Técnicas

Scarlet Needle o Aguja Escarlata

Es el ataque principal de los santos de Escorpio, el cual puede dispararse tanto en estado estático como en movimiento. Consiste en "picar" en el cuerpo del enemigo varios puntos que igualas a las estrellas de la constelación del escorpión desde las pinzas hasta la cola, dejando el corazón del escorpión (Antares)  para el final, con una serie de disparos a la velocidad de la luz que pueden ser lanzados de uno en uno, en grupos o todos en un solo movimiento. Los síntomas al recibir el primer disparo son similares a los que tiene una persona al recibir la picadura de un escorpión (dolor agudo, quemazón y extravasación de sangre en los tejidos afectados por el veneno) añadido a la pérdida de los sentidos conforme avanza el tiempo. Esta técnica es extremadamente difícil de esquivar dado que el santo posee la velocidad de la luz ademas de una extrema puntería y como se vió en el anime puede efectuar esta técnica aunada a movimientos de zig zag y un lado a otro haciendo aún mas difícil predecir por donde llegará el ataque.

Scarlet Needle Antares o Aguja Escarlata Antares

Antares es la estrella más luminosa de la constelación, una supergigante roja cientos de veces mayor que el Sol. Esta estrella, situada en el corazón del escorpión, es la que lleva el nombre del ataque principal de Milo. Antes de realizar esta poderosa técnica debe de haberse golpeado los catorce puntos de las otras catorce estrellas en el cuerpo del rival. También cabe mencionar que éste no solo es un ataque mortal, ya que posee la característica de revertir el efecto de los ataques anteriores si Milo desea salvarle la vida a su contrincante. 

Restricción

Es una técnica que sirve tanto para el ataque como para la defensa. Consiste en paralizar al enemigo por medio de ondas que penetran en el sistema nervioso del adversario, aunque aparentemente no da resultado contra caballeros de los hielos. Este tipo de guerreros parecen poseer la habilidad de contrarrestar esta técnica por medio de una barrera ambiental. Es similar al miedo que produce la mirada del Escorpión en la víctima.