"No sabrás nada de la vida hasta que tengas hijos",
me dijeron mil veces y saben algo?... tenían razón.
No sabía que mi cuerpo era tan sabio y tan fuerte.
Que
me volvería más humana y más paciente.
Que disfrutaría de nuevo los juegos y las canciones.
Que mis brazos serían cuna y un lugar seguro.
Que mis besos sanarían dolores y heridas.
Que mis pasos serían guía de alguien más.
Que mi voz sería consuelo y melodía.
Que puedo ser tan guerrera y tan valiente.
No sabía que amaría así de intenso.
No sabía...