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General: Si pudiéramos comparar a la Masonería con algo,
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| De: Alcoseri (Mensaje original) |
Enviado: 10/02/2013 01:07 |
Si pudiéramos comparar a la Masonería con algo, la compararíamos a un aparato de televisión, donde cada cual sea masón o no, sintonizaría un canal en especial, y si esa persona, pudiera decirse no supiera que el aparato receptor puede captar cientos de canales, pensaría que lo que ve es lo único que se pude sintonizarse, incluso que pudiera mejorar la calidad del audio y de la imagen de lo que ve. Y aún más, que pudiera incluso ser parte activa de la televisión si así, lo desearía, y no un simple pasivo espectador-
El vivir la vida masónica imaginando cosas absurdas es absolutamente lo contrario de una actividad masónica ‘útil’.
¿Qué diablos hago en la logia?
¿Soy yo un masón esto?
¿Soy un masón aquello?
¿Que piensan otros masones de mi?
Estas son las preguntas que pudieran plantearse en la mente al ser masón. Muchos de los temas masónicos presentados son nuevos y desafiantes, como ese de mantenernos masónicamente lucidos, mantener un estado de atención de calidad, no dejarnos atrapar por el sueño psicológico, y puede que no tengamos marco de referencia para ellas en el mundo profano, ni experiencias previas para compararlas, y muy a menudo tampoco tenemos a la mano a un masón que nos guíe hacia del despertar de la conciencia, el objetivo autentico de la masonería, por lo general buscamos en masonería a alguien que apapache nuestros desvaríos y nos mantenga aún más dormidos de lo ordinario.
Aunque no hay nada malo en plantear la gran pregunta de nuestra vida:
Debemos cuidar de no dejar que la perniciosa imaginación corra lejos con nosotros.
El labrar la piedra y trabajarse a sí mismo en el camino hacia una respuesta es una cosa. Dejar que la mente divague ‘sin una calidad de atención’ con tales pensamientos desatinados, es deslizarse aún más profundamente hacia el estado inconsciente de ‘vivir dormido’.
La imaginación, las fantasías y los hábitos del proceder mecánico son capaces de llenar nuestras mentes con los escenarios mal elaborados y poco concluyentes, o igualmente llenándolos con tonteras baladíes. Ambos sirviendo solamente como obstáculos en el camino a la verdad objetiva, las distracciones creadas adentro, para mantenernos bajo control.
Preocuparse innecesariamente, identificando pensamientos negativos también pueden ser ejemplos de la imaginación.
¿Qué canal de la masonería piensa usted que está sintonizando aquí?
¿El de los aplausos elogios, y acumulación de grados masónicos. El de los halagos mutuos? O el del compromiso social, o el del compromiso para llegar estar lucido.
Así, ¿por qué pensamos estas cosas? ¿Cuál será el propósito masónico real? ¿Hemos decidido mirar conscientemente dentro de estos temas, tratar y sacar conclusiones objetivas, o simplemente aparecen? Bien, esto es imaginación para usted; tiene usted vida masónica propia o imita a los demás.
Piensa usted que el masón que escribe estas cosas lo está regañando, ¡Qué va! Al masón que escribe estas cosas le importa poco, lo que usted piense, diga o haga, el masón que escribe estas cosas solamente llevar su bitácora de viaje a hacia su interior, y la platea así por escrito, para llevar una constancia de sus propios logros y fijar sus metas, de desligarse de cosas y adquirir metas superiores. El masón que escribe esto, al igual esta al encuentro de la Gran Luz, es uno más como ustedes, que trata de sintonizar el mejor canal de la Masonería, y simplemente observo en que me identifico negativamente y trato de corregirme a mí, y no a los demás. Usted por una de esas leyes insospechadas de la Creación, sintonizó con mi canal masónico mental, me lee, escucha mis efluvios telepáticos y los trata de reinterpretar o acomodarlos a su propia problemática; y hace bien. La imaginación nociva no para a preguntar si su mente está usando su cerebro y energía de esta manera, solamente hace lo que hace mejor y mantiene dándole vueltas al dial a su disc jockey favorita en la radio S.U.E.Ñ.O. Así, su mente baila el baile de perniciosa charla externa y nociva charla mental interna.
La característica peligrosa que encuentra el buscador en él mismo es la imaginación. Muy pronto después de comenzar conocerse a sí mismo, él llega a la conclusión que el mayor obstáculo para conocerse a sí mismo es la imaginación. El iniciado desea conocerse, pero en vez de eso, la imaginación comienza en el sobre el mismo sujeto, y se olvida la necesidad de conocerse. Muy pronto se da cuenta que las personas atribuyen a la palabra “conocerse ” un significado bastante deformado y no necesaria.
Inclusive el iniciado cae en cuenta que el conocerse es una facultad destructivamente dolorosa que nunca podrá ver que el mismo es la causa de sus desgracias, conocerse no le da satisfacción mas bien pena. Y ahí en lugar de conocerse a si mismo comienza a imaginarse de sí una idea distorsionada, así La imaginación es como mentirse a sí mismo; es, de hecho, mentirse a uno mismo. Uno comienza a imaginar algo para satisfacerse, y muy pronto comienza a creer lo que imagina de sí mismo…
Fraternalmente Vicente Alcoseri
https://groups.google.com/group/secreto-masonico
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