
 el dulce misterio de noches de luna,
 hasta la salvaje inquietud de las selvas¡
 ¡Oh si pudiera fundir en idilio
 mi loca quimera,
 cómo florecieran mis cálidos versos
 teniendo por cuna tus pupilas negras.
 Oh si pudiera!
 
 Laura Victoria   21.06.11 
 
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