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»»|| Presente: ºII El Destino que Marca a las Nuevas Guerreras IIº
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Tras la
desaparición del Cosmos de Athena, la Saintia protegida por la constelación de
la Aurora Boreal, luego de terminar su entrenamiento en la Montaña Togakushi es
enviada al Santuario Atheniense para investigar las extrañas anomalías que han
estado sucediendo, a su vez, la representante de Delfín tendrá que acudir al
mismo llamado… ¿Podrán estas jóvenes oponerse al cruel destino?
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*Desde la Montaña
Togakushi, en Japón, una joven de rubia cabellera se encuentra dialogando con
una mujer en silla de ruedas quien inesperadamente teletrasporta a la primera hasta
la salida de la novena casa zodiacal “Katya… no logro sentir el cosmos de
Athena, parece que ha desaparecido…” es el recuerdo que viene a la mente de la joven,
palabras que le fueron dichas con antelación por su maestra, líder de las
Saintias, aquella caballero plateado que posee el poder para enfrentar a la
elite dorada “…lamentablemente no todos en el santuario son de fiar, así que te
acercare hasta donde más pueda…” sin emitir palabra aun, la protegida por la constelación
de la Aurora Boreal, voltea a ver la salida del templo del legendario centauro,
luego realiza un gesto al bajar la barbilla “…recuerda que lo primordial es la
seguridad de nuestra Diosa…” y como si con aquella simple expresión se diera ánimos a sí misma, comienza a correr
de forma rápida pero elegante –vamos…- exclama tras avanzar entre aquellas
marmoladas escaleras “Katya… ten cuidado con los últimos tres caballeros, especialmente
con aquel que se dice ser el más fiel a Athena” es el ultimo pensamiento que
tiene luego de continuar con su ascenso, mismo que le conducirá al siguiente
templo, capricornio, protegido por uno de los caballeros más letales, aquel de
voluntad inquebrantable poseedor de la legendaria Escalibur…*
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**Todo lo que puede recordar la joven Saintia antes de caer en la inconsciencia es el abrumante dolor del cosmos del traidor asestándose en su cuerpo. Mas, antes de desvanecerse, dos figuras impidieron el golpe de gracia. Una larga cabellera rubia y un par de majestuosas alas doradas se interpusieron entre ella y Géminis. El último se vio en la obligación de lidiar con los recién llegados, mas solo fue con uno de ellos, pues Sagitario se apresuró a sacar a la chica del templo de Athena y la llevó hasta Virgo segun una instrucción del otro. El griego se empeñó en salvar su vida y le dejo alli, no sin antes mirarla en silencio. "-No te muevas de aquí hasta que te hayas recuperado... solo así podrás ayudarnos" fueron las unicas palabras que le dijo antes de irse. Todo lo demás fue incierto hasta que despertó, sobresaltada, al dejar de sentir el cosmos de Athena en el Santuario y el surgimiento de otro cosmos sumamente diferente al de su diosa. Una vez repuesta, la chica se levanta y corre escaleras arriba, pues la vida de la deidad corre peligro. Sin pensarlo dos veces, decide guardar la información de lo que ha visto del resto, pues desconoce si hay mas gente que haya traicionado a su diosa como lo ha hecho Géminis. Solo puede correr y hacer lo posible para obtener el paso hasta el templo de Athena una vez más, sin embargo debe ser más cuidadosa.... sobretodo con uno de ellos... las palabras de Sagitario aun resuenan en su mente... "espero que puedas pasar Capricornio". Fue solo un susurro, pero logró captarlo antes de que el greco se marchase para lidiar con Géminis. ** |
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*La mente
de la joven lentamente se va llenando de preguntas y a la vez se reprocha por
no haber estado al lado de la Diosa Athena cuando su cosmos desapareció “¿qué le sucedió señorita Athena?” se
cuestiona mentalmente al tiempo que apresura el paso no sin antes percatarse de
una presencia particularmente familiar “así
que no soy la única…” se dice a si misma sin detener su avance, tras unos
minutos finalmente logra ver el magnificente Partenón dedicado a la cabra acuática
“¿cómo será ese sujeto? y ¿Por qué
Mayura-sama me advirtió sobre él? ” tras preguntarse aquello, calma su
mente al tiempo que se enfoca en la nueva misión, tras unos segundos se detiene
justo en el límite de los últimos escalones, mismos que sube lentamente
presionando con fuerza no solo su diestra sino la mandíbula pues hay algo en
el ambiente que le causa total intranquilidad…*
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**"Asi que también está aquí..." piensa al notar una cosmoenergía muy conocida al acercarse ya al décimo templo. Sin importar lo que pueda pasar, se decide a aliarse con esta persona aun cuando no conozca del todo sus intenciones, pues lo mas importante en este momento es el ayudar a Athena. Es imprescindible el lograr que el caballero que cuida este templo les permita seguir avanzando. "Es tiempo de demostrar que tengo las habilidades que requieren siempre los caballeros de Athena... no podemos permitir que la lastimen otra vez..." Se mentaliza para la batalla al tiempo que va notando el templo de la mitica cabra acuatica y, en ella, una silueta en su portal, aparentemente lista para avanzar. ** |
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º Dichosos sean aquellos jóvenes de la nueva generación que tengan el honor de presentarse ante el magnífico templo de la Cabra, el décimo templo de la elipse solar representada como un templo de diseño griego en honor a Athena. Un lugar santo, pulcro e imperturbable, una casona cuya magnificencia puede ser observa casi en lo más alto de la colina en la cual se siembra los mausoleos zodiacales. Es ahí donde yace una de las más grandes leyendas que la historia de los Santos se pueda contar, el hombre más orgulloso del planeta quien iza el estandarte de la justicia y la lealtad, además de ser protagonista de magnas leyendas que con fuego se graban en los expedientes de Grecia, pues su nombre es historia y sus proezas son heroicas.
Es precisamente que, en la entrada de tan importante lugar, una figura reluciente, pero ensombrecida, comienza a emerger con lentitud deteniéndose justo a un metro del arco que separa los interiores con los exteriores. El rigor de las historias contadas acerca el guardián está a punto de caer sobre aquellas osadas jóvenes...
- Ni siquiera tengan la intención de acercarse un paso más a este templo de Capricornio. Deténganse ahí mismo o acabaré con ambas en menos de un parpadeo -
Una voz fuerte y clara es la que proviene de aquella silueta emergente, cuya esencia que expele desgarra hasta el corazón del más valiente y corta hasta la mismísima voluntad de los dioses º
La leyendra tras el filo del acero... |
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*Su lento avance es
detenido por las palabras emitidas por aquel que emerge de la décima casa
zodiacal “¿ambas?” se dice
mentalmente al instante en que gira sutilmente la cabeza observando de reojo
una silueta que se aproxima rápidamente a su ubicación, inmediatamente después de
aquella acción sus ojos esmeraldas regresan solo para contemplar al enigmático hombre
que se presenta ante ellas, detenidamente le analiza recorriendo cada parte de
su imponente fisonomía y mientras lo hace una intensa ráfaga de aire hace
danzar su rubia cabellera que se entrelaza con aquella bufanda que cubre su
cuello “debes tener mucho cuidado con
aquel que es protegido por el manto de la cabra acuática…” la imagen de su
maestra advirtiéndole sobre el hombre se posa en su mente, intuitivamente pasa
un poco de saliva pretendiendo relajar la tensión en su mandíbula, luego aclara
su garganta –lamentablemente es
imposible que haga eso…- indica en tono fuerte y claro intentando suavizar su
timbre de voz -…debo pasar a como dé
lugar…- profiere mientras que espera que la recién llegada se incorpore a
su lado…*
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**-Me temo no poder hacer caso a sus palabras - son las sencillas palabras proferidas por la ultima en llegar. Comprueba k la otra es una de las muchachas con las k ha entrenado anteriormente en muy pocas ocasiones por el caracter serio de esta y por las diversas ocupaciones k tiene por cumplir. Ambas parecen estar en el mismo objetivo y, por mas incertidumbres k existan, deben unir fuerzas para avanzar lo mas pronto. recuerda vagamente la preocupacion presente en el rostro de Sagitario al mencionar la dificultad por este templo debido al frio y serio caracter del guardian -Debemos pasar a toda costa - Alza un poco su tono de voz mientras llega hasta un costado de la otra persona haciendole frente al capricorniano. **
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º La respuesta de las intrusas llegan rápidamente hasta los oídos del enigmático sujeto quien se para debajo de la entrada, envolviéndolo en una misteriosa sombra, sin embargo un singular brillo rodea todos los bordes de su silueta dándole un aspecto de santidad.
- Entonces automáticamente no me dejan otra opción más que arrebatarles la vida a ambas... por supuesto en nombre de Athena -
La voz varonil y firme se hace escuchar, acompañada del soplido del viento que choca contra su figura produciendo un sonido similar a como si de un sable se blandiera, tal y como relatan las historias en torno al 'guardián de la décima', pues se dice que todo su cuerpo está tan afilado como un cuchillo debido a que Athena le otorgó un don divino por ser su Santo más leal entre los ochenta y ocho.
Precisamente los relatos están a punto de confirmarse: La extremidad derecha del custodio se levanta con energía hacia el cielo, lo que automáticamente provoca el separar los peldaños en las que ambas están pisando, observándose como tras ésto, una incontable cantidad de rocas, piedras y polvo atacan desde el precipicio rápidamente a las amazonas con la intención de golpearlas y arrastrarlas hasta el abismo sobre sus pies que fue abierto por obra y gracia de Capricornio. º |
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*La escena se tensa
tras recibir la réplica por parte del guardián de dicho templo “de verdad no
entiende la gravedad de…” es el pensamiento que tiene antes de que la primera
ofensiva se haga presente, rocas, piedras y polvo caen sin piedad sobre
aquellas jóvenes, provocando que los sentidos de aquella protegida por la
Aurora Boreal se agudicen -y es precisamente el bienestar de Athena lo que me
motiva a seguir adelante…- expresa al instante en el que sus piernas se
flexionan para dar saltos simultáneos hacia el costado derecho pretendiendo
evitar el contacto directo con las rocas y piedras, anteponiendo su diestra a
la altura de sus ojos para esquivar el polvo y que este no se filtre hasta sus
iris, mientras tanto una fuerte aura azul celeste comienza a emerger desde su
interior –…¿Que acaso no lo entiende caballero?- exclama al
instante en el que vuelve a tocar el piso, tomando una actitud totalmente
defensiva, al tiempo que canaliza su ímpetu hacia lo que realmente le interesa,
lograr pasar de aquel templo “Athena… por favor espere un poco más…” medita empuñando
ahora ambas manos, dejando que su energía fluya por cada parte de su ser, a la
par de que una fría mirada se postra en la humanidad de capricornio…*
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**Un suspiro exasperado se escapa de los labios de la Saintia mientras oye la respuesta del capricorniano. Se esperaba esa reaccion mas eso no quita la molestia por ella
-pues es una lastima que use el nombre de Athena para justificar una masacre en contra de dos personas que tambien pelean en su nombre - es lo unico que puede mencionar antes de moverse pues el otro ha usado su poder para provocar un derrumbe y ademas abrir la tierra bajo los pies de ambas muchachas. Tanto ella como la otra chica se valen de sus cosmos para evitar el caer al abismo. Mientras lo hace, Mii intenta aproximarse y lograr golpearlo. - ¡No logrará intimidarme con eso! - Asegura mientras avanza. **
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º Asombrosa es la habilidad de ambas guerreras para haber escapado fácilmente de las garras de la muerte, pues un precipicio a sus pies presumía el fin de sus existencias y es precisamente el guardián de Capricornio el responsable, quien avanza dos pasos, lentos pero firmes hacia adelante, dejando que los rayos de sol bañen una figura sagrada: Un hombre vestido de pies a cabeza por piezas de oro que conforman la armadura que lo acoraza. Cada protección representa una parte del signo de la cabra, donde particularmente se destaca el casco cornado del Santo. Toda duda se despeja al fin, aquel ser que es toda una leyenda en Grecia por sus proezas odiseacas y además ostenta el honor de ser el más leal a Athena aparece de cuerpo presente en la escena. La mirada tan afilada como una cuchilla se entierra sobre los ojos de la mujer que osadamente arremete en su contra.
- Desde la era del mito nosotros, los Caballeros dorados, hemos asesinado y derrotado a un millar de personas en nombre de Athena, esta no tiene por qué ser una excepción mucho menos cuando la orden del patriarca ha sido clara: Nadie debe entrometerse, si lo hacen lo único que recibirán es una inviación al mundo de los muertos. Yo, Shura de Capricornio, me encargaré personalmente de asesinarla -
Habla claro uno de los más orgullosos y terribles Santos, quien afila su mirada en la amazona, para inmediatamente dejar caer su brazo elevado, lo que provoca al blandirse un feroz corte horizontal en forma de luz relampagueante que se traza de extremo a extremo en la zona de los muslos de la muchacha. Tras esto, una corriente de aire choca el costado de su figura abatiendo la elegante capa que pende de sus hombreras, dándole un aspecto estoico y majestuoso.
Implacable es su voluntad, tal como la misteriosa navaja que reside en el interior de cada parte de su cuerpo. Es así como se manifiesta Shura, experimentado Santo español quien no titubea en impartir la voz del Patriarca, que es lo mismo que la de Athena º
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*Una sutil gota de sudor recorre la cien de aquella joven “estuvo cerca…” medita tras empuñar
fuertemente su diestra “si es tan
implacable como comenta Mayura-Sama el…” su pensamiento es interrumpido luego
de observar como la otra dama se abalanza de forma temeraria hacia el dorado –¡espera…!- intenta advertir a la otra
saintia al tiempo que su gélida energía se intensifica a cada segundo, fluyendo
de forma constante por cada parte de su ser “si
queremos sobrevivir, no debemos ser tan osadas…” mentaliza al tiempo que
analiza las acciones del guerrero “…debe
tener algún punto débil, todos lo tenemos…” continua su charla interna intentando
no perder detalle alguno de los acontecimientos –pues parece que no están haciendo muy bien su trabajo…- realiza
una sutil pausa solo para relajar su derecha, la cual alza al aire -…¿qué no se da cuenta que algo malo le ha
pasado a Athena?- exclama dirigiendo su mirada hacia aquel se supone más
fiel a la Diosa, a la par de que sus vestimentas comienzan a ondear de forma
vigorosa producto de la energía que va liberando, poder que resuena al unísono
con sus ideales y que va concentrándose en aquella extremidad, preparándose pues
la verdadera batalla está a punto de comenzar…*
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**El guardian de la decima casa persiste en el hecho de acabar con ambas muchachas, sin tomr en cuenta las palabras de estas. Pareciera estar sordo aun cuando ellas son parte del mismo ejercito y que estan de su lado en la labor de proteger a Athena. Esto se manifiesta en su ataque al momento en que Mii avanza hacia él. El aire a su alrededor se torna hostil y, en pocos segundos, el airecorta como la hoja de una espada. Por mas rapido que Mii retrocede, el corte llega a sus muslos, haciendola caer de bruces contra el suelo y la sangre brota de sus heridas. - ¿Cómo... Cómo puede ser posible que no se de cuenta de todo lo que está pasando y lo que puede pasarle a Athena mientras estamos en una situacion tan ilogica e innecesaria como esta? Todos aqui tenemos el mismo deber y el mismo objetivo - señala con dificultad mientras intenta mantener el flujo de su cosmos en su cuerpo para que este disminuya el dolor de sus heridas. No puede ser un estorbo para su compañera. Sin importar las diferencias, deben demostrar lo que pueden hacer y de que merecen ser parte de las filas de la diosa y estar a su servicio directamente. ** |
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