¿Quién no ha oído hablar de los componentes de la naturaleza?... ¿Han escuchado la historia de todos ellos?...Las maravillas de este mundo aparentan ser siempre creación de Dios pero todas tienen su historia…

Érase una vez una hermosa hada llamada Rosaluz. Era amante de las flores y los hermosos campos. Todos la consideraban una niña muy amigable y divertida.

Todas las mañanas Rosaluz salía con su madre a recoger flores en el campo más cercano a su pueblo, dentro del mundo de las hadas. Su madre la amaba mucho y deseaba lo mejor para ella, por eso cuando era niña le entrego una precioso lazo de rubí. Este lazo lo que hacia era protegerla de cualquier mal, evitaba que los animales salvajes se le acercaran, o que algún otro elfo o duende malvado la lastimara.

Un día Rosaluz salio a dar un paseo alrededor del bello lago situado en el centro del pueblo. Mientras recogía flores y tomaba un delicioso baño en las aguas más puras que existían, había alguien que la estaba observando. De repente, del medio del lago, apareció una figura que aparentaba ser un hombre. Rosaluz se quedó sorprendida por la belleza de este sujeto el cual se presento ante ella diciéndole su verdadero nombre, Eros, y reconociéndose a si mismo como el dios del sol.

Rosaluz se presentó y los dos juntos decidieron continuar con el paseo que el hada no había concluido. Luego de pasar la tarde juntos, Eros le preguntó a la bella hada si quería acompañarlo al celestier, que era el lugar donde se encontraban ubicados todos los dioses, desde la diosa de la primavera hasta el dios del invierno. Rosaluz aceptó con gusto, pero le dijo a Eros que ella debía de regresar con su madre a medianoche, ya que a esa hora todas las hadas debían estar sin excepción en el panel de las hadas.

Así fue como pasaron dos meses, el hada y el dios estaban profundamente enamorados y habían decidido casarse. Así fue como organizaron una ceremonia en el palacio de las hadas, la cual se llevaría a cabo antes del anochecer.

Llegado el día de la boda, y cuando todo se encontraba listo, ocurrió algo inesperable.

Rosaluz había desaparecido de su casa, no se encontraba en ningún sitio, simplemente se había esfumado. Su madre sabia que ella no era capaz de hacer algo así justo el día de contraer matrimonio por lo cual se dio cuenta inmediatamente de que algo malo había sucedido. Y así era. Rosaluz había sido secuestrada por el malvado Dios de la tormenta, Ray, el cual deseaba que la bella hada se casara con el.

Rosaluz le explicó a Ray que ella ya tenía un futuro esposo y que no iba a cambiar de parecer por nada en el mundo. Dicho esto, Ray le aplicó una maldición a la pobre hada. Le dijo que a partir de ahora ella dejaría de ser lo que era, que por todas las noches se convertiría en una horrible flor repleta de espinas. Pasadas doce horas desde el hechizo aplicado, Rosaluz moriría sin remedio alguno.

Al enterarse de esta catastrófica noticia, Eros decidió pedirle ayuda el mago del roble, una anciano muy sabio, el cual podría encontrar un remedio para el hechizo.

El mago del roble le dijo a Eros que lamentablemente el poder que tenía Ray era muy grande y que nada podría contrarrestar su fuerte magia. Esta noticia rompió el corazón de Eros.

Y así fue como pasaron 10 horas y cuando ya se acercaba el momento crucial, Eros decidió ir a dar un paseo por el hermoso lago donde había conocido a Rosaluz. Observándose en el reflejo del agua, pidió con toda su alma que existiera algo para remediar la situación, pero nada se le ocurría. De pronto, surgió un ángel del fondo del lago, y, viendo el rostro de preocupación de Eros, decidió ayudarle. Le pregunto cual era el conflicto que tenia y Eros le contó toda la historia. El ángel le dijo que el no tenia la llave para solucionar el problema, pero que podría mejorarlo. Le dijo que para evitar el sufrimiento de ambos, los convertiría en elementos de la naturaleza y así vivirían junto al mundo sin preocupaciones. Dicho esto, y usando su poderosa magia, convirtió a Eros en el sol y a Rosaluz en una bellísima rosa.

Y así es como hasta el día de hoy las rosas abren sus bellos pétalos con la llegada del sol, mientras Rosaluz esta junto a Eros, y como a la noche, cuando el sol se esconde en el horizonte, las flores cierran sus pétalos deseando poder volver a tener el calor del sol junto a ellas, tal como lo hacían Eros y la bella hada Rosaluz.

DE LA NET