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… el sonido de la luz construye el mundo: 
violines para las rosas, 
oboes para los lirios; 
 
¡ … y ay de mí bajo el amor, temblando, 
- ay de mí - 
pues prende y sube la mañana como laúd de fuego 
y yo en su hogar, oyéndola, quemándome…! 
 
¿ … y esta algidez, y esta fuerza, y esta dulzura ? 
 
… todo el mar ha ardido, todo, 
y limpio está; 
 
… emprenden hacia el sol, el vuelo, las gaviotas, las palomas, 
y también, también lo alzan, los tres gorriones o insignias de mi alma. 
  
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