
LA NUBE
La nube vino a mí, ¿sabes?, -quiero llorar-, me dijo ahogada la voz y yo no supe qué decir, tal vez algo se trabó sin huella.
Quería abrazarla, pero no sabía cómo, tan grande era y yo tan pequeña, se asomó el sol por la ventana, acarició su barriga, grande panza de luz morena.
Y la nube acercaba su rostro, suave piel amiga de cera, yo lo sentía como mío, ya lloraba mi mirada llena de pena.
Dejé que su melena colgara de mi triste amanecer sin ella que no encontré su voz en la maceta de mi gardenia.
Y esa nube que vino hasta mí rompió a llorar sin espera, se hizo tan pequeña como yo, lloramos hasta que la noche con su sombra nos perdiera.
Claudia Ballester Grifo   .jpg) | |
|