Un perro ha estado tres días, echado junto a la tumba de su dueña, cuyo cadáver ayudó a rescatar bajo el lodo, tras la tragedia ocasionada por las inundaciones en la región serrana de Río de Janeiro y que ha dejado más de 665 personas muertas.

La historia de Leao o caramelo, como lo llaman las personas que lo han visto acompañando a su ama, han conmovido al país
Leao era un perro de la calle que fue rescatado por la familia de Cristina Cesário Maria Santana quienes vivían en Teresópolis, una de las zonas más afectadas por las inundaciones y deslaves.

Cuando la casa de Cristina Cesário Maria Santana y otros tres miembros de su familia fue llevada por un alud de tierra, Leao pudo salir con vida, pero los ocupantes de la casa murieron.

Cuando llegaron los rescatistas encontraron a Leao buscando los restos de sus dueños, y gracias a él se pudieron encontrar los cuerpos.

Desde entonces, Leao se ha negado a dejar la tumba número 305 de Cristina Cesário en el improvisado cementerio de Teresópolis.