La
palabra en inglés proxy
significa intermediario
en español.
Un proxy,
en una red informática, es un programa o dispositivo que realiza una
acción en representación de otro, esto es,
si una
hipotética máquina A
solicita un recurso a una C,
lo hará mediante una petición a B;
C
entonces no sabrá que la petición procedió originalmente de A.
Esta
situación estratégica de punto intermedio suele ser aprovechada
para soportar una serie de funcionalidades:
proporcionar
caché,
control
de acceso,
registro
del tráfico,
prohibir
cierto tipo de tráfico, etc.
Su
finalidad más habitual es la de servidor proxy, que consiste
en interceptar las conexiones de red que un cliente hace a un
servidor de destino, por varios motivos posibles como seguridad,
rendimiento, anonimato,etc.
Esta
función de servidor proxy puede ser realizada por un programa
o dispositivo.