El entusiasmo es el camino a seguir para
encontrarse a sí mismo,
la serie de vivencias que conducen
a quien se entregue a ellas a encontrar
la salida de su propio laberinto.
El entusiasmo permite ubicarse en una vía
por la cual
se puede avanzar, porque es la
vía precisa que nuestro deseo establece
desde la inmediatez de una sensibilidad
que quiere y busca más.
La salud, la salud física en su expr
esión tanto muscular como mental,
requiere que aceptemos la
vía del entusiasmo, que es la vía del
bienestar.