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Introducción: Hyoga, el caballero del Cisne y Shiryu, el caballero del Dragón han llegado a la casa de Piscis, han logrado un recorrido que no se completaba desde hace centurias. ¿Cuál será la sorpresa que les depara el destino en la última de las casa?
KnS vs Ng Lc
El recorrido de los doce templos antiguos
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Los golpes impactan en el cuerpo de Hyoga y lo hacen caer de boca, golpeando su cuerpo contra el suelo de una forma tan potente que incluso crea un pequeño crater en donde cayo. - Ahg - dice mientras sus ojos estan cerrados como si hubiera quedado inconciente aparentemente por el terrible ataque
Hyoga del Cisne |
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*Cayendo entre la espesura de polvo y piedrecillas, el Santo de Dragón se estrella contra las escalinatas casi bajo la puerta trasera de aquel templo. El sonido es sordo y sobre cogedor, como si fuese un cuerpo inanimado, más el espectáculo de cada parte de su cuerpo rebotando sobre el lozado es muy fuerte. La Armadura ya afectada del anterior enfrentamiento parece desmenuzarse un poco más, de forma que se aprecia como evidencia varios agujeros, como hilos de sangre que fluyen por sus ropas raídas y su Armadura esmeralda, tinta en sangre en algunos puntos. Los cabellos largos y oscuros se revuelven desordenados en torno a su figura, tiñéndose a su vez de sangre. Aquel fragor lumínico se apaga de inmediato, en tanto el joven se ve estático con los ojos semi abiertos. Las pupilas apenas demuestran alguna reacción, como si se contrajeran y luego dilataran, en clara manifestación de semi conciencia. "Hyoga...". El aire mediterráneo sacude algunos cabellos y tal situación parece reanimar un tanto al oriental. "Esa brisa... El olor a sal, no sólo me recuerda nuestra pelea de hace tanto tiempo, sino también me recuerda a Rozán..." Los dedos se mueven un tanto, en ligeras contracciones, mientras que las pupilas toman una forma definida, buscando a su compañero. - Hyoga... - Exclama con voz queda, templando su diafragma y garganta para emitir tal sonido, esforzándose para levantar su cabeza hasta ubicar a su compañero. - Hyoga! - *
Ryuu Seiza no Shyriuu || Kibo no Senshi |
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| **Aquel fuerte lazo de amistad de los jóvenes bronces, hacen que Albafika cierre los ojos y recuerde el lazo de su maestro, sin demostrar nada en su rostro tranquilo y con simetría perfectas comenta -les dije que se quedaran esperando- al terminar abre sus grandes de que a su vez sostiene una rosa entre su mano, dando pasos firmes camina hacia la escalinata que conduce con la matriarca, dejando atrás a los caballeros de bronces, el dorado se detiene y da media vuelta para quedar ahí protegiendo los escalones, ahí erguido el viento comienza a moverse haciendo que su cabello oculte la mitad de su rostro. la mirada se fija y espera que los caballeros se queden quietos**
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Al mismo tiempo Hyoga logra escuchar su nombre pero en la voz de su maestro Camus. - Hyoga, Hyoga, ¿que te sucede? Levantate - y de forma mental se puede ver a Camus y a Hyoga en las tierras de Siberia durante un entrenamiento - Levanta Hyoga. Te he dicho que la fuerza de los caballeros de hielo no esta en destrozar la materia, si no en detener el movimiento de sus atomos - - Pero maestro... no puedo igualar su frio. Nunca podría congelar la armadura de oro. - Luego todo regresa a la normalidad y el Cisne parece estar en un universo oscuro donde los recuerdos siguen siendo los que gobiernan su mente - Durante la batalla de las doce casas logre despertar mi septimo sentido y puso congelar la armadura de oro y durante la batalla en el inframundo derrote a los espectros con mi poder... y todo para proteger a Saori y al mundo que mi madre amaba. !No puedo rendirme ahora! - Dice al momento en que sus ojos se empiesan a abrir - Shiryu... no voy a rendirme, voy a derrotar a este caballero de Piscis... - dice con un gran trabajo mientras trata de levantarse, algo que se nota con mucho esfuerzo a grado tal que un aura blanca lo rodea como si fuera una nube de energia que sube y baja de forma desordenada en su entorno
Hyoga del cisne |
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*Al mismo tiempo, el Santo de Dragón observa a su compañero y aquel nuevo antagonista más allá. "Es fuerte, incluso podría serlo más que Afrodita... Derrotarlo será un gran esfuerzo" Con estas palabras en su mente hilvana el nuevo aspecto del escenario que ahora se ofrece para los Santos de Bronce. "Esa es tu verdadera energía..." Mirando ahora a su amigo, siente aquel fragor del aura congelante del Cisne, misma que le da ánimo y fuerza, para que a su vez inicie la tensión muscular en el cuerpo del joven oriental y así un esforzado puje para levantar su cuerpo maltrecho, mientras caen algunos fragmentos de su Armadura. Torpemente se queda de pie, mientras eleva su rostro hacia el pisciano y luego hacia lo alto de aquel sendero en donde se alza la Estatua de Atenea. - Que así sea Hyoga! - Con este grito, procura conectarse con su amigo, entendiendo las intenciones de aquél. "Nos veremos más adelante Hyoga..." Con el espíritu en alto y el corazón encendido, el de largos cabellos gira su mirada ahora enfocándose en el rubio. De repente su cuerpo parece incendiarse y de un momento a otro, una cobertura energética de color esmeralda recubre el cuerpo del Dragón. Los puños se tensan con mayor fuerza, especialmente la diestra, y entonces se lanza en carrera, devorando el espacio ante el pisciano. - ROZAN! - La figura de un Dragón se observa a sus espaldas, como si se fusionara en tal imagen. - SHO! - Un rugido grave, característico de esta bestia del mítico oriente, recorre todo el espacio, causando cierto vibratto en las estructuras y mayor fuego verde en el puño del pelinegro. - RYUU HAA!!! - El puño se abalanza con gran enjundia, liberando una fuerza mítica, una que se configura en el Dios Dragón, mismo que serpentea causando gran presión sobre el ambiente. Las fauces y garras se aprestan para destrozar, en tanto que los ojos de éste brillan con gran poder, sin apartar la figura del pisciano como el objetivo de tal embestida.*
Ryuu Seiza no Shyriuu || Kibo no Senshi |
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| **el frió viento comienza sentirse en todo el lugar, mientras que el dorado contempla como los osados jóvenes se incorpora con gran valor a pesar que el veneno debe estar circulando dentro de ellos, -ya deberían estar muertos- siente como el caballero de cabellera larga se enfrenta con gran valor. -mmmmm- fijando su mirada escucha como aquel caballero lanza su ataque directamente, pero el dorado contempla como la postura y técnica hace surgir con gran gala aquel dragón mitológico, "acaso quieres pasarme" el dorado siente una gran fuerza que se precipita hacia él, por lo que actúa y flexiona ambas rodillas pero su cuerpo se empuja hacia atrás dando un gran salto hacia las escalinatas, en el aire la rosa que sostiene en la mano de color negra la suelta y con gran fuerza pronuncia -Piranha Rose- la mano derecha lanza una rosa directamente al joven caballero, capaz de destruir y darse paso a todo, mientras que de su cuerpo del pisciano surge docenas que sale directamente a ambos guerreros, como cardumen de pirañas ansiosas de destruir los cuerpos de los jóvenes, mientras que cae de pie en las escaleras en mente comenta "en vez de reducir su cosmos, este sigue aumentando, pero..." interrumpiendo su pensamiento un halo de sangre comienza a recorrer en en la frente, su dedos lo lleva a su rostro y mira como aquella simple técnica pudo ser capaz de tocar, una seriedad se refleja en el rostro la mirada se enfoca a los dedos manchados de sangre, el guardia de la ultima casa regresa de nuevo su mirada de nuevo con los caballeros de bronce**
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*El Dragón esmeralda ruge con gran algarabía, estrellándose
poco a poco con las innumerables rosas. “Tal como pensé, intentarás bloquearnos
el paso.” El puño diestro arroja algunos hilos de sangre que de inmediato se
desperdigan por todo el lugar a causa de la presión, y más allá otros hilos de
sangre se conjugan en varias partículas de gotas, que fluyen sin dirección
alguna, creando una especie de nube rojiza, sin embargo ésta apenas es visible
mientras se mantiene la presión energética desde cada célula del Bronceado. –
Vamos Hyoga!!! – Claudica de tal forma altisonante, convocando a su compañero,
entre tanto sin denuedo ni temor, el joven mantiene firme su puño, su mirada y
su aliento, presionando con fiereza sobre aquel Dragón mítico, cuyas garras y
colmillos destilan todo un candor esmeralda en medio del cual un sobre cogedor
rugido tanto de la bestia como del humano se funden y en medio de tal un contra
punteo se escucha claro y una silueta parece fraccionarse de aquel fulgor del
Dragón de Rozán, todo aquello sucediendo en los ínfimos instantes en que continúan
los embates de los fieros guerreros. “Es tu momento amigo. Hazlo”*
Ryuu Seiza no Shyriuu || Kibo no Senshi
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| (pido prologa para este domingo, saludos y gracias). |
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Y mientras tanto, Hyoga levanta ambas manos hasta unirlas en lo alto para poder entrelazar sus dedos "Shiryu, no podemos detenernos ahora, Ikki, Seiya y los otros siguen luchando y la muerte de Shun no puede ser un sacrificio envano. Maestro Camus, es hora que ponga en practica todo eso que me enseño" Mientras piensa en su mente regresan los momentos de la batalla en acuario de las doce casas - Shiryu, vamos adelante, Este caballero no nos detendra - Y de ese modo aura de su energia se acrecenta hasta dar forma a una mujer traslucida que lleva un jarron en su hombro, esa imagan, sobre el cuerpo de Hyoga empieza a moverse y a decender el jarron mientras los brazos de Hyoga ban bajando al frente - Maestro Camus, esta es la tecnica que me enseño arriesgando su vida. ¡la ejecucion de la Aurora! - Dice con fuerza al tiempo que su brazos llegan al frente y dejan escapar una bola de energia inestable que se avalanza contra las rosas negras congelandolas en el camino mientras sige directo contra Albafica buscando impactarlo con su poder congelante aprovechando que acaba de evadir una tecnica y acaba de atacar, esperando que la resistencia y habiliades humanas ya hayan hecho su trabajo y por muy caballero dorado que sea, ya no deba o pueda hacer una accion más en tan poco tiempo
Hyoga del Cisne |
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| **El dorado sabe el riesgo que pasara si estos se acercan a él, su mirada fija contempla como el caballero de larga cabellera como hace armonía con su compañero, el caballero del hielo comienza emanar su cosmos mirando tal intención el frió intenso se apodera en todo el lugar, el pisciano emana su cosmos con gran fuerza teniendo aun fuerza y condición mira tal técnica, "es impresionante el cosmos de los jóvenes, pero.....", al mismo brillo puro envuelve al guardián poniendo sus brazos cruzados enfrente con gran impacto llevando fuerzas dichas el impacto fue directo haciendo impactar en rocas y escaleras llevando a desaparecer entro de escombros y las escaleras y piedras, ahí el caballero permanece con dentro sin rastro alguno. Solo el ruido de piedras caer resuena. un aire gélido de color rojo recorre todo el lugar. Sera que el poder de un solo caballero fue capaz de derrotar?, a pesar que sus sangre y sentidos tuvieron estar desapareciendo por el veneno de sus rosas, aun queda el misterio de ese color que sigue en el ambiente**
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*Toda la fuerza de estos combatientes, tan feroz y única aligera por completo la tranquilidad habitual de aquel escenario, en donde fracturas y fisuras se divisan por doquier, cubiertas algunas de rosas y otras de una capa de hielo. Los largos cabellos caen sobre las espaldas del Dragón, carne que muestra gran destrozo a causa de las rosas pirañas al ser la primera línea de fuego el cuerpo del dragón, aunque dichas rosas hayan sido contra atacadas con las técnicas de los bronceados. Erguido en una escalinata observa lo alto de aquellas gradas, en donde se levanta el salón de la matriarca. - Estamos tan cerca... - Con éstas palabras flotando en el aire, inicia un leve caminar, casi inconsciente, entre chocándose con piedras, mármol, columnas y gradas. La única visión de este gallardo guerrero se fija en el salón aquel que es ahora su objetivo y como si hubiese perdido por completo dominio de su cuerpo, sólo es necesario un traspiés y en seguida el cuerpo abandona el sendero, y tal abertura en la piel conjugada con el veneno causa pérdida de balance, y al instante siguiente se observa el cuerpo del Dragón rodando por un flanco de aquel camino montañoso hasta caer con estrépito varios metros más abajo, con los ojos cerrados, y ninguna otra prueba de auto dominio, como no fuera un ligero tic en sus dedos.*
Ryuu Seiza no Shyriuu || Kibo no Senshi |
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| (respondo hoy en la noche) |
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No he podido respoder por qué Albafica dijo que lo haría. Para no romper la continuidad no he respondido pero ya han pasado muchos días incluidos los del fin de semana. Solicito que si el día de hoy no responde Albafica, se me permita manipular para que esto no se detenga.
Hyoga de Cisne |
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| (mil disculpas, con harto trabajo y he estado de viaje)
**El silencio reinaba, solo el circular de aquella neblina roja alrededor del montículo de piedra donde se encontraba el dorado. El joven de larga caballera sigue su andar, por lo que aquel caballero sabe el riesgo que corría, dentro un ruido de crujir de piedras se comienza reinar en toda la zona, con gran fuerza un cosmos surge dentro de ahí, desapareciendo todo rastro de piedras el dorado se encuentra sentado cruzado de piernas tranquilamente, con pétalos negros rodeándolo -es de admirar tu gran poder caballero bronce- el cuerpo del dorado se encontraba con lesiones con presencia de áreas congeladas en la regiones no protegidas de la armadura -si no fuera por mi armadura, y que tu cuerpo este circulando el veneno de las rosas, no hubiera sobrevivido- su rostro se dibuja una sonrisa se incorpora y comenta -ahora tu y tu compañero morirá, tan solo unos pasos mas que de y este va fallecer por mis mas letal rosas- elevando su cosmos aquella densa neblina roja comienza a formar atrás de el una gran rosa roja misma -Caballero de bronce has ganado mi honor y mi respeto, por lo que te daré la técnica mas poderosa de piscis- con elevando su brazo el dolor que se sentía no le importaba por lo que resuena con gran impulso -Espinas carmesiii- moviendo su brazo hacia al frente la neblina que rodeaba comienza a solidificar formando espinas mismas que lleva la mas letal del veneno, por todo las se abalanza hacia el joven guerrero, el dorado contempla como su poderosa técnica se abalanza, mientras que su amada armadura se da presencia una placa hielo- |
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¿Espina Carmesi? "No habia escuchado esa tecnica antes Afrodita no" AHhhhhhhhhhg - Dice Hyoga muentras una gran marea de lineas rojas lo empieza a impactar por todo el cuerpo, clavandose en su humanida con tal fuerza que lo logra lanzar varios metros hacia atras, haciendolo caer por los escalones de aquella doceaba casa, hasta detenerse en medio de un gran chorro de sangre. - Athena... Saori. - Dice finalmente, como si fuera una despedida, parece entonces que finalmente el último de los caballeros de bronce a caido.
Hyoga de Cisne
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