Adresse mail:

Mot de Passe:

Enrégistrer maintenant!

Mot de passe oublié?

Fraternalmente unidos
 
Nouveautés
  Rejoindre maintenant
  Rubrique de messages 
  Galérie des images 
 Archives et documents 
 Recherches et tests 
  Liste de participants
 General 
 Normas de convivencia en el grupo-- 
 Lee la Biblia aquí! 
 Biblia en Power Point 
 Conoce tu Biblia 
 La Biblia en ocho versiones 
 Recursos Teológicos 
 Estudios biblicos 
 Reflexiones- Hernán 
 Selección de pasajes Bíblicos- por Hernán 
 Biografías de hombres de la Reforma protestante- Por Hernán 
 Arqueología Bíblica (por Ethel) 
 Reflexiones 
 Jaime Batista -Reflexiones 
 Tiempo devocional-Hector Spaccarotella 
 Mensajes de ánimo--Por Migdalia 
 Devocionales 
 Escritos de Patry 
 Escritos de Araceli 
 Mujer y familia- 
 Poemas y poesias 
 Música cristiana para disfrutar 
 Creaciones de Sra Sara 
 Fondos Araceli 
 Firmas hechas-Busca la tuya 
 Pide Firmas 
 Regala Gifs 
 Libros cristianos (por Ethel) 
 Panel de PPT 
 Amigos unidos-Macbelu 
 Entregas de Caroly 
 Regala Fondos 
 Texturas p/ Fondos 
 Separadores y barritas 
 Retira tu firma 
 Tutos 
 Tareas HTML 
 COMUNIDADES AMIGAS 
 
 
  Outils
 
General: RECEPTIVOS
Choisir un autre rubrique de messages
Thème précédent  Thème suivant
Réponse  Message 1 de 1 de ce thème 
De: hectorspaccarotella  (message original) Envoyé: 25/05/2020 10:35

¡Cuántos conflictos se crean día a día en la comunicación!
Nos señalan algo que no nos agrada y reaccionamos con un espíritu defensivo.
Detectamos un comportamiento en el otro que nos resulta disfuncional y lo confrontamos sin medir el cómo, el cuándo, el dónde, o lo que sea. Sale lo que sale. Y luego nos autojustificamos afirmando que la gente está cada vez más sensible y ya no se puede decir lo que uno piensa.
Por el contrario, ¡qué buena combinación se produce cuando están presentes la palabra amable y la escucha receptiva!
A través de algunos proverbios bíblicos quiero compartir algunas sugerencias con relación a este tipo de problemas.

Una gran limitante para que lleguemos a un buen resultado en la comunicación es la necedad. El necio se caracteriza por:

  • Ser ignorante en alguna cuestión.
  • Actuar siempre como si supiera lo que no sabe.
  • Sostener la terquedad y resistencia ante cualquier advertencia sobre sus errores o su misma necedad.

Tres proverbios nos aportan tres enseñanzas:

  • El necio, al no ser permeable, tiende a repetir los errores: “Así como el perro vuelve a su vómito, el necio repite su necedad” (Proverbios 26:11).
  • Hasta que no cambie su estilo de afrontamiento, es una pérdida de tiempo animarlo a que modifique su comportamiento: “No gastes saliva con los necios, porque despreciarán hasta el más sabio consejo” (Proverbios 23:9).
  • La necedad puede ser más contagiosa que el peor virus. Cuidado de no morder el anzuelo y terminar en una escalada de violencia y necedad: “No respondas a los argumentos absurdos de los necios o te volverás tan necio como ellos” (Proverbios 26:4).

Pero como afirmaba al comenzar esta reflexión: ¡qué buena combinación se produce cuando están presentes la palabra amable y la escucha receptiva! Otro proverbio nos describe este saludable ensamble: “La crítica constructiva es, para quien la escucha, como un pendiente y otras joyas de oro” (Proverbios 25:12).
Es posible. Sí, es posible generar una bendita confrontación. Se necesitan entonces:

  • Crítica constructiva (un espíritu del mensajero que integre humildad, esperanza y deseos de edificar)
  • Permeabilidad del receptor (actitud de aprendiz).

El resultado será encontrarse con una joya de incalculable valor.
¡Que este tiempo nos encuentre siendo amables en la palabra y permeables en la escucha!

GUSTAVO BEDROSSIAN



Premier  Précédent  Sans réponse  Suivant   Dernier  

 
©2025 - Gabitos - Tous droits réservés