Conocerse a sí mismo...Vencerse a sí mismo...Apreciar la belleza...la propia, la
de los demás, la belleza que nos rodea...
La belleza de la vida está en esas cosas...En las que no nos detenemos a veces, las
que no miramos, las que pasan desapercibidas cuando estamos
apurados.
La belleza de la vida está muy cerca de nosotros.
Debemos detenernos, apreciarla, valorarla.
El misterio puede ser revelado si nos llenamos de amor, si damos amor, si
valoramos un segundo como se valoran los años que pasaron.
Encontrarse a sí mismo reconociendo nuestras debilidades, nuestros errores,
nuestras fallas...pero encontrarse con amor.
Aprender a amarnos esa es la clave y saber que la fuerza, la luz, la belleza
no dependen de factores externos ya que como el amor yacen en cada uno de
nosotros y somos nosotros quienes podemos fortalecernos, iluminarnos,
embellecernos...Porque si hay amor todo es más fácil, todo es más simple, y
sólo el amor a nosotros mismos, a la vida, nos permite sentirnos
invencibles.
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