Los creyentes de Esmirna eran olor dulce para Dios. La persecusiòn había producido una fragancia divina en sus vidas. Jesus no tuvo reproches para estos creyentes. No debemos buscar las pruebas y los sufrimientos, pero cuando estos vienen, sepamos que Dios tiene un proposito.
Habia un creyente llamado Marcos que ofrecio su hogar para comenzar una iglesia. En el principio habia unos pocos asistentes, pero a medida que los creyentes compartian su fe, otros aceptaban a Cristo. A medida que pasaban los años, aumentaba el numero de cristianos.Compraron un lote y edificaron un lindo templo. Marcos fue fiel a Dios y a la iglesia durante todos estos años, pero había algo que le causaba muchas lagrimas. Hacia varios años era casado, pero aún no tenian hijos. Su esposa quedó embarazada nueve veces durante todos estos años, pero sus embarazos nunca duraban más unos pocos meses. Siempre perdía a sus bebes antes de tiempo. Otro creyente llamado Francis los criticaba diciendo que Dios los estaba castigando por sus pecados. Esto solamente añadía tristeza a la vida de Marcos y de su piadosa esposa. Un tiempo después ella quedó embarazada por decima vez y despues de nueve meses, dio a luz a su primer hijo. Marcos y su esposa estaban muy felices, pero Francis dijo que debia ser que se habian arrepentido.