Cap 1 - Caballeros de Athena - Misión - Saint Seiya Victories

-...¿Que?...¿Qué es esa estrella que surca el cielo y se aproxima al santuario?...-

Involucrados: Todos los Santos actuales al Servicio de Athena

Modo: Fic o Rol (En caso de tener Msn)

Objetivo: Los caballeros podrán estar en cualquier área del santuario, pero siguiendo al tema ya iniciado, un cambio trae algo inesperado al santuario... quizá una nueva amenaza, por lo tanto, deberán redactar como se percatan de la llegada de un cosmos al santuario y permanecer en sus puestos dependiendo de sus rangos, deben de defender al santuario a como de lugar.

Tiempo de entrega: Tienen 6 días para subir el archivo, de lo contrario se lo tomará como inactividad.

**La noche cae sobre el Santuario de Athena, y con ella, el presagio maldito de las huestes del horror. Dentro del quinto templo del zodiaco, un muchacho revestido en una armadura del color del sol que chispea al roce de la luz de las antorchas y acompañado con una galante capa de seda blanca avanza en dirección de la entrada de su recinto. Su cabeza es coronada por un yelmo de oro que imita a la perfección las crines de un león; y su mirar esmeralda refleja la determinación y valor que habitan en su corazón. De golpe, una sensación de desconcierto se apodera del muchacho, cuyo nombre es Aioria. -¿Qué es este cosmos extraño en el refugio?- se cuestiona, mientras apresura su paso a la entrada de la quinta casa, flanqueada por dos fieros leones de piedra. Al estar bajo el cielo teñido de oscuridad, justo fuera del dintel de su puerta, el león se percata de una veloz estrella fugaz que cruza el cielo que presagia un nuevo horror para azote al planeta. -¿Qué demonios ocurre?- inquiere el león lanzando su mirar desde el la escalinata afuera de su templo a la parte del santuario de donde proviene aquel cosmos extraño. ** #cc5100

**Después de muchos años, los caballeros han sido convocados por el Patriarca y los de mas alto rango, aquellos con la velocidad de la luz y el dominio del séptimo sentido han sido emplazados en sus templos, en el Octavo Templo, el del Escorpión un joven permanece sentado en la escalinata, la luz de la luna reflejada en su armadura produce hermosos destellos que simulan estrellas tintileando en el cielo, apoyado el codo en una rodilla y la mano sosteniendo el peso de su cabeza, una expresión de aburrimiento y hastío son claramente visibles en aquel hombre. --Maldición-- murmura y continúa, --¿Para que demonios nos habrán llamado?, todo esta muy tranquilo y aburrido, necesito algo de acción para no dormirme en este sitio-- su personalidad ansiosa y mortal le hacen proferir estas palabras y como si su deseo hubiera sido escuchado por los dioses una sensación de peligro se apodera de su cuerpo; --¿Pero que dem......?-- es su expresión al voltear al cielo ver el paso de una extraña estrella fugaz, --Esto no es normal, se siente un cosmos maligno, como si esa estrella lo trajera-- piensa para si mismo y parándose inmediatamente su expresión cambia y una loca sonrisa mezcla de ansiedad y alegría se presentan, la adrenalina recorre cara rincón de su cuerpo, la puerta a un evento de gran magnitud se ha abierto, ¿Que pasará en el Santuario?**

**La misteriosa noche cobija el santuario una vez más, iluminado apenas por el tenue brillo de las estrellas que llenan el firmamento con su hermosa y delicada luz. Todo parece tan tranquilo y lleno de paz. La atención se centra en un templo, el primer recinto del santuario de Athena y allí, en la entrada de tan antigua y bella estructura se aprecia la figura de un hombre esbelto con vestiduras doradas. Su cabello lila se agita conforme a la brisa nocturna al igual que su capa, su mirada meditativa enfocada en la lejanía "¿Qué significa este cosmos?" desde hace apenas un instante, los sentidos del caballero captaron un cambio en el ambiente. Algo estaba a punto de suceder ¿Pero qué? Sin poder responder a esa pregunta sus ojos se cerraron lentamente. Los cuernos de carnero que reposan sobre sus hombros sueltan un pequeño brillo a causa de la blanca luna. Su corazón está inquieto pero su cuerpo no lo demuestra, se muestra seguro y calmado, listo para detener a todo aquel que intente traspasar su morada**

*Contrario al frío yermo nocturnal, la sexta casa que forma parte del sendero de los doce templos permanece en cálida serenidad pues, como es cotidiano, su regente y guardián permanece inerte en el interior de tan magnífica edificación haciendo que su cosmos arda perpetuamente con un flujo calmo y manso, como si el sol resplandeciera día y noche en el interior del santuario protegido por el Santo de Virgo que, en completo silencio, medita profundamente alcanzando y llenando los vacíos que los hombres luchan por comprender, charlando e interactuando con el sabio Buda en un pasivo transe que le deja ver como una escultura flotante en el centro de aquel sacro Partenón cuando, intempestivamente, una vehemente vibración rompe el perfecto balance de cuerpo y mente de aquel de rubia cabellera, provocando enseguida que despegue sus labios y deje brotar el sonido de su voz sensata -Esta presencia... Ni siquiera fui capaz de verla venir- Exclama al momento en que aquella aureola dorada que le contorneaba se desvanece sin más -¿Será acaso que...- Cuestiona pausando su exclamar pues, con indiscutible incertidumbre, los ojos de aquel quien es conocido como el más cercano a los dioses se entreabren dejando al vislumbre un brillo estoico y majestuoso que brota de ellos; siendo aquello apenas un efímero instante que se apacigua al volver Shaka a desplegar sus párpados por sobre tan mítica y divina mirada -El Santuario pronto entrará en una época siniestra y peligrosa- Exclama, renovando el pálpito cósmico de color oro que le envuelve y resguarda, finalizando aquella abrupta interrupción con un último pensamiento antes de ingresar nuevamente al estado de meditación, preparando su cuerpo y su cosmos para lo que se avecina -Una vez más los Caballeros de Athena se harán cargo de resguardar el amor y la justicia en este mundo-*

KAMI NI CHIKAI OTOKO
Virgo no Shaka