Page principale  |  Contacte  

Adresse mail:

Mot de Passe:

Enrégistrer maintenant!

Mot de passe oublié?

ALLA VAMOS PAMELI
 
Nouveautés
  Rejoindre maintenant
  Rubrique de messages 
  Galérie des images 
 Archives et documents 
 Recherches et tests 
  Liste de participants
 * * * * ♥ * * * * 
 General 
 ADMINISTRACION DEL GRUPO 
 ♥ Mensajes Diarios ♥ 
 * * * * ♥ * * * * 
 Las Promesas de Dios 
 LA PROMESA DE HOY 
 LA BIBLIA 
 * * * * ♥ * * * * 
 SHOLE..."LLamada para bendecirte" 
 Fondos / Sra SARA... 
 Yoly / DETALLITOS CRISTIANOS 
 * * * * ♥ * * * * 
 
 
  Outils
 
DEVOCIONA: SUSPIRAR POR LA CASA...
Choisir un autre rubrique de messages
Thème précédent  Thème suivant
Réponse  Message 1 de 1 de ce thème 
De: La Morocha arg4  (message original) Envoyé: 26/07/2010 20:35


Aun el gorrión halla casa, y la golondrina nido para sí,
donde ponga sus polluelos.

Salmo 84:3.

En la casa de mi Padre muchas moradas hay…
si me fuere y os preparare lugar, vendré otra vez,
y os tomaré a mí mismo.

Juan 14:2-3.


 


Suspirar por la Casa
para ESCUCHAR ...haga clic aquí...

        Un deseo universal que supera todas las culturas y las épocas es el de tener una casa, un hogar. Normalmente la casa es un lugar de seguridad e intimidad. Es el lugar donde uno se siente amado y donde los miembros de la familia son bienvenidos. Cuando los que habitan una casa están en paz con Dios, la casa desempeña un gran papel. En ella Jesús es honrado y amado. Se le pueden presentar las angustias y dificultades en oración, y Él responde.

       Este deseo de un hogar refleja otro deseo: un lugar de descanso para nuestra alma. Nuestra mente, tan a menudo inquieta y agitada, aspira a una verdadera y perdurable tranquilidad. ¿Sabe usted que este lugar existe? Es la casa de Dios. Algunas horas antes de dejar a sus discípulos, Jesús les habló de la casa de su Padre, la presencia de Dios, presencia de amor y de plenitud de gozo.

       El camino para acceder a la casa de Dios es único: es Jesús mismo. Sólo por Él podemos conocer a Dios como nuestro Padre. Sin creer en el Señor Jesús no podemos entrar en la casa del Padre, porque con una conciencia cargada, no se puede acceder a la presencia de Dios.

       En contraste, el creyente puede vivir en la intimidad del Padre, gozar de su amor y de su paz hasta el día en que Jesús vuelva para tomarnos junto a Él en la casa de su Padre.



Premier  Précédent  Sans réponse  Suivant   Dernier  

 
©2025 - Gabitos - Tous droits réservés