TINIEBLAS...
("Es un valor desvalido
querer a quien no nos quiere,
pues siempre se será olvido,
que tarde o temprano, hiere…")
-Audroc-
En la oscuridad de mi interior reflejan
rayos de luz y nebulosas brumas,
mientras tus ojos sin consuelo busco,
en los pálidos reflejos de la luna…
Me tiembla el alma de frío, en la penumbra,
de una distancia infinita, destructora,
en el deseo de envolverte entre mis brazos,
transformando en realidad, lo que hoy es sombra…
Me quedo allí, sobre la luna, solitario,
porque me faltan tus ojos al mirarla,
y se adormece un sueño, no cumplido,
mientras procuro un vuelo, ya sin alas…
El firmamento todo no logra contenerme
en la amplitud del Amor que por ti siento,
y me vuelvo como Dios: Omnipresente,
acariciándote en distancias, como el viento.
Al toque de una brisa fría y suave
sentirás que contigo estaré siempre.
Que el Amor de distancias, nada sabe,
y todo encierra en la palabra: ¡“Siente..."!! !
Te llevo entre mis brazos, como muerta,
para acallar los sueños que tejiera,
y tenerte sin tenerte, aunque te quiera,
en el dolor de esta agonía lenta…
Te dejo ir en libertad,
como vinieras,
pero parte de ti
conmigo queda,
y una parte de mi,
contigo llevas…
Te alejas para siempre, lo presiento…
Se ha vuelto la alegría un gran silencio…
Y te dejo marchar, como si nada,
mientras se parte el corazón por dentro.
Trémulas gotas de rocío al alba
me traerán tu nombre a la memoria,
y las canciones que entonamos juntos
serán silencios mezclados entre sombras…
Triste, la luna contemplo solitario,
en amaneceres de angustia, sin tus manos.
Temblor de ausencia se anidó en mi alma,
al destruirse los sueños que añoramos…
Los cielos que miramos tantas veces,
sus tonos de ilusión, oscurecieron.
Miles de horas que creí ganadas,
del brazo de otros sueños, lentas fueron…
De aquel Amor, que pareció perfecto,
y de los mágicos tonos que tuviera …
¡De ese Amor …!; ¡Mi Amor…!,
ya nada queda…
al mutar sus luces en tinieblas…
Assunto anterior
Primeira 
