Pegasus Seiya - Saint's Memories

** - Finalmente he regresado - es el rápido pensamiento de un joven que, con veloces y marcados pasos, anuncia su llegada hacia el Santuario, el lugar que por largos años sirvió como cuna a su entrenamiento para convertirse en un Caballero. El mismo que aún conserva su tradicional construcción, donde unos cuantos pilares roídos por el paso del tiempo, sirven de entrada a este lugar ubicado en la mismísima Grecia. Así, mientras se acerca a uno de ellos y apoya su mano abierta en él, varios recuerdos invaden su mente, especialmente aquellos que comparte con Marín, su maestra, la mujer que lo guió a través de fuertes y duros entrenamientos para lograr conseguir la mítica armadura que ahora lleva cargando dentro de la caja en su espalda. Pero entonces, su rostro se torna preocupado, puesto que su vuelta trae consigo un único y firme propósito - Estoy seguro de que algo anda mal por aquí - dice al instante en que da unos pasos al frente para iniciar una lenta caminata, mientras continúa con su diálogo - Tengo un mal presentimiento, como que si de algo malo estuviera por suceder - sostiene, levantando su vista al frente, y dar un fuerte salto que lo lleva a subir a un pilar que se encuentra en buen estado, y conseguir una vista panorámica que el paisaje del Santuario le entrega - No puedo perder más tiempo, tengo que encontrar a Marín lo antes posible, estoy seguro de que ella podrá decirme algo al respecto - Entonces, inclinando su cuerpo, y empuñando su mano derecha con fuerza, y sujetando de igual manera con la diestra una de las correas de la armadura de Pegaso, es que Seiya se impulsa con otro fuerte salto hacia adelante, e iniciar la búsqueda de Marín, para resolver finalmente las dudas y preocupaciones que lleva consigo. "Saori" pronuncia en sus adentros, cuando la imagen de su amiga de infancia, que junto a él y otros niños más compartió su crianza en aquel pueblo, se dibuja en su mente con su cálida y característica sonrisa **