"Nunca dejes pasar una jornada sin conectarte con el mundo
espiritual, sin buscar el contacto con las corrientes divinas,
con las entidades divinas. Sí, ni siquiera una jornada, porque
después es difícil volver a
encontrar el mismo estado interior
de claridad, de paz. Ya has hecho la experiencia a menudo:
una sola jornada sin concentrarte en el mundo de la armonía y de
la luz, y ya sientes que toda clase de cosas pesadas, de
oscuridades, se han acumulado en ti. ¡Y cuántos esfuerzos
después para desembarazarte de ellas! Te quejas:
«Estoy en la
oscuridad, en el frío, estoy agobiado por las cargas»... Pero,
¿acaso no has hecho todo lo posible para llegar hasta aquí?
Puesto que te has dejado llevar por la pereza, por el
estancamiento, tus canales y tus centros sutiles se han
obstruido, y ahora ya no hay comunicación posible con el mundo
divino.
Cada día tienes la posibilidad de descubrir este mundo divino
que es la verdadera patria de tu alma, asi que, no
abandones ninguno de los ejercicios que te permiten penetrar en
ella. ¿Por qué permanecer en el otro lado de la frontera? ¿Por
qué permanecer en el exilio?..."
(Omraam Mikhaël Aïvanhov
)
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