En palabras teñidas de nostalgia
te releo en una pasión desconocida,
en recuerdos que no son míos,
las dudas me carcomen por saber si esa “ella”,
pude haber sido o seguiré siendo yo.
¿Serán sueños que tu corazón nunca me dijo?
Enigma éste que mata mi ilusión
cuando me hundo en tu pensamiento
y me ahoga esta horrible desazón
de no saber si haberte amado,
fue tiempo ganado o perdido.
Cada día que se duerme con el sol,
cada noche que la luna se apaga,
me prometo, en vano me juro,
encontrar el valor de arrancarte por fin
mas esta porfía del alma enceguece al olvido.
Tú sabes más que nadie...
sigues estando en mí.
Y más que estar en mí, me dueles,
como una herida abierta, como una llaga incurable,
que sangra cuando no estás, cuando al leerte entrelíneas
descubro que el tiempo sigue dándome la razón,
solo continúo mintiéndome a mi misma,
al tiempo le digo que te fuiste
y el alma derrotada sigue desangrándose.
Aquí en este lugar me quedo
preguntándole a tu verso sin eco,
si algún día volverás, si en ti no he muerto.
Enigma, enigma… eres tú amor,
en mi desespero muero con la duda,
pero muero aún más con tu silencio,
con esta condena definitiva de tu adiós.
MARIA JOSÉ
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