Home  |  Contact  

Email:

Password:

Sign Up Now!

Forgot your password?

Fraternalmente unidos
Happy Birthday hectorspaccarotella !
 
What’s New
  Join Now
  Message Board 
  Image Gallery 
 Files and Documents 
 Polls and Test 
  Member List
 General 
 Normas de convivencia en el grupo-- 
 Lee la Biblia aquí! 
 Biblia en Power Point 
 Conoce tu Biblia 
 La Biblia en ocho versiones 
 Recursos Teológicos 
 Estudios biblicos 
 Reflexiones- Hernán 
 Selección de pasajes Bíblicos- por Hernán 
 Biografías de hombres de la Reforma protestante- Por Hernán 
 Arqueología Bíblica (por Ethel) 
 Reflexiones 
 Jaime Batista -Reflexiones 
 Tiempo devocional-Hector Spaccarotella 
 Mensajes de ánimo--Por Migdalia 
 Devocionales 
 Escritos de Patry 
 Escritos de Araceli 
 Mujer y familia- 
 Poemas y poesias 
 Música cristiana para disfrutar 
 Creaciones de Sra Sara 
 Fondos Araceli 
 Firmas hechas-Busca la tuya 
 Pide Firmas 
 Regala Gifs 
 Libros cristianos (por Ethel) 
 Panel de PPT 
 Amigos unidos-Macbelu 
 Entregas de Caroly 
 Regala Fondos 
 Texturas p/ Fondos 
 Separadores y barritas 
 Retira tu firma 
 Tutos 
 Tareas HTML 
 COMUNIDADES AMIGAS 
 
 
  Tools
 
General: el lazo invisible
Choose another message board
Previous subject  Next subject
Reply  Message 1 of 5 on the subject 
From: hectorspaccarotella  (Original message) Sent: 11/10/2013 23:36

Bajo la calurosa luz del sol, una caravana atravesaba las arenas del desierto. Poco antes del atardecer se detuvieron para preparar el campamento donde iban a pernoctar. Un joven al que habían contratado para que se ocupara de los camellos se le acercó al jefe del grupo diciéndole:

- Tengo un problema, son 18 camellos y solo tengo 17 cuerdas para amarrarlos.

- Eso no es ningún problema – le dijo el jefe – los camellos no son muy inteligente. Amarra los primeros 17 y luego te acercas al último y simulas amarrarlo a él también. Como habrá visto que todos sus compañeros fueron amarrados y habrá sentido que te acercaste a hacerle lo mismo, se quedará quieto toda la noche pensando que él también está atado.

El joven fue a hacer lo que le dijo el jefe sin protestar pero sin creer nada de lo que había escuchado. Al terminar se percató de que el último camello se quedó tranquilo junto a sus compañeros.

Al amanecer el joven vio con alivio que el camello permanecía allí donde lo había dejado. Entonces liberó a los otros 17 camellos ya que pronto debían partir. Cuando la caravana se puso en camino, el joven corrió hacia su jefe diciendo:

- Espere, espere, hay un camello que no nos sigue.

- ¿Es el mismo camello al que simulaste amarrar anoche? – contestó el jefe con una media sonrisa en los labios.

- Sí ¿Cómo lo sabe?

- Seguro que esta mañana se te olvidó soltarlo

- Pero no tiene amarras

- Lo sé – contestó pacientemente el jefe –, pero el camello todavía piensa que está amarrado. Corre, simula soltarlo y verás que se pondrá en camino.

Muchas veces nosotros pasamos por lo mismo que el camello de esta historia. Alguien pudo atarnos con algo que no existe. A  veces creemos lo que nos dicen y permitimos que nos dejen quietos, atados a complejos e ideas falsas acerca de nuestra capacidad, de nuestros dones y talentos. Nos quedamos quietos en un lugar inmovilizados por algo que no existe y perdemos oportunidades, dejamos que la vida se pase sin que podamos cumplir nuestro propósito.

¿Tienes sueños? Ve por ellos, ponte de pie y empieza a caminar, sal de la zona donde te has quedado esperando que alguien desate esa cuerda inexistente. Dios preparó cosas buenas para ti desde  hace mucho tiempo, pero debes levantarte.

“Pues somos la obra maestra de Dios. Él nos creó de nuevo en Cristo Jesús, a fin de que hagamos las cosas buenas que preparó para nosotros tiempo atrás.” Efesios 2:10 (NTV)

Dios ya te dio la libertad que necesitabas, camina sin temor y no permitas que nadie te quite ese hermoso regalo;  cuida de no ser carcelero de nadie, recuerda que con  nuestras palabras y acciones podemos atar a las persona, destruirlas e impedir que Dios cumpla el propósito en sus vidas e incluso tú podrías ser presa de tu propia trampa al no reconocer el valor que Dios te dio, no te menosprecies y lucha por alcanzar aquello que Dios te prometió.”

 

 

 

 

Ana María Frege Issa

Coordinadora Call Center

 

El siguiente crédito, por obligación, es requerido para su uso por otras fuentes: Este artículo fue producido porRadio Cristiana CVCLAVOZ.



First  Previous  2 to 5 of 5  Next   Last  
Reply  Message 2 of 5 on the subject 
From: Lolis Navarrete Sent: 12/10/2013 05:01

Reply  Message 3 of 5 on the subject 
From: Lolis Navarrete Sent: 14/10/2013 06:05

Reply  Message 4 of 5 on the subject 
From: Lolis Navarrete Sent: 15/10/2013 02:38

Reply  Message 5 of 5 on the subject 
From: Lolis Navarrete Sent: 17/10/2013 03:57


First  Previous  2 a 5 de 5  Next   Last  
Previous subject  Next subject
 
©2025 - Gabitos - All rights reserved