Guardo dentro de mi alma más preguntas que respuestas. Y la plena conciencia de ignorar muchas cosas. Ni todo lo que he visto, ni todo lo que he oído, ni todo lo aprendido, hecho, o leído, pueden curarme de esa incertidumbre. No es mucha mi sabidurìa, pero teniendo conciencia, he encontrado algo. Algo más cierto y más duradero que yo mismo. Algo tangible, certero, real.
 
Creo y me aferro a la idea de ser apenas una diminuta parte del todo. De estar contenida de algún modo en una realidad descomunal y que para mi es un misterio tal, que lamento no tener más vida, para saber más.
 
Y así camino, con mi manojito de dudas. Curiosa, atenta, lista para el próximo descubrimiento, abierta a todas las sorpresas. A las que me llenan el alma. A las que me quiebran la cabeza. A las que amo. A las que no. Todo abrazo con mi alma, y el mundo es tan diverso, que mi interés está disperso por todo lugar. Por lo de cada día, y lo lejano. Por lo grande y lo pequeño. Por lo que veo en mis sueños, y lo que toco en mi realidad.
 
Soy sencillamente un grano de arena, siempre yo misma, en esta enorme misterio que es la vida