Un día como el de hoy, pero del año 1946, se dictó sentencia en el Juicio llevado a cabo contra los jerarcas nazis, responsables de crímenes contra la paz, de crímenes de guerra y de crímenes contra la Humanidad. Los jueces hallaron a 19 de los 22 acusados, culpables de alguno de los cargos que se les imputaban. Hess, Raeder y Funk fueron condenados a cadena perpetua. Speer y Schirach a veinte años. Neurath a quince años. Doenitz a diez años. Mientras que Göring, Ribbentrop, Keitel, Kaltenbrunner, Rosenberg, Frank, Frick, Streicher, Seyss- Inguart, Sauckel, Joel y Bormann, fueron condenados a morir en la horca. Aunque este último, recibió la condena en ausencia (más tarde, se confirmaría su muerte durante la caída de Berlín). Increíblemente, los acusados Schacht, Fritzsche y Von Papen, fueron absueltos. El Juicio había comenzado el 20 de Noviembre de 1945 en el Palacio de Justicia de la ciudad de Nuremberg. Lamentablemente muy pocos responsables de la barbarie alemana fueron juzgados, e incluso, muchos jerarcas nazis lograron huir. A Nuremberg llegaron las caras más conocidas del Tercer Reich, al menos, aquellas personas que aún seguían vivas al momento de celebrarse el proceso. Ya que Himmler, Goebbels y el propio Hitler se habían suicidado. Solo Göring llegó vivo a Nuremberg en su condición de gran jerarca nazi. Fue el único condenado a muerte que pudo eludir el patíbulo : se suicidió unas horas antes, dentro de su celda, al ingerir una pastilla de cianuro.