Hasta ahora todo lo planeado por el cerebro de Asgard ha tomado un buen camino, y la segunda etapa de su objetivo ha llegado a su cúlmine, viéndose como en las penumbras del bosque aledaño, una presencia cubierta por la oscuridad, deja su punto espía, donde obtuvo toda la información necesaria, para comenzar a moverse rápidamente dentro de la densa población que conduce hacia los caminos que llevan a la caberna de Magma, hogar del valiente Hagen, donde la princesa Flare camina sin preocupación esperando su pronto encuentro con el joven...

Flare: "Hagen se alegrará de mi visita, pero de seguro se preocupará por las noticias que envía la señora Hilda, ella ha estado preocupada por la guerra y ha estado pidiendole ayuda a Odín..."

Pero entonces, una figura oscura corta el aire frente a la joven, tan rápido que apenas es percibido por la princesa, que inmediatamente se detiene totalmente perturbada...

Flare: ¡Pero! ¡¿Quien anda ahí?!

Emite, pero como respuesta, mas movimientos sigilosos, y rapidos van indimitando su persona, hasta que un grito desesperado retumba en el frío paraje...

Flare: ¡Basta! ¿Quien eres y por que haces esto?

Entonces, la silueta se presenta frente a ella, y mediante pasos, se revela un rostro plentamente malicioso, cubierto por un yelmo y una armadura Azul como el hielo, en representación de la estrella Megrez Delta...

Flare: ¡Alberich!

Comenta un tanto más tranquila, pero con la seria perturbación que esa pronta aparición le ha causado...

Flare: ¿Por que has echo eso?

Alberich: Señorita Flare, no es prudente pasearse este lugar a estas horas de la noche, ¿Acaso está perdida?

Comenta aquel peli rojo con un mechon que cubre uno de sus ojos, dándo un claro rasgo de misterio bajo una sonrisa llena de malicia y ambición

Flare: Voy a llevar un mensaje a Hagen, de parte de la Señorita Hilda, no tengo tiempo que perder, así que te pediré que acompañes mi camino, tienes razón, Alberich, estos senderos son tan misteriosos como peligrosos y muchos osos rondan este lugar...

Alberich: Me temo que no podré acompañarla esta ves, mi señora

Flare: ¿Pero... Como? "¿por que no siento la misma hospitalidad que tienen los demás dioses guerreros en el... ¿Acaso el es diferente?"

Alberich: Así es, mis planes tienen un rumbo diferente al que Hilda pretende, la única manera de salvar a Asgard, es con el dominio absoluto, que los dioses guerreros vayan a bluegard y peleen con los espectros, no será suficiente... No, Jhm jhm jhm.

Flare: Alberich, ¿A que te refieres con que Hilda está equivocada?... Ella es la representante de Odín en la tierra, todas sus opciones son siempre serán para el bien del pueblo de Asgard, no puedo comprender a que te refieres con eso

Alberich: Jajajá, simplemente me refiero a que se necesita el poder de un arma que hilda ignora completamente para gobernar a Asgard y la ignorancia será su perdición... jhm jhm, tengo el beneficio de que yo no soy como los demás, yo creo en el poder y la conquista, ¡Yo Soy el Cerebro de Asgard!... Y Hilda ha ignorado eso, por eso será derrotada.

Flare: ¿Pero que es lo que dices?... El amor de Hilda ha mantenido la unión en Asgard, al igual que por la voluntad de los dioses guerreros, no puedo creer que digas esas cosas, siendo uno de los siete guerreros de Odín, Alberich, estás equivocado

Alberich: No, yo poseo el conocimiento para adquirir la fuerza para gobernar Asgard y el mundo, el amor de Hilda solo ha causado destrucción y hambre para el pueblo... ¡Yo no desperdiciaré la oportunidad de cambiar eso!... y Quitaré de mi camino a todo aquel que piense lo contrario...

Entonces, su cuerpo se mueve rápidamente y desde su diestra, una espada flameante resurge, provocando un corte tan rápido que atraviesa en un parpadeo la corriente eólica, atravesando la fisonomía de la joven Flare...

Flare: ¡Augh!

Exclama, quedando inmovil mientras desde el largo de su torso hasta su propio rostro se elevan al aire, aflojando sus rodillas para caer al piso, pero antes de tocar el lozado, las manos de su asesino la atrapan...

Alberich: Lamento que tenga que perder su vida, por los errores de Hilda, pero todo saldrá a la perfección... jhm jhm jhm

Entonces, con la agilidad que le caracteriza, deja el lugar en rápidos movimientos, llevandose consigo el cuerpo de la princesa hasta perderse de foco dentro del denso bosque...