Pagina principale  |  Contatto  

Indirizzo e-mail

Password

Registrati ora!

Hai dimenticato la password?

AMNESIA la burbuja de ESKARLATA
 
Novità
  Partecipa ora
  Bacheche di messaggi 
  Galleria di immagini 
 File e documenti 
 Sondaggi e test 
  Lista dei Partecipanti
 DEBATE 
 
 
  Strumenti
 
CULTO Y CULTURA: ALAN ABEL * RIDICULIZADOR PROFESIONAL DE MEDIOS *
Scegli un’altra bacheca
Argomento precedente  Argomento successivo
Rispondi  Messaggio 1 di 1 di questo argomento 
Da: ESKARLATA  (Messaggio originale) Inviato: 13/11/2009 16:49
Alan Abel, ridiculizador profesional de los medios de comunicación desde hace cuarenta años
"¡Basta de amamantar bebés!: les causa un trauma edípico"
 
LLUÍS AMIGUET  - 29/03/2008

¿Edad? ¡Váyase al carajo! Vivimos en la obsolescencia planificada: quieren que consumas o te mueras. Nací en Ohio. Los informativos de televisión son el mejor programa de humor. Soy inocuo, pero nunca inicuo. En toda broma hay un poco de broma. Colaboro con el CCCB

En los años 50, la atmósfera puritana era una broma. Así que decí tomármela en serio y en 1959 fundé la Society for Indecency to Naked Animals (SINA) (sociedad contra la indecencia de los animales desnudos).

Se montó usted una ONG a lo bestia.

Pedimos la prohibición de que ningún animal se exhibiera en público desnudo para preservar la moral y la decencia públicas.

¿Y le tomaron en serio?

¡Salí en las portadas y los informativos de todo el país! La apoteosis fue mi aparición como portavoz del SINA en el informativo de Walter Cronkite.

¡El mítico CBS evening news!

Pobre Walter; ha podido perdonar a Nixon sus mentiras, pero no a mí la bromita.

¿Y la audiencia?

Recibimos cientos de adhesiones y donativos para cubrir los genitales de los caballos.

A mí siempre me parecieron excesivos.

Time Magazine descubrió la broma en 1963, pero la incluyó tres décadas después entre lo más destacado del siglo XX.

La SINA era más que una broma.

En toda broma hay un poco de broma. Durante estos cuarenta años de sátiras mediáticas - 35 han logrado honores de portada- he pretendido poner en evidencia la sinrazón y la farsa del discurso de los medios.

Pero usted no ganaba ni un duro.

He publicado ocho libros y dieciséis discos. He obtenido momentos de impagable felicidad sin perjudicar a nadie y tal vez haciendo pensar a alguien. Me he sentido útil.

Era usted un mentiroso.

Creo sinceramente que no he mentido más que los políticos o la publicidad y menos que la mayoría de los periodistas.

Gracias, hombre.

Después del SINA, fundé el CAB (Citizens against Breastfeeding, ciudadanos contra el amamantamiento): denunciamos que dar el pecho a los bebés les causa traumas edípicos y pedimos su prohibición.

Tanto pecho suelto no debe de ser bueno.

Descubrí la broma en US News & World Report,pero aún llaman al doctor Rogers - mi alias en esta cruzada- de las radios pidiéndonos entrevistas.

¿Y las concede?

¡Desde luego que sí! ¡El amamantamiento - y la estupidez de algunos medios- pone en peligro a la humanidad!

El peligro es usted para los periodistas.

Creo modestamente que, si quieren aprender, les obligo a reflexionar sobre su propio papanatismo. Y sobre el mío. Desde luego.

Su lista de farsas es terrorífica.

Presenté a mi abuela a la presidencia de EE. UU.; monté Females for Felons (mujeres para criminales), ONG que proporciona pareja sexual a convictos; participé en la serie de la HBO sobre sexo con una contribución a su altura: fui el hombre con el pene más pequeño del mundo: tres centímetros...

¿Le parecen pocos?

... En erección. ¡Fui portada en seis diarios nacionales! Después describí cómo era conseguir un orgasmo con un pene de tres centímetros en directo para la HBO...

¿. ..?

... ¡Era como tomar Iwo Jima!

Es usted un héroe americano.

Y además, modesto. Mis bromas han funcionado porque han conectado con el espíritu de cada momento y el alma eterna de América: la más duradera es la Escuela de Mendigos de Omar. La inauguré en 1975 y causa furor cuando aumenta el paro como ahora.

Aquí damos carnets de boletaire.

Mi Manual del pedigüeño ha formado a generaciones de pordioseros que hoy llenan de orgullo a América.

¿Pero usted no ha revelado la broma?

Decenas de veces, pero los periodistas, que tal vez no leen la prensa, siguen pidiéndonos entrevistas con Omar, el director de la escuela de mendigos de Nueva York.

Algunos se merecen el cachondeo.

Los medios están pidiendo a gritos que se rían de ellos. Mi equipo de actores y yo fuimos al reality show de Donahue y cuando nos preguntaba, nos desmayábamos.

No es para menos: ¡menudo freaky!

¡Fuimos noticia en los informativos! También logramos portadas serias: uno de mis actores, iraní, se hizo pasar por Mehdi Bahremani, traficante de armas arrepentido que, en nombre de Alá, quería devolver sus seis millones de dólares de comisión a los pobres contribuyentes americanos.

Esa broma era muy seria.

Cuando el miembro del Ku Klux Klan David Duke lideraba las encuestas para ser gobernador de Luisiana, fundé la KKK Symphony Orchestra para mejorar la imagen del KKK. Montamos un concierto con encapuchados en Luisiana y Duke de invitado de honor... ¡Y David Duke aceptó!

No era un tipo muy listo.

Conseguimos demostrar su talento. Cuando caen las inmobiliarias, como ahora, suelo poner un clasificado en The New York Times:"Constructor en apuros vendería un riñón para salvar su empresa".

Hoy necesitarían vender los dos.

Pues muchos de los programas papanatas de la tele pican y nos llaman. Contrato un actor y nos reímos de lo lindo en el plató.

¿La broma de su vida?

La de mi muerte. Logré que The New York Times publicara un precioso artículo con la noticia de mi muerte. Y por primera vez en su historia... ¡tuvieron que rectificar una necrológica!

------------------------------------------------------------------------------------------
 
La tía de Indiana

Más bromas - muy serias- de Alan: denunció a Hacienda por fraude fiscal... ¡Y llegó al Supremo! Se hizo pasar, vendado, por Howard Hugues y, en concurrida rueda de prensa, anunció que se iba a congelar en criogenización hasta que volviera a subir la bolsa; montó la boda de un supuesto Idi Amin con una wasp; promocionó a una actriz en paro haciéndola pasar por la ganadora de 35 millones en la bonoloto... Pero me quedo con su reflexión tras lograr que The New York Times publicara su necrológica: "Tienes que morir para conocer la gentuza con la que vives: mi tía de Indiana llegó a casa con un camión para llevarse mis muebles. Al verme vivo, me atizó con una escoba. No me habla".



Primo  Precedente  Senza risposta  Successivo   Ultimo  

 
©2024 - Gabitos - Tutti i diritti riservati