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♥ 「 cαяdιиαl de lα тιeяяα 」: Ignorance is (not) bliss {privado: Tateki, Teo}
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Respuesta  Mensaje 1 de 61 en el tema 
De: Cherry-tan  (Mensaje original) Enviado: 08/05/2012 02:38
Empezaba a entrar la noche, y ambos ya habían cenado una comida ligera -pequeña porción de arroz, algo de carne y especias- que preparó Teo, ya que al parecer cocinaba mejor que el peliblanco. Ahora, Teo había ido a tomar una ducha (Tateki facilitándole toallas limpias, y ropa que seguro el otro rechazaría), mientras que el lebenmaske continuaba con su trabajo en la sala/taller; estaba viendo cómo aumentar la intensidad de su arma, y si de alguna forma podía ayudarse de la electricidad externa, como lo hacía Teo.

Por cierto, Teo había ido a visitar en la tarde, como ahora último lo hacía, donde se quedaba a observar a Tateki mientras este continuaba algo nervioso su trabajo, dormían juntos (en la misma habitación solamente! Ya había un futón al menos...), y al día siguiente Teo se volvía a ir, diciendo algo sobre no molestar de más a Tateki.
Y en esos días, el peliblanco pudo conocer un poco más sobre Teo. Pequeñas cosas, lo que podía descubrir sin preguntar mucho para no parecer muy fisgón. Y... eran cosas muy interesantes! Quién diría que sus piercings servían para canalizar los rayos que caían para aumentar la intensidad de sus ataques. O que sus ojos fueron cambiados para que pueda acercarlos y alejarlos como guste... tan genial...
Pero aparte de eso, no sabía mucho sobre Teo, sobre su persona. Empezaba a poder diferenciar un poco sus limitadas expresiones (o eso le gustaba pensar), pero su pasado, cómo llegó a ser machina...

Quería saber.
Aunque así parezca el ser más egoísta que exista, Tateki quería saber.

...pero cómo le preguntaría...?
Había quedado ensimismado en ese pensamiento que había dejado olvidado su trabajo, y Teo ya habría terminado de ducharse. Perfect timing. Solo que no estaba listo.
Quedó en un silencio algo incómodo, jugando con una pieza de metal en sus manos, pretendiendo examinarla, mientras miraba disimuladamente cómo Teo se acercaba. Tenía que preguntarle, pero cómo... Casual, casual...
"Ya...", empezó algo fuerte, tratando de tranquilizar su voz, "Ya estoy descubriendo cómo hacer que funcione...", mientras hablaba intercambiaba su mirada entre Teo y la pequeña pieza en sus manos, pulso acelerándose. "Uhm... Pero...", estaba cerca de preguntarle, y trataba de que su voz no se quiebre tanto por el nerviosismo "Pero... Cómo así... tienes los piercings...?" Cómo los hicieron, por qué están ahí? Por qué te hicieron machina...? Quería preguntarle, pero no podía, su voz huía antes de darse cuenta siquiera, quedando sin palabras, sin preguntarle...


Pero quería saber.

----------
y así abrimos el regreso triunfal de Kait *u*~ oh a desarrollar más la relación de estos dos u/////////u
creo que empecé algo raro ;u; orz


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Respuesta  Mensaje 32 de 61 en el tema 
De: Shounen Kait Enviado: 08/06/2012 22:13
Poco a poco la gente iba disminuyendo en su cantidad al paso que avanzaban casi continuamente. Cada vez eran menos las personas que encontraban en el camino, y cada vez hablaban menos de ambos, o del pelirrojo solamente, quien sabe. El cielo celeste y blanco sobre su cabeza dejaba ver un sol cómodo, que ni acaloraba demasiado, ni llenaba de sombras el lugar. Solo lo justo y necesario, un día prácticamente hermoso. El viento estaba un poco más elevado que de costumbre, eso sin duda, pero no había arena que sobrevolara y molestara a los ojos. Cuando Tateki se detuvo para comprar comida y se la ofreció, el pelirrojo lo tomó con cuidado llevándoselo a la boca sin dudar y agradeciendo con un leve movimiento con la cabeza. Disfrutaba de esa clase de detalles que era de ofrecer Tateki, y se preguntaba que otras personas disfrutarían hoy en día de su compañía además de él. Podría llegar a sentirse celoso. Si, sin duda.

Le vio comenzar a comer, siguiendo con el paso e hizo lo mismo. Esta vez no se detendrían por nada. En parte porque estaban tan entretenidos comiendo, que hasta se olvidaron de dirigirse la palabra. Aún incluso despues de comer, permanecían en silencio. Teo podría haber notado esa diferencia en el ambiente, podría haber roto el silencio con algo incómodo para el menor pero no, esta vez no. El ojimiel podía ver claramente que las cejas del pelirrojo se encontraban serias, levemente fruncidas y la mueca en su boca era como si la comida que recientemente había digerido le hubiera caído mal, pues sus comisuras se marcaban hacia debajo de manera tal que hasta dejaban ver una leve arruga. Era más que evidente, incluso era más que alevoso, el solo pensar en ir a visitar su ¨lugar de nacimiento¨ (o despertar) le hacía ver algo irritado. Pero era inconsciente de ese rostro, casi siempre era inconsciente de sus expresiones, o sus no expresiones. El solo hecho de preocupar a Tateki, fuera como fuera, le molestaba más aún. Pero no podía hacer nada con los sentimientos por su padre.

En su cabeza miles de pensamientos cruzaban su mente << Si Kansko estuviera vivo… si no se hubiera dedicado hasta la muerte a revivir a su hijo. Si tan solo la machina hubiera muerto justo al mismo tiempo que su madre. De no ser por él… su padre todavía viviría… No era más que un asesino. >> Pero no! Sus ojos se abrieron, quizás sorprendiéndose levemente de sus propios pensamientos, deteniendo sus pasos y dejando escapar de su garganta con una voz trémula - ...no…no soy asesino -.

Estuvo varios segundos de pie allí, pensativo, sorprendido, distante. El viento movía su cabello rojo de lado a lado, había aumentado su fuerza. La tarde ahora era más iluminada, ¿Cuánto tiempo habían estado caminando? ¿dos horas, tres, cuatro?. Casi como si hubiera despertado de un mal sueño observó a Tateki a su lado, que seguramente lo estaría observando preocupado o asustado por su reacción. Solo cuando pudo ver sus ojos color miel en él, se dio cuenta que no estaba solo, que allí estaba Tateki. Que lo había oído, siendo que ni él mismo recordaba que había murmurado hacía tan solo segundos. ¿Qué tan ensimismado se puede encontrar uno en sus propios pensamientos? – dis…culpa – se excusó, intentando cambiar su rostro de sorpresa por la serenidad de siempre…lográndolo a medias. Sacó sus manos de los bolsillos de su pantalón y tocó una pared de roca. Acariciándola lentamente y mirando hacia arriba. Casi surcando los cielos, o por lo menos así parecía desde tan abajo que se encontraban. Era un cumbre enorme, de piedra. Una simple roca que había alcanzado a las montañas. Producto de algún desastre natural, alguna batalla o simple casualidad. Aunque para Teo, las casualidades no existen.

Posó no su palma, solo los dedos de sus manos, de ambas. La punta de sus dedos se enterró en la piedra debido a la fuerza que el pelirrojo poseía. Y miró con sus ojos casi blancos al albino mientras subía casi colgándose como alguna especie animal desconocida. Subió unos metros mirándolo - … - estaba claro lo que estaba haciéndole notar. Tateki tendría que montar esa piedra, cuidando de no cortarse o caerse y el mayor lo veía completamente capaz (o simplemente para él era una actividad normal escalar). Sin más, miró hacia arriba. Continuando con sus cuidadosos pero fuertes movimientos, y subiendo sin ningún problema.
 
. . . . .
Jajajaja si si fuera por él si xD
disculpa la tardanza ;w; 

Respuesta  Mensaje 33 de 61 en el tema 
De: Cherry-tan Enviado: 11/06/2012 04:53
Seguían andando juntos pero sin cruzarse palabra, aún después de comer. Pero no era malo, nunca le iba bien en conversaciones triviales. Al menos con Teo empezaba a dejar de sentirse obligado de abrir tema de conversación siempre, era un alivio. Pero por si acaso, sólo por si acaso, le echó un vistazo a Teo, el pelirrojo concentrado en el camino y en quién sabe qué más. No lo molestaría más que para seguirlo con la mirada; el también parece preferir el silencio.

Pues eso, estaban de camino al laboratorio del Dr. Kansko...! No podía creerlo, iba a visitar el lugar de investigaciones de uno de los científicos más renombrados de los últimos años...! Lamentablemente el científico aquel no estaría para recibirlos...

...


... ahora lo recordó, lo que le contó Teo anoche, sobre su muerte prematura y el sacrificio de su padre por traerlo a la vida. Cuánto tiempo habrá pasado para que Teo esté como está ahora? Días, meses, años...? Faltará algo por arreglar en él? Teo debió haberla pasado mal... y de alguna forma quería ayudarlo, quería saber más de él. Por eso estaban en camino.
Pero, y si Teo realmente no quería volver allá? ...

De un momento a otro, la voz de la machina rompió el silencio. "...no…no soy asesino". Se detuvo medio paso delante de la machina y volteó a verlo, con un rostro lleno de preguntas y sorpresa, pero lo que encontró no le respondía nada. Un Teo, igual o más confundido y asustado que él mismo, un rostro que nunca antes le había mostrado. Teo se disculpó aún desconcertado, y el peliblanco se sintió intranquilo. Sentía algo, pero realmente no pudo distinguir qué. Sentía que debía decir o hacer algo, por él, pero nunca sabía qué.

Ahora la machina centró su atención en una roca a su costado, la cual Tateki recién se percató. Tateki estaba centrado en sus pensamientos que apenas se fijó en dónde estaban y en cuánto tardaron, y al haberse detenido, su cuerpo finalmente le avisó del cansancio que sentía. Buscó su botella de agua para tomar un poco y elevó la vista al igual que Teo hacia la gran roca, buscando la cumbre. Prontamente, Teo empezó a escalar, y lo comprendió: un lugar alejado de la civilización, y de difícil acceso para los externos, una ubicación idónea para una investigación secreta. Allí era su destino.

... ahora sólo debía escalar la piedra...


 No le parecía una buena idea: realmente no estaba acostumbrado al ejercicio físico, peormente a escalar grandes distancias (apenas podía una corta distancia!), y no tenía el equipo adecuado, ni nada... Pero aún así lo intentaría. Seguiría a Teo, que hacía ver que no era tan difícil como creía. Apoyando una mano y un pie, luego la otra mano y el otro pie, y escalar. Así de simple.

Resultó ser más difícil de lo que creía... Aunque los agujeros que hacía Teo en la piedra (!) le ayudaban un poco, algunos estaban muy lejos como para alcanzarlos fácilmente, y los lugares donde apoyaba sus pies no resultaban muy estables, provocándole pasos en falso. Apenas estaba a unos cuantos metros del suelo y la caída no sería tan mala, pero si seguía así de mal... no quería ni pensarlo. Y Teo iba mucho más adelante que él...
Exhaló frustrado. Si iba lento, llegaría, pero demasiado tarde, y Teo y cualquiera se molestaría por aquello...


----
en DMMd, en la ruta de Koujaku, hay una parte donde están en una discoteca, y Aoba empieza a sentirse malito y mareado y vomita, y Koujaku se agacha y "yo te llevo", entonces podías escoger entre hacerte el fuerte y tratar de caminar solo o dejarte llevar por Koujaku, y dejarte llevar era la opción que te daba puntos xd acá para ganar puntos en la ruta de Teo(!) será al revés? xD aunque realmente no sé si escoger la otra opción cambie la historia y no me deje ver el cg de cuando es cargado O:? xdd
y tardé ;u;

Respuesta  Mensaje 34 de 61 en el tema 
De: Shounen Kait Enviado: 14/06/2012 05:06
Su rostro más que nada aburrido observaba las torpes acciones del albino. No parecía haber hecho algún ejercicio físico en su vida y su inseguridad estaba poniendo inseguro hasta al mismo pelirrojo que lo observaba desde arriba, dejando de subir al ver los problemas que tenía su compañero - …estás bien? – preguntó, desde arriba con una voz monótona… un poco ronca quizás debido a que no sabía que o como preguntárselo. El chico seguía nervioso y descuidado con la piedra que debía escalar, el ojigris observó hacia abajo, la caída que tendría ya no era para nada graciosa. Si seguía subiendo así estaría en un peligro eminente. Aunque eso no importaba porque él estaba ahí… él estaba ahí y se aseguraría de que a nadie le pasara nada por acompañarlo. Mucho menos al pequeño de ojos color miel. ¨Estoy buscando una excusa para tocarlo? Para sentirlo cerca?... posiblemente si¨ se respondió a si mismo, pero también era cierto que quería cuidarlo. Ignorando a Tateki se propuso bajar, cuidadosamente, aunque sin esfuerzo hasta ponerse cerca de él, dando media vuelta su rostro para poder verlo y estirar su mano - …ven, sube a mi espalda – no había terminado de decir aquello cuando de repente las piedras que sostenía el albino se desarmaron en sus manos, haciendo que éste se soltara y cayera, sin embargo rápidamente la machina tomó el brazo de Tateki, subiéndole… usando su fuerza para arrimarlo a sí mismo - …subeh… - habló quizás algo costoso al estar haciendo esfuerzo, pero Teo sabia que aguantar el peso del menor y estar sostenido en una piedra casi lisa, no significaban nada para él. Una vez que lo tuvo encima, le observó cariñosamente. Aunque no sonreía, ni cambiaba su rostro - …sostente fuerte Tateki, no quiero que te caigas… - solo cuando estuvo seguro de que el albino se encontraba a salvo, miró hacia arriba y comenzó a escalar, permitiendo que Tateki se aferrara a su cuello, sus hombros, y lo rodeara con sus piernas en las caderas del pelirrojo. En otras palabras, Tateki estaba tocando y VAYA que lo estaba tocando por todas partes y obligado xD
 
. . . . .
JAJAJA ahora no puedo dejar de pensar en rutas de juego por tu culpa cherry XD

Respuesta  Mensaje 35 de 61 en el tema 
De: Cherry-tan Enviado: 15/06/2012 22:46
Sería la burla de todos, si es que estuviese frente a mucha gente. Daba gracias que solo estaba Teo y nadie más allí, aunque Teo también podría burlársele...
Elevó la mirada y se encontró con Teo observándolo como siempre lo hacía, volviendo la mirada a la roca enseguida, avergonzado. "…estás bien?" "S-si... estoy bien...", le respondió aún sin mirarle ni mirar abajo, volviendo a reanudar su dificultosa escalada.

Había escalado un par de pasos más, cuando se encontró con la machina a su costado. Teo había bajado hasta donde él con mucha facilidad... No pudo evitar sentirse algo indignaddo; sí, para él era difícil algo como esto, pero no podía depender siempre de alguien, él debía ser capaz por su cuenta, aunque al principio no sea eficaz... "…ven, sube a mi espalda" "N-no...", giró su rostro casi imperceptiblemente para el lado contrario, tratando de ser cortés en su rechazo, volviendo a reanudar su escalada, "... dije que estaba bie--"
Al parecer no se percató que la parte donde apoyaba sus manos estaba muy débil, y se soltó al apoyarse de más en ella, emitiendo un grito ahogado al sentir el vértigo. I-iba a caer...!!
Pero antes de lamentar cualquier cosa, Teo tomó su mano y evitó que cayera, el peliblanco ahora más pálido que siempre mirando donde pudo haber sido su fin. Reaccionó al sentirse elevado, y lo primero que hizo fue buscar un lugar cercano y seguro dónde agarrarse. Y lo más cerca y seguro que tenía en ese rato era a Teo. Se aferró a él tan pronto estuvo a su alcance, acomodándose en su espalda, respirando agitado por el pequeño susto que se dio. Asintió a lo que dijo el pelirrojo, sosteniéndose seguro alrededor del cuello y cintura del otro. "G-gracias...", murmuró levemente tembloroso, mientras Teo los subía lentamente por la roca.

Luego de instantes de silencio empezó a darse cuenta de la posición en la que estaba: aferrándose con su vida a Teo, más cerca de él que nunca antes. Tan cerca que no solo podían sentir la respiración del otro, sino que podía sentir cómo Teo se tensaba mientras hacía fuerza para levantarlos a ambos, y Teo podría sentir lo levemente agitado que estaba el peliblanco. Tateki por instantes pensó en separarse de él, pero la realidad vino a él, y realmente estaban ya encima de las copas de los árboles más altos del lugar como para soltarse de la nada. No le quedó más que quedarse allí como estaba.

Aún así no podía estar tranquilo... "E-en serio estas bien tu? ... No se te hace más difícil llevarnos a ambos? E-es más peso y eso...", se escuchaba preocupado. Miraba cómo podría ayudarlo, para ver si volvía el a la roca y a escalar por su cuenta, pero era muy complicado en la posición en la que estaban. La única vía que veía era que continuasen así...
Suspiró para sí. Era de lo peor, hacer que Teo haga la mayoría del trabajo...  Todo por su pedido egoísta de querer ver el laboratorio de su padre... Tal vez Teo no quería venir siquiera...
"...no…no soy asesino"
Recordó las desconcertadas palabras de Teo, y nuevamente sintió algo de culpa, sentía que debía arreglarlo... Y como una epifanía llegó el calor de Teo. Sentirlo cerca, reconfortarlo, abrazarlo... Tal vez eso era.
"Teo...?", llamó su atención, rompiendo el silencio., mirando a un costado, su rostro apoyándose poco a poco en el hombro del otro, "Yo... no creo que seas un asesino...". Murmuró, y el agarre en sus brazos aumentó pero suavemente, no para asegurarse de que no iba a caer, sino para asegurar a Teo de que estaba con él.

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ahahaha xDu y eso que solo he jugado DMMd ;u;
y... CG unlocked! (?!) x,D algún día lo acabaré y haré mejor, creo, espero (?)

Respuesta  Mensaje 36 de 61 en el tema 
De: Shounen Kait Enviado: 16/06/2012 01:35
Su mundo estaba en otra parte, concentrándose en la opresión que le deba Tateki al sostenerse así de su cuerpo. Finalmente lo estaba tocando, y mucho, podía sentir su perfume, su aliento detrás de su oído y las caricias que le daban su cabello en la nuca, sin querer. Subía sin problemas aunque sus músculos se tensaban indudablemente mientras lo hacía y de su boca se dejaba oír un pequeño suspiro a cada esfuerzo. No significaba cansancio, significaba esfuerzo, alegoría de voluntad. Lo que oía, lo que olfateaba y sentía estaba alterándolo lentamente, por lo que intentaba apagar sus suspiros apretando los labios pero de su nariz también podía oírse claramente. Faltaba poco… deliberadamente poco. ¨E-en serio estas bien tu?... No se te hace más difícil llevarnos a ambos? E-es más peso y eso…¨ le oyó claramente, pues estaba demasiado cerca. No respondió nada, en vez de eso continuó con lo que hacía, mirando hacia arriba. Continuar con lo suyo era también modo de responder. Evidentemente estaba bien y no se le hacía más difícil para nada. ¨Teo…?¨ llamó su atención, y su movimiento se ralentizó evidentemente, como si se encontrara concentrado en otra cosa como para seguir pensando en subir. Tateki se apoyó en él, lo que hizo que el pelirrojo entreabriera sus labios ¨Yo… no creo que seas un asesino…¨.

Sus movimientos se detuvieron en seco.

Incluso parecía haber dejado de respirar por un momento al sentir como Tateki lo abrazaba fuertemente contra él.

Una de sus manos se soltó en la piedra y se encaminó a acaricia la mano más cercana a su corazón, la mano del lebenmaske. Posándola sobre la suya, como si Tateki fuera su contención en ese momento, apenas acariciándola. Giró su rostro, más bien solo lo ladeo a un lado pues enseguida se encontró con los cabellos del albino, acariciando su propia mejilla con ellos… suave, lenta y dulcemente. Sin decir una palabra, dirigió sus ojos casi blancos al ojimiel. Lo amaba. En ese momento estaba seguro de que era así. Su corazón había dado un sobresalto solo al oír su nombre de sus labios y la razón por la cual lo llamaba. Se sentía defendido de sí mismo, de sí mismo que era contra quien más luchaba… a quien no podía vencer. Tateki rompía sus malos pensamientos solo con unas pocas pero sentidas palabras.

Soy fuerte – fue lo único que pudo murmurar con una leve sonrisa que repentinamente lo hizo ver guapo, incluso mostrando sus dientes y respondiendo a la pregunta primera casi como si fuera lo único que importara - …puedo hacerlo – afirmó, hablando contra el rostro del menor, contra su frente.

Respuesta  Mensaje 37 de 61 en el tema 
De: Cherry-tan Enviado: 16/06/2012 17:17
Sintió la mano del otro acariciándose con la suya, y abrió los ojos levemente, sorprendiéndose un poco; no se caerían? estaban seguros así? Elevó su rostro para buscar el del otro, pero la mejilla de Teo lo encontró primero, acariciándose con su cabello, suave, tan suave, lo llenaba de calma. El silencio repentinamente los rodeó, pero era bueno, acogedor. Sintió que Teo lo miraba, y lo siguió.
Lo miró y... no sabía cómo explicarlo. Era algo distinto en Teo? No podía apartar su mirada de él, y sus palabras lo llenaron de confianza completamente. Aún al estar frente contra frente no sentía ganas de apartar la mirada de él, no sentía pena ni vergüenza por verlo prolongadamente... Le atraía, más que nunca. Su sonrisa, esa que la machina en casi nulas ocasiones mostraba, estaba en uno de sus más altos esplendores, o al menos esa era la impresión que dejó en Tateki.

Las mejillas del peliblanco se pintaron de rosado mientras caía en cuenta: ya no solamente estaba interesado en él por como era, por sus funciones de machina... Ahora, empezó a gustarle también su persona, su físico, sus ojos sinceros, aquella sonrisa. No podía creerlo! Siempre había pensado que realmente no se sentiría atraído de esa forma por nadie, que no llegaría a enamorarse del físico de alguien, o de alguien en general. Pero ahora, Teo...

Respondió con una leve sonrisa, bajando finalmente su mirada de la del otro, porque si seguía mirándolo por mucho no sabría lo que pasaría, y realmente no le gusta no saber...
"Uhm," dijo casi enseguida, para no dejar que el silencio incómodo llegue (porque podría pasar algo), "Y... si seguimos subiendo...?". Trató de no sonar tan presionante, pero estaban en la mitad de la subida, era peligroso quedarse allí. Además, al llegar a tierra firme no escaparía, o eso era lo que sentía.

Respuesta  Mensaje 38 de 61 en el tema 
De: Shounen Kait Enviado: 20/06/2012 03:21
Al ver esa tímida sonrisa como respuesta, junto con ese sonrojo entendió que Tateki confiaba plenamente en él. "Y... si seguimos subiendo...?" balbuceo el menor, a lo que el pelirrojo apartó su mano suavemente y abandonó esa sonrisa que lo había hecho ver tan diferente, retomando sus movimientos – sujétate bien – reafirmó ante los nublosos pensamientos ajenos, teniendo como meta fija el laboratorio. Podría estar sintiéndose más listo de lo estaba anques que Tateki le dirigiera esas palabras. Su esfuerzo fue prácticamente el necesario, ni mas ni menos.

Con un poco más de tiempo, en el que seguramente el ojimiel estaba cansándose los brazos de sostenerse a sí mismo. Notó que el cuerpo de Teo se movió diferente, subiendo a una pequeña plataforma en la piedra, y ayudando gentilmente a Tateki, hasta abrazarlo para ser cuidadoso y subirlo, mirándolo para notar si estaba bien o acaso se encontraba más cansado de lo que esperaba que estuviera. Abandonó sus atenciones en él para posar una de sus manos sobre la piedra como lo había hecho antes de comenzar a subir. Y dio un vistazo hacia atrás, abajo… que tan alejados del suelo se encontraban? El solo observar notó que se le confundía el suelo con las demás piedras. Cayó en cuenta entonces que finalmente habían llegado. Volvió sus ojos a la piedra, a todo esto, no había vuelto a decir ni una sola palabra. Se concentro en silencio. Quizás pensativo, o quizás dispuesto a hacer algo.

Dirigió sus ojos, de reojo a Tateki justo en el momento que un impulso eléctrico, seco y fugaz se impulsó de su mano a la piedra, prácticamente desintegrándola. Dejando al descubierto algo así como una cueva, aunque ya desde la entrada todo podía observarse. La arena volaba en el ambiente, molesta, irritando la garganta de Tateki aunque no había hecho el gran alboroto, el golpe eléctrico había sido ordenado y había tratado de no hacer temblar la superficie. Al parecer, ese muro de piedra que anteriormente había no era otra que algo construido por el mismo Teo para cerrar el lugar y que nadie más lo encontrara. Montañas de libros montados en librerías altísimas en el interior de aquella gruta, color ocre y olor a suciedad. Polvo en el ambiente, tierra alrededor. Algunas pequeñas montañitas de arena se juntaban en esquinas, subiendo por las librerías y las escaleras que servían solo para alcanzar los libros en el piso de arriba, completamente abierto y la vista de los dos desde la entrada. Los libros se encontraban completamente viejos, algunos abiertos sobre unas mesas, otros cerrados incrustados y apretados en las bibliotecas, también en el piso, bajo las escaleras, bajo la arena, enterrados bajo unas rejas que seguramente daban a alguna clase alcantarilla. La única iluminación provenía de la entrada, aunque era bastante en ese momento, era seguro que venir de noche no sería para nada beneficioso. Seguramente Kansko abría conectado cañerías, luces, electricidad. Seguramente se las había arreglado pues el techo estaba repleto de cables, de todos los tamaños y todos los anchos, entradas y salidas. Las ratas y cucarachas se ocultaron inmediatamente al oír el escándalo y ver la luz, corriendo al principio a todas partes hasta que finalmente lograron desaparecer de los ojos de las marionetas que observaban el lugar.

Tomas de aire en el suelo, rejillas de metal para la ventilación del lugar que se encontraban tapadas de barro, agua, tierra y bichos muertos. Por dentro el lugar era completamente grande. Faroles y lámparas viejas colgaban por todas partes, casi como si el dueño hubiera mantenido una colección, cuadros antiguos que también resultaban colecciones. Un tubo de drenaje fuera de la pared zumbaba molesto y continuo, no porque funcionara, seguramente mantenía un gran problema en su interior hacía tiempo, o bien algunos animales lo usaban para tener donde dormir. Allí, al fondo, una enorme ventana daba a una habitación extremadamente pequeña pero alta. Una suerte de tubo donde podría refrigerarse una persona, vidrios rotos a su alrededor adornando el lugar. Una camilla cercana asomaba tirada en el suelo, sangre completamente seca, oscura, prácticamente se trataba de una mancha vacía. Una pizarra gigante y escrita con tiza, números, códigos, cuentas, dibujos, levemente borrados. Heladeras y refrigeradores por todas partes. Teo no estuvo más que unos segundos de pie allí, sin hacer nada. Hasta que finalmente se decidió por dar algunos pasos en el lugar, constatando que todo estuviera ¨bien¨, despreocupado... pensativo. Tocando con sus dedos suavemente la mesa en el lugar, descubriendo un portaretrato... y levantándolo para obsevar esa foto, una vez más.

Respuesta  Mensaje 39 de 61 en el tema 
De: Cherry-tan Enviado: 27/06/2012 04:05
Reanudaron la escalada, Tateki volviendo a aferrarse a Teo por seguridad. Confiaba en Teo, así que también debía de esforzarse también, y no caerse.
Luego de un rato de haber subido lo que parecía un acantilado interminable, terminaron en una pequeña salida de roca. Acaso descansarían allí? Teo lo ayudó a subir, manteniéndolo cerca por instantes en los cuales Tateki le devolvió el abrazo, hasta que se soltaron, el peliblanco sintiéndose levemente extraño, vacío, lo que quedó del calor de Teo -al cual no le tomo dificultad acostumbrarse- impregnado en su cuerpo. Tratando de bajar su sonrojo se fijó en la dirección en la que miró Teo, hacia abajo, muy abajo... A cualquiera le entraría vértigo el encontrarse ahí, y Teo fácilmente los había subido a ambos hasta allá tan alto...

Volvió hacia Teo y por ende hacia la pared de roca que la machina miraba intensamente. Había algo allí?--
No tuvo tiempo de reaccionar más, Teo había lanzado un ataque hacia allí, totalmente certero, al parecer destruyendo la roca. Tateki se cubrió con sus brazos el rostro, tosiendo un poco cuando el polvo empezaba a asentarse, revelando el interior. El lugar no era una simple roca, era más que eso... Era el lugar donde se destinaban: el laboratorio de Kansko. O al menos lo fue en su tiempo. El Dr. vivió allí encerrado, dentro de la roca? O tal vez esa pared la levó alguien más... Teo, tal vez?

Pequeños ruidos de seres vivos huyendo por el alboroto se escuchó, y el polvo se asentaba, revelando el interior del lugar. El lebenmaske observaba con atención y lleno de anticipación desde donde estaba todo lo que podía: los miles de libros llenos de conocimiento, que al parecer no fueron suficientes para el científico; los adornos que hacían del lugar algo menos plano, tal vez colecciones del científico; los distintos aparatos electromecánicos que tal vez ya no sirvan. Un lugar detenido en el tiempo.

Teo avanzó, y Tateki lo siguió, tomando aquello como el permiso concedido para entrar. El olor a guardado del lugar era fuerte, lo que obligó al peliblanco a cubrir su nariz mientras avanzaba con cuidado de no pisar nada extraño o importante. Observó el techo, encontrándose con los centenares de libros, las lámparas que ya no han de servir sobre ellos (no les caerán encima?). Llegó hasta enfrente de la pizarra, leyendo -o tratando- lo que estaba allí: fórmulas que parecían conocidas, con cambios de variables que le parecieron raros, hasta desesperados; ecuaciones y sus desarrollos dejados a la mitad, borrados, quedando manchados en la pizarra; gráficas que no tenían aparente relación con lo escrito. Escritos normales con tiza, pero también había escritos hechos con tinta, en la pizarra, en el marco de ella, en la mesa junto a la pizarra, como si siguiesen un camino.
Algo anduvo muy mal en el aquel tiempo, pensó Tateki.

Miró de reojo a Teo que revisaba algo en la mesa más allá, y luego a unos papeles en el piso, agachándose a recogerlos, recogiendo de paso unos cuantos libros alrededor. Ojeó los papeles-- eran los borradores de los papeles con las investigaciones de otros científicos del grupo, tal vez facilitadas por ellos mismos antes de siquiera acabarlos. Había un libro grande de biología levemente carcomido, un libro menos grande de maquinarias con dobleces en ciertas hojas, y un pequeño libro que no tenía portada. El lebenmaske revisó el pequeño libro para ver de qué trataba, leyendo las primeras páginas.

Escrito con tinta fuente, letra manuscrita y la fecha marcada en el tope de la hoja seca -más de veinte años atrás-, Kansko detallaba en su bitácora:

Día 1:
Huí del hospital, me lo llevé de allí. Los médicos no saben
lo que hacen, no saben lo que dicen...

¿'No iba a sobrevivir', dicen?
Qué incompetentes.

Yo lograré lo que esos médicos no pueden.
Mantendré nuestro sueño, Selena... Yo continuaré con él,
por ti, por nuestro Teo...

Tateki abrió levemente los párpados, sorprendido. Estaba leyendo algo muy personal del Dr....
Volteó levemente hacia Teo, preocupación en su rostro. Su pasado estaba allí escrito, sería lo correcto leer más...?

-------

sadljkgskljfa tardé la vida ;A; /se muere
pronto venceré a la Realidad, y vendré más seguido como antes uwu! hasta que vuelva a ser esta época xd
(?)

Respuesta  Mensaje 40 de 61 en el tema 
De: Shounen Kait Enviado: 02/07/2012 06:10
Levanto la mirada del portarretrato y notó en los ojos miel algún tipo de estupor o sorpresa. Se acercó para tomar el libro con cuidado y releer lo que Tateki había leído, reconociendo el nombre de su madre por primera vez. Levantando los ojos para mirar a Tateki un segundo - … - volvió su vista al libro, corriendo sus páginas, notando que había escrito bastante… fue directamente a las últimas páginas escritas con desaliño, mucho esfuerzo y un pulso que parecía temblar constantemente sin dejarlo tranquilo.

¨Es tan adulto, tan parecido a ti.
Aunque puedo vislumbrar, Selena, mi mirada sombría en su expresión.
Estoy tan orgulloso, cuando despierte voy trasmitirle tu amor, y voy a hacerle sentir el mío
voy a hacerle saber que es único en este mundo para mí.¨


- … – la última página era tan intensa, y tan vacía a la vez que el pelirrojo no hizo más que cerrar el libro - …lo llevaremos – habló, certero, queriendo obviar por ese momento leerlo. Su mirada se veía algo perdida, como si no encontrara los sentimientos que debía utilizar para expresarse en ese momento. Manteniendo el libro en su mano izquierda, señaló el tubo detrás de aquella especie de ventana en el lugar - …ahí… desperté – murmuró, dirigiendo sus ojos a Tateki como si esperara que lo aprobara o rechazara por ello. - …mira lo que quieras… no te preocupes por recordar – sus ojos le miraban fijo, enfocándolo con las pupilas - …yo me encargaré de eso – habló, mirando nuevamente el libro cerrado en su mano, exhalando. Quizás… desilusionado o esperanzado, cuando se trata de Teo quién sabe.
 
. . . .
disculpa, me la pase charlando con mary
y se me fue volando el tiempo ;w;

Respuesta  Mensaje 41 de 61 en el tema 
De: Cherry-tan Enviado: 07/07/2012 17:23
Teo se acercó a él y tomó el libro, el peliblanco dejándolo ser, bajando la mirada apenado. Esperaba una reprimenda por andar tomando cosas privadas sin permiso, especialmente de ese calibre... pero Teo no dijo nada. Elevó un poco la mirada, encontrándose con el pelirrojo pasando las páginas hasta detenerse en las últimas, habiendo encontrado algo quizás. Trató de leer su expresión con lo poco que se atrevía a verlo directamente, pero no distinguió nada, como la gran mayoría de veces. Teo simplemente cerró el libro. Eso daba por concluido el caso?
"…lo llevaremos" , Teo anunció, quedándose con el libro como si lo hubiese confiscado. El peliblanco asintió inseguro, sintiendo (tal vez imaginariamente) el ambiente pesado alrededor de la machina; ahora era oficial, no debieron haber hecho ese viaje, no deberían estar allí.

Tateki bajó la mirada, perdido en su culpa, hasta que escuchó nuevamente hablar a Teo. Siguió con la mirada hacia donde apuntaba la machina, encontrándose con ese pequeño 'cuarto extra', asintiendo al comprender. Allí fue donde estuvo la mayoría del tiempo... Cualquiera diría que estaba allí como un experimento sin importancia más, pero lo más seguro era que lo que había allí era el pequeño hilo que lo ataba a esta vida.
"…mira lo que quieras… no te preocupes por recordar" El peliblanco frunció el ceño levemente, desconcertado por ello; él sabía que cada persona mira distinto el ambiente, y lo  mas seguro era que lo que Teo llegase a ver tal vez no es lo que él quería ver. Pero entendía. Entendía que tal vez no quiere que nada salga de ese lugar, por recelo o miedo. Aún así... El quería buscar allí, encontrar alguna respuesta. O al menos trataría de encontrar cosas para ayudar; ayudar al Kansko que escribía desamparado en su bitácora, pero sobretodo, ayudar al Teo que esta en ese tiempo junto a él, a mantener aquella vida que casi se pierde... Podía hacerlo, era un lebenmaske. Más que nada, quería hacerlo, porque... porque era Teo.

Entró así pues, siempre cuidadoso, a la cápsula donde alguna vez estuvo Teo. Miraba las manchas de aceite y polvo, los cables y tubos desconectados, y trataba de percibir algún aroma a químicos que lo más probable es que se haya disipado ya, buscando algo, pero sin encontrar mucho. Después de todo, lo que había estado alllí era Teo y nadie más.
Salió de allí, y volvió a buscar información entre los libros y papeles en la mesa, ojeándolos algo rápido, encontrándose con un sobre escondido en un libro sobre minerales. El sobre estaba vacío, roto a un costado, y no tenía nada más que una insignia en el frente. Una insignia que le pareció haber visto en algún lado...

...
Tal vez no sea lo correcto seguir revisándola, así que la dejó allí. Como tampoco daba mucha información sobre Teo...

Al final sólo lograron encontrar un par de hojas con dibujos y algunas explicaciones sobre el mecanismo de Teo (como la que tenía, pero más avanzada), pera al parecer estaban algo incompletas... Igual las llevarían, le explicaban lo necesario.
Volvió hacia Teo, no sin antes echarle una última vista al lugar. "Creo que ya encontré lo necesario... Entonces... regresamos...?". Hablaba algo dudoso, tratando de buscar un tono simpático para no molestarlo.
Aunque le hubiese gustado quedarse todo el tiempo que existía para revisar con calma todos los libros e investigaciones que habían allí, sentía que realmente no debía hacerlo.


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huohuohuo esa insignia es de...?! chanchanchannn
respuesta antes de que te vayas ;u;
edit: adssadfs post 801(yaoi)! ehehehehe 1313 xDDDD

Respuesta  Mensaje 42 de 61 en el tema 
De: Shounen Kait Enviado: 09/07/2012 00:46
Permaneció tieso, mirando a Tateki hacer y deshacer. Pensó que el viaje seria más productivo, pero solo al llegar se dio cuenta que en realidad no sabía nada de sí mismo y tampoco de ese lugar donde se encontraban ambos. ¿En que podría ayudar a Tateki, entonces? Se había perdido en sus pensamientos, permaneciendo incluso más cayado que de costumbre cuando lo escuchó suavemente "Creo que ya encontré lo necesario... Entonces... regresamos...?" dirigió sus ojos a él, saliendo del transe en el que se encontraba y dio un ultimo vistazo al lugar - …sí, quiero volver – pareció decir algo que estaba necesitando decir hacía horas atrás. Miró por última vez el laboratorio, recorriendo el lugar de forma familiar. Tomó el portarretrato y se lo dio a Tateki, casi gentilmente - …guárdalo – él iba a cargarlo y bajarían de forma aún más sencilla y rápida de lo que habían subido. Volver a casa no sería problema. La luz estaba yéndose, estaba anocheciendo, aquello dificultaba la visión en el lugar, tan oscuro y guardado. Caminó tranquilamente a un lugar en el laboratorio que parecía que ya conocía, abrió las puertas de un ropero y cajones sacando algo de ropa que parecía vieja. Seguramente las ropas de su padre. Con una tela, la más grande, hizo una especie de bolsa y guardo mucha ropa en ella antes de montarla al hombro. Caminó hasta la salida y observó el cielo, que oscurecía. Miró a Tateki con libros y el portarretrato, él con ropa y la bitácora. Parecía que estaban robando – estás listo? – musitó. Esperando que pase, para poder cerrar el lugar nuevamente.

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Perdona la tardanza, miles de cosas XD
el post 801 es la señal!!!!!!de lo que sigue de esto XDDD 

Respuesta  Mensaje 43 de 61 en el tema 
De: Cherry-tan Enviado: 09/07/2012 14:50
El tono de voz de la respuesta de Teo lo confirmó, volviéndolo intranquilo y más culpable. No fue una buena idea ir allí, para nada.
Teo dio una última revisada al lugar, entregándole el portarretrato que había estado mirando al principio. "…guárdalo." Tateki asintió levemente, mirando la foto allí. Era el Dr. Kansko (según lo que había visto de él en sus libros y trabajos) y junto a él una señora joven-- la madre de Teo, supuso. Tuvo sentimientos encontrados al ver la foto: ambos allí felices, pero la realidad era otra. Esa era la única foto familiar de la familia de Teo, era muy importante. La cuidará más que a sí mismo, decidió.
Por alguna razón empezó a sentirse nostálgico, recordando a sus padres que ahora vivían en las afueras de la ciudad principal. Será mejor que les de una visita en alguno de los días próximos...

Empezó a guardar con cuidado las cosas que encontró junto al portarretrato en su mochila, para llevarlas seguro, notando a Teo guardando algo de ropa que había ahí. El peliblanco sonrió leve: al menos así Teo tendría más ropa para usar, y ya no estaría obligado a usar su ropa que le queda apretada.
Tateki dio un último vistazo al lugar. En su momento debió haber sido un lugar muy cómodo y apto para la investigación. Realmente hubiera quedarse más tiempo allí y arreglar todo hasta su gloria previa... pero Teo ya quería volver. Y eso es lo que harán. Hicieron lo que fueron a hacer, ya era hora de regresar.
Salió del laboratorio quedándose un par de pasos alejado de la entrada, junto a Teo, esperando que cierre el lugar. Permaneció en silencio por instantes, mirando de reojo hacia el acantilado, en ningún momento ocurriéndosele cómo bajar de allí, hasta que finamente murmuró. "Lamento haberte molestado con que vengamos acá..."

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ah, post feo O,x

Respuesta  Mensaje 44 de 61 en el tema 
De: Shounen Kait Enviado: 24/07/2012 05:27
Cuando finalmente Tateki caminó afuera del lugar, alzó una de sus manos haciendo levitar tierra de alguna parte, pues se filtraba, había piedra por donde mirasen pero muy poca tierra, aún así las manos del pelirrojo funcionaban casi como un imán atrayéndola, formando una pared que cubrió todo en un segundo, volviéndolo a ese lugar completamente invisible como al principio. Permaneció mirando la pared, a pesar de que interrumpió su voz con el ruido que había originado al levantar la pared de tierra, lo había escuchado.

Dio un vistazo a Tateki, girando también su rostro y caminando cerca de él... mirándolo desde su diferencia de altura - ...de no ser por ti jamás habría tenido el valor de volver - sus labios nuevamente en una línea recta. Le dedicaron una suave, muy suave y casi familiar sonrisa. Había algo de bueno en ese lugar, y en la compañía que el destino le había dado para el hoy que estaba viviendo, uno que se contrarestaba del toco con su pasado. Quedó observando sus ojos por un momento, que para Tateki debió de haber sido eterno, puesto que Teo jamás se siente incómodo al mirar por un tiempo determinado ojos ajenos. Hasta que su sonrisa se desvaneció y observo el acantilado, caminando casi al borde del mismo, haciendo que algunas pequeñas piedras se desarmaran y cayeran justo bajo sus pies... diminutas, señal que Teo y Tateki estaban pesando demasiado y si se quedaran más tiempo lo más seguro sería que terminaran cayendo pues el espacio era pequeño y débil para que nadie pudiera llegar a él fácilmente. Miró a Tateki y guardo con cuidado la bitácora en su mochila, sin decir una palabra tomó su cuerpo como se le toma a una mujer justo al salir de la iglesia después del casamiento, o bien como se le carga a una princesa y sin previo aviso, saltó al vacio, presionando el cuerpo del albino contra su pecho para que la impresión de estar cayendo a cuantos metros él ya había visto, no le originaran tanto malestar.

Una roca que no pertenecía a ninguna estructura, pero era lo suficientemente grande levitó hasta colocarse justo bajo los pies de Teo que tranquilamente se posó en ella y esperó a que suavemente la piedra comenzara a bajar hasta tocar el suelo. Si se encontrara solo simplemente se arrojaría al vacio y confiaría en caer de pie, o a lo sumo rodar un poco si es necesario para evitar lesiones. Confiaba que su cuerpo fuese capaz de resistir esa caída. Aún así, como se encontraba con su master, decidió la solución más sencilla: utilizar uno de sus poderes a beneficio. Una vez en el suelo, posó suavemente a Tateki en la tierra, después de bajarlo de la roca... reacomodó nuevamente esa mochila de tela que se había armado y elevó una de sus manos despreocupada y lentamente para acariciar el cabello del albino con completo cariño, arrimándose a él para mirarlo casi curiosamente - ...estás bien? - preguntó, por si acaso, antes de emprender el viaje. Si por la noche se volvía cansador avanzar, deberían descansar en alguna parte, y lo que menos quería era haber asustado a Tateki. Su voz resultaba aburrida como siempre, lenta y baja, pero sus ojos completamente interesados en él. Estaba siendo más expresivo? ....no, definitivamente no, su rostro era absolutamente normal. Era Tateki, quien ahora, por fin, podía notar esos mínimos cambios en sus rasgos faciales que lo hacían comprender más los sentimientos de la machina.

. . . . . .
Existen parejas perfectas? si
Tateki x Teo <3 

Respuesta  Mensaje 45 de 61 en el tema 
De: Cherry-tan Enviado: 25/07/2012 04:15
Miraba atento cómo se iba cerrando poco a poco el lugar, fusionándose con el risco que habían escalado, como si nada hubiese estado allí, como si nada hubiese pasado allí.
Teo se acercó a él, y se sintió consciente de lo bajo que era en comparación a Teo, teniendo que elevar un poco su mirada para verlo, para tratar de descifrar su expresión. "...de no ser por ti jamás habría tenido el valor de volver." Teo sonrió... Eh? Eso no era lo que se esperaba. Acaso no estaba molesto por haber venido? Su rostro se volvió confundido por un rato, en el cual se dio cuenta de la mirada plateada siempre fija en él, que le incomodaba siempre, obligándolo a cambiar de dirección su mirada.

Cuando volvió a mirarlo, Teo estaba mirando el acantilado, y en ese instante recién se le ocurrió pensar en cómo bajar. Uh... Por un instante pensó en escalar nuevamente, que la bajada no sería tan difícil como la subida y que podría bajar sin la ayuda de Teo...
Pero no tuvo chance de indagar más; Teo lo tomó en brazos, estilo princesa. "O-oye, Teo--!", protestó, pero sus quejas se ahogaron en el instante en el que empezaron a caer, invadiéndole el vértigo. Se aferró como pudo a Teo, temiendo por su destino. Pero repentinamente dejaron de caer libremente. Ahora bajaban lentamente, casi como si Teo pudiese flotar. Tateki lo miró sorprendido, buscando alguna explicación, encontrándola al volver a ver hacia el vacío, encontrándose con una piedra bajo sus pies, la cual les servía como alfombra mágica. Esa era una de sus habilidades?

Se calmó un poco, y bajaron sin ningún problema. Pero Teo siempre cuidadoso con él, siempre. Cuidando de que no caiga, cuidando de que no se esfuerce en exceso, cuidando de que no salga herido, hasta cuidando que ninguna hoja haya quedado en su cabello. Era algo molesto. Pero por otro lado... ...
"...estás bien?" Desvió casi imperceptiblemente el rostro. "Si...", murmuró, mirándolo de reojo. "... Gracias."

Sin más rodeos emprendieron el viaje de regreso. Tardaron un buen rato en llegar allí, pero estaba seguro de que llegarían a casa, un poco tarde, pero llegarían. Aprovecharían al máximo la poca luz que quedaba para regresar al menos cerca de la ciudad, y el resto se guiarían con el residuo de las luces de la ciudad. Llegarían.

El camino de regreso fue casi como el de llegada; ambos en silencio y sin necesidad de hablar. Pero había algo que molestaba a Tateki. Algo que se había planteado hace algún tiempo, y que resurgió con más fuerza por todo lo sucedido.
Ahora, cómo se lo haría saber a Teo...? Las palabras clave, el mensaje transparente, sin dudar ni titubear. Cómo lo haría. Cómo las personas normales lo hacían y tan fácil, se preguntaba también.
Anduvo unos cuantos minutos así, dudando, queriendo decirle, pero no sabiendo cómo. Esa pelea interna.
Pero finalmente se decidió cómo. Esquemáticamente, tranquilo, paso a paso... Buscó su voz, carraspeando un poco, y empezó.

"Uhm... Teo...?". Bien, el encabezado.
"E-estuve pensándolo, hace tiempo...". El desarrollo...
"Y...  como encontramos muchas cosas allá, y...". La explicación de los argumentos, bien... "Y... no sé, pensé que tal vez podría revisar los documentos y ver si algo anda mal... y arreglarlo y ver si todo anda bien contigo y... Y como sería algo molestoso ir y venir a mi casa y todo eso, tal vez..."
Ahora, lo importante... "Tal vez... quieras... venir a vivir conmigo?" Ya. Ah, no lo olvides. El nivel de importancia--
"... C-c-claro, si no quieres o no puedes no importa, entiendo......."
--el más bajo de todos, si.

Ah. Lo dijo. Ah! Al fin! Se sentía realizado, de alguna forma, con un peso menos encima. Pero ahora tenía un peso mayor: las ansias por la respuesta que Teo podía darle. Solo podía esperar en silencio por la respuesta, sea la que fuese (aunque esperaba una respuesta afirmativa...). Y no pudo evitar el pequeño sonrojo en sus mejillas, que tal vez trataba de cubrirlas con la poca luz.

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hahahah alfombra mágica, y Teo cantando "un mundo ideaaaaaal(8)" xDDD
y oh mi bebé es parte de una pareja perfecta u//u *se siente realizada*

Respuesta  Mensaje 46 de 61 en el tema 
De: Shounen Kait Enviado: 29/07/2012 05:44
Con lentitud, pero igualando el paso rápido de Tateki con zancadas largas debido a su altura. Movía todo su cuerpo al caminar, se podía decir que era una especie de costumbre suya. En una mano sosteniendo aquella especie de bolsa posándola en su hombro, y la otra en su pantalón. Por primera vez se sintió ansioso a llegar, pues ya quería desprenderse de esa molesta ropa. Y no era molesta porque fuera de Tateki o no tuviera el tamaño de tórax. No. Era molesta simplemente porque no estaba acostumbrado a vestir su pecho y no andar semidesnudo por ahí. El anochecer no tenia piedad, aunque de forma casi imperceptible, se aproximaba con seguridad sobre sus cabezas. Logrando una extraña ambientación azulada en su camino. Iluminando cada piedra, cada roca y tierra de ese leve color marino. También la piel de ambos era teñida de aquel hermoso color que al mismo tiempo oscurecía poco a poco lo que había más allá de sus alrededores.

"Uhm... Teo...?"

Su paz se vio repentinamente invadida, pero por algo más pacífico todavía, la voz de ese muchacho. Agudizó su mirar, observando de reojo al peliblanco sin decir una palabra, después de todo esta demás. Para que responder? si él siempre lo estaría oyendo de todos modos, aunque no se lo dijera. "E-estuve pensándolo, hace tiempo..." ....que tanto tiempo? pensó para sí mismo mientras lo observaba tranquilo en su caminar, hace meses? hace días? hace segundos atrás? cualquier tiempo puede ser mucho dependiendo de la ansiedad. "Y... como encontramos muchas cosas allá, y...Y... no sé, pensé que tal vez podría revisar los documentos y ver si algo anda mal... y arreglarlo y ver si todo anda bien contigo y... Y como sería algo molestoso ir y venir a mi casa y todo eso, tal vez..."... elevó una de sus cejas, esta vez girando por completo su rostro. Cuál era el punto? porque había tantos ¨y¨ innecesarios en su pronunciación? ...porque hacía tantos espacios al hablar?. Definitivamente estaba nervioso, era lo que estaba por decir lo que lo ponía así?. "Tal vez... quieras... venir a vivir conmigo?".

Sus pasos, aunque calmos se detuvieron en seco. Observando a Tateki continuar hablando seguramente para restarle importancia al hecho. El sensor de temperatura en los ojos del pelirrojo notó que Tateki estaba elevándola una vez más... como cada vez que se trataba de la machina. Pero lo extraño era que esta vez... la machina no había hecho nada en particular. Los ojos plateados observaban a Tateki con un leve dejo de sorpresa... y no habló por unos segundos, quizás procesando lo que eso significaba. Vivir... con él...

Entreabrió sus labios, perplejo.
- ...regresar a casa... para siempre? - No pudo evitarlo, dijo lo que estaba pensando, se lo pregunto casi como una máquina (que era).
Con rostro humano, casi desorientado, sorprendido y respirando a través de sus labios, olvidando hacerlo por la nariz.

. . . . . . . . . .
OMG lo imaginé cantando y fue genial, una fantasía imposible (L) oh shit!
disculpame, familia mirando juegos olímpicos, pareja intentando ubicarme,
tiempo en soledad nulo definitivamente, con esto de las olimpiadas *//* 


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