Siempre se dice eso de que “el perro es el mejor amigo del hombre”, pero Milo, el terrier protagonista de esta noticia, ha demostrado que el perro también es el mejor amigo del perro.
Milo es un terrier de 6 años que hace la vida normal de un perro, pero también sirve de gran ayuda a su mejor amigo, Eddie, un labrador de siete años que se ha quedado ciego por una enfermedad. Milo va atado a él con un collar de cascabeles para guiar a Eddie, con el que pueden jugar y caminar juntos.
“Ahora Eddie se siente muy ayudado por Milo y juegan juntos incluso en el bosque. Milo siempre tiene un ojo puesto en su amigo, la enfermedad pasó demasiado rápido y esto le está ayudando a acostumbarse a su nueva situación”, explica la dueña de ambos animales. “Milo de verdad se preocupa por Eddie, duermen en la misma habitación y pasan todo el tiempo juntos. Sin Milo, Eddie estaría perdido“.