Libre de las Circunstancias

Bernardo Stamateas

Ezequiel 37: 1-12

Cuatro principios para ser libres de  las Circunstancias.

1- Tengo los sueños de Dios, mi victoria está asegurada.
Primero debo chequear si el sueño es de Dios.
Si estas embarazado de un sueño de Dios,  el sueño está en tu espíritu, estarás libre de las circunstancias -no importa cuales sean-, y caminarás sabiendo que está en tu corazón.
"Me dijeron que es imposible; que nunca antes nadie lo hizo; que escapa a mi capacidad; que estoy loco por esperar lo que espero; que tendré que recurrir a Dios para su financiamiento y El siempre me ha sostenido en los momentos difíciles de prueba en la vida."
Nadie puede matar los sueños del Señor.

Un día vinieron y le dijeron: "Señor, Lázaro está enfermo". Y el Señor dijo: "Lázaro duerme."
Pasaron cuatro días, cuando Jesús llegó Lázaro estaba muerto, vendado, atado, metido en una tumba con una piedra adelante y toda la familia llorando, le dijo: "Señor si hubieras estado aquí, mi hermano no habría muerto."
Y Jesús les dijo: "María, Marta, les he dicho que si creen verán la gloria del Señor, corran la piedra", y Jesús gritó:"Lázaro, levántate" (porque para Jesús, Lázaro nunca estuvo muerto, siempre estuvo durmiendo.)

Podrán ponerlo en una tumba, matarlo, vendarlo, la gente podrá llorar y decir que "tu sueño se murió", pero cuando el Señor venga y se acerque te dirá: "Yo te dije que nadie mataría el sueño que te he dado, solamente está durmiendo y lo voy a volver a levantar porque todo lo que viene de Dios jamás muere."

Si viste el sueño en tu espíritu cuando los de alrededor no lo vieron, es un sueño de Dios.
Si el sueño te ha empujado a buscar gente victoriosa, es un sueño de Dios.
Si tenés más enemigos que antes, es un sueño de Dios.
Si es tan grande que ha dinamitado tu manera de pensar y tenés que cambiarla para poder albergar la cosecha que El te va a dar, es un sueño de Dios.

Todo lo que Dios te da es
 a Su imagen y semejanza, Él sopla en nosotros Su vida y nadie lo puede matar.

2- Tengo una voluntad independiente, no soy afectado por el medio ambiente.

Debemos desarrollar una voluntad independiente de las circunstancias no importa cuantas sean.
Tengo la habilidad y la capacidad para que las cosas que pasen fuera de mi no me afecten.

Pablo estaba en la cárcel y algunos predicaban por envidia, y cuando él se entero que predicaban a propósito para añadirle dolor dijo: "No importa, si Cristo es predicado me gozo en eso"
Pablo había aprendido a ser libre de la gente. Estaba en la cárcel mugrienta, apestosa, llena de esclavos, y -gracias a que estaba en la cárcel- la gente se animaba a predicar del Señor porque sabían que él estaba firme.
Pablo aprendió a ser libre de las circunstancias, y dijo: "Tal vez me muera o no salga de la cárcel, pero si muero me voy con Cristo que es mucho mejor",  también era libre de la muerte.
Y se puso a escribir cinco libros que trajeron el avivamiento.

Cuando el diablo te cierra un camino, Dios te abrirá cinco nuevos y lo que no pudiste lograr por una vía lo lograrás por otras.

Dios nos entrenará para que ser libres de las circunstancias,  no seremos afectados por el medio y no necesitaremos de nada ni de nadie para ser feliz.

Y cuando alguien te diga no tenés plata, no tenés salud, estas solo, no tenés amigos,  sos pobre, estás vieja, decile "no me importa".

3- Cada problema es una oportunidad de éxito.

El problema es cómo lo vemos, cómo interpretamos la dificultad.
Si lo vemos  como un peligro, eso vendrá, pero si lo vemos como una oportunidad de crecimiento, de que Dios ponga una medalla de triunfo en tu vida, como un entrenamiento que te está preparando para el futuro y te encontrará listo para disfrutar la bendición, será muy distinto.

Antes de darte éxito y bendición, Dios te va a dar presión.

A Dios le interesa que podamos administrar la presión:
-Si sabes manejar los momentos difíciles, donde todo parece dado vuelta, donde la gente que tenía tu teléfono lo tacha de su agenda,
-Si sabés administrar esos momentos, estás listo para administrar los momentos de bendición.

A la gente no se la conoce cuando las cosas van bien, a las verdaderas personas se las conoce cuando estás pasando por el valle de la sombra de la muerte, cuando no tenés dinero y las cosas van mal. Nunca evalúes cuando las cosas están bien porque ahí somos todos maravillosos, los conoceremos en momentos de dificultad.

Si sabes administrar presión, calificas para administrar bendición.

No es un problema, es una oportunidad para ver la gloria de Dios.

Cuando David se paró delante de Goliat vio la oportunidad de casarse con la hija de Saúl, de entrar en el reino.

Nuestra dificultad es que reaccionamos a los problemas como lo hacían nuestros padres; cuando viene un problema nos escondemos, nos borramos, porque es lo que vimos ellos.
Ante un problema mucha gente es agresiva porque era la única manera de sobrevivir, ya que sus padres respondían gritando, golpeando, rompiendo todo. Usaban la ley del más fuerte y los que crecimos con ese modelo "usamos esa misma ley."
No tenemos que resolver los problemas,
la fe hará que veamos la solución y se transformen en oportunidades escondidas, bendiciones que vienen.

Y Dios dice: "Antes de darte la bendición al problema, quiero que aprendas a administrar presión, porque si bajo presión sos fiel, te congregas, ofrendas, servís, entonces estarás listo para que faraón te abra la puerta y te de todas las bendiciones."

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4-Muevo mi fe.

Fe es un título legal.

La Biblia tenemos que leerla de tres maneras:
1-Como un soldado. Que la lee buscando una orden para obedecer.
2-Como un enamorado que le dice a su amada cosas de amor, promesas, abrazos de amor.
3-Como un abogado.
Dios te va a mostrar en qué momento y cómo debes leer la Biblia.
Cada promesa es una ley y nadie las puede truchar; no hay testigo falso que lo pueda bloquear.

Dios es un Dios legal, no funciona por emoción o por opinión, funciona por leyes;  Él mismo tuvo que cumplir lo estableció y mandó a Cristo a morir en la cruz.
Cuando firmas la escritura es el título legal de que la casa es tuya;
Cuando compras un coche firmaste un papel que dice que es tuyo.

Fe es el título legal que dice que todo lo que pidas creyendo Dios te lo dará, y certifica que lo que declarás es tuyo.

La fe se mueve por mí  hablar.

La fe es tu sierva.
Los discípulos le dijeron a Jesús: Señor auméntanos al fe.
Y Jesús les dijo: "No me tienen que pedir, porque no es cuestión de tamaño, es cuestión de semilla". "La fe es como un grano de mostaza."

No importa el tamaño, la semilla es pequeñita y puede mover una montaña, lo importante es que la siembres.
No digas: "Tengo poquita fe y necesito un poco más".

Sembrá la fe que tenés, hablando.

Jesús inmediatamente les dijo: ¿Qué amo que llega a su casa le va a decir al sirviente que se bañe y coma primero y si tiene tiempo lo atienda a él?
No, cuando un amo llega a su casa le dice a su sirviente que lo atienda, le ponga la mesa, le encienda el televisor  y después que haga lo que quiera.
Jesús dice: "Así, la fe es tu sirviente, que está esperando que le des órdenes.
La fe oye, camina, corre y hace lo que le decís, pero ¡es vaga! y si no le decís nada no hace nada.
Tenés que usar tu fe, decí: "Fe tráeme el coche ahora mismo; ahora buscá mi casa en el nombre de Jesús"
Y la fe, que es tu sirviente, va a tener que ir porque es un título legal.

La fe no obedece sentimientos obedece ordenes; y no traerá todo junto sino de a poquito.

Aun cuando te estés muriendo, decí:
"Me traes sanidad, porque por la llagas de Cristo estoy sano."

No hables mentiras porque atan la fe.

La fe no niega la realidad pero no la acepta como destino final.

Las enfermedades incurables se curan desde adentro a través de la fe, y cuando te digan: cáncer, artritis, depresión, ése es el nombre de la enfermedad pero hay un nombre superior, el de Jesucristo, sobre lo que debe salir de tu vida.

El Nombre sobre todo nombre.

Mantené tu confesión hasta el último minuto -no la cambies-, y determinarás la atmósfera con el hablar positivo y en fe.

Lo único que moverá tu fe será lo que declares con tu boca.

La fe no es nuestro Dios es nuestro siervo y, no importa lo que pase afuera, nada me afectará.
En la pobreza y en la riqueza todo lo puedo en Cristo.

Dios llevó a Ezequiel en visión delante de un valle de huesos secos - un cementerio donde literalmente era un lugar de pelea-, que los cuervos habían comido y el sol había secado, estaban todos separados y esparcidos.
Cuando Dios te lleva a un lugar difícil no es para que te mueras allí sino para que tengas vida.

Y Dios le dijo: "Profetiza a los huesos. Ezequiel háblale a los huesos lo que legalmente te he prometido".
Y todo lo que estaba seco, separado se junto con lo que le correspondía.

Todo lo que el diablo dividió en el 2006, Dios lo volverá a unir en el 2007.
En el mismo lugar donde fuiste derrotado, donde hubo huesos secos, donde fuiste humillado, Dios te dará la revancha a través de tu confesión de fe, serás exaltado y se te abrirán las puertas otra vez, porque donde los huesos estaban muertos volverá la vida de Dios.

Perseverá en tu declaración.

No podés venir cuando podés, es tema de vida o muerte, fe tiene que ver con vida: se paró ante los huesos y les dijo: "huesos vuelvan a vivir, vuelvan a unirse, habrá tendones, músculos, arterias" De pronto hubo un ruido, se unieron todos, estaban todos armados pero les faltaba vida, se había cumplido la primera parte.

Soltás fe y la fe hace algo, pero no todo, esto es para que aprendas a perseverar.
Y Dios le dijo que vuelva a hablar, pero no a los cadáveres, al espíritu de vida para que venga de los cuatro vientos.
Y Dios cambió la declaración profética: "Espíritu de vida ven de los cuatro vientos"
Y los hombres se pusieron de pie, todo lo que cayó en el valle de los huesos secos volvió a tener vida, todo lo que el diablo te quitó volverá a ponerse de pie.

Llamá al espíritu de vida y completa la obra, poné de pie todo lo que está caído.
Y dice la Biblia que se pusieron de pie y era como un ejército, porque el que profetizó era un general.

Levantarás las cosas de acuerdo a tu actitud: cuando adores, cuando hables que sea como un general del Señor, ponete de pie y si Dios te dijo que hables a los huesos es porque sabe que vivirán.

Los juntaste, le impartiste vida pero la tierra se la daré Yo; vos haces y Dios termina de rematar lo que empezaste.
Oír y hablar, oír y hablar; ese es el secreto. Muevo la fe y hablo lo que oigo.
Dios le dijo a Ezequiel y él obedeció.

Si Dios te llamó es para que termines las cosas y en victoria, no es para estar y no estar. Oír y hablar.
Una empresa naviera estaba contratando personal, y todos estaban esperando a que le llamaran. En medio de esa bulla una persona se levanta y va a hacia la ofician, minutos después sale de ésta con un contrato en la mano. Todos le preguntaron "Pero, ¿cómo? " Y le dijo: "Lo que pasa es que mientras todos ustedes estaban esperando, contando chistes, hablando, yo escuché la señal por clave Morse que decía: "el primero que escuche la señal y entre en la oficina tiene el contrato".
Hay un mensaje que Dios te quiere dar, pero tenés que estar atento: oír y hablar.

Señor estoy cerrando este año en tu casa, escuchándote y declaro Padre que la fe que es mi sirviente irá al norte y traerá prosperidad, al sur y traerá sanidad, irá al este y traerá unidad, irá al oeste y traerá multiplicación. Declaro que el espíritu de vida levantará todo y que hay victoria en Jesucristo.
En este año hemos hecho muchísimas cosas, los huesos se juntaron ( ya todos conocen  a Presencia de Dios) pero todavía están muertos.

Me dijo el Señor que el 2007 es el año del Espíritu Santo, donde llamaremos al espíritu de vida, porque ya hicimos la primera etapa y en el 2007 el espíritu de vida va a venir sobre los cadáveres y serán un ejército del pueblo del Señor.
En el 2007 veremos a gente levantarse de la nada, con el Espíritu de Dios encima porque hubo una iglesia que estuvo confesando avivamiento.
En esa gente que se va a levantar habrá gente que se levantar de la droga, del suicidio, de la locura, del legalismo, de la cárcel, de la muerte, de las culpas, del robo, del ateísmo, de la religiosidad, de la depresión, de los cánceres, gente que estaba tirada pero les pasó alto porque este año hemos movido el mundo espiritual pero en el 2007 la iglesia va a estar llamando al Espíritu santo de los cuatro vientos y se van a levantar.
Y en el 2008 Dios nos dará la tierra. Me dijo: Disfruten el 2007 porque verás a tus hijos, a tu familia, a tus vecinos, a los líderes de la nación ponerse de pie, porque la vida de Dios cuando alguien la desata hasta el más muerto se pone de pie. ¡2007 Allá vamos, sopla espíritu de vida, levanta Señor a tu pueblo! ¡Sobre la ciudad! 

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Pastor Bernardo Stamateas