La Espiritualidad en Masonería

El Mundo del espíritu es invisible , intangible , e inmaterial. Está más allá de lo que nuestros 5 sentidos perciben y de lo que pudiera ser comprobado mediante el método científico. Pero aún y todo esto los inconformes con lo que nos presenta el mundo  habitual , intuimos que hay algo más allá de lo que nos presenta el mundo físico; advertimos que incluso ese mundo inmaterial determina al mundo material.

Lo lamentable de esto, es que esto del espíritu sirva para que todo tipo de embaucadores se apoderen de este campo y engañen a la gente, entre estos timadores y embaucadores están los Papas en el Vaticano, los sacerdotes, los rabinos , los pastores, los parapsicólogos, los espiritistas, los médiums, los charlatanes esotéricos, los lectores de cartas del Tarot, los predicadores , los curanderos en fin charlatanes de toda talla. Alrededor del mundo el espíritu se han valido hasta nefastos  políticos que hablan con la madre tierra , para pedirle permiso de construir un Tren Maya, en México.  Los embaucadores religiosos se han inventado cielos e infiernos , infiernos que pueden ser evitados pagándole al pastor varios miles de dólares, Brujos que protegen a Narcotraficantes a cambio de millones de dólares, en fin la confusión es total, y los charlatanes se aprovechan así en esta confusión  de las necesidades espirituales  del pueblo.

En Logias los masones nos apartamos a puertas cerradas del mundo exterior en una búsqueda de una verdadera espiritualidad  alejada de las religiones y de sus timadores, vemos con desprecio a los políticos que se valen de la buena voluntad del pueblo usando timos espirituales como invitar a Papas y Pastores a visitar sus países , con tal de ganarse la confianza del Pueblo.

Para la Masonería la Espiritualidad no tiene nada que ver con dogmas religiosos, no con la fe ciega , ni con esperanzas infundadas. Pero si tiene que ver con la búsqueda del conocimiento de los referentes que buscan un camino hacia de liberarnos o emanciparnos del materialismo, buscando las causas ocultas de las cosas y  de los misterios que velan la realidad. Debemos tener la imagen de un francmasón espiritualizado que indaga tras el velo , y va hacia lo profundo , sabedor de que el mundo material es solamente una apariencia.

La espiritualidad no es el campo de los engañadores. La peor manera de asomarse a las insondables profanidades del Más Allá es fantasear en el Más Acá y suponer cosas sobre que las  fantasías inventadas por las religiones o sectas servirán para darnos una idea precisa de lo que es Dios o de lo que es la verdadera espiritualidad.

Desde tiempos remotos los ignorantes se han dado a la tarea de crear hipótesis pueriles , creando con su imaginación fantasías  cielos e infiernos , y así creando religiones en base a imaginaciones. No debemos ya permitir que las Sectas y Religiones se hagan del monopolio de la espiritualidad , del mismo modo que los Imanes, Rabinos , Sacerdotes, Pastores y Papas  se adjudiquen el monopolio de Dios.        

Para muchos , la espiritualidad se resume en el desprecio a lo material , en confiar en su religión, o en tener una vida sin méritos y  sin esfuerzos pero si con mucha fe. La espiritualidad no se inventa , ni se teoriza, no se compone de hipótesis , sino que la espiritualidad se desvela con cada vivida experiencia , con cada desengaño , con cada reflexión, pero más que todo cuando uno va hacia su propia interioridad. La espiritualidad masónica es un camino que se adentra hacia el interior de nuestro propio Ser , hasta llegar a ese Sanctasanctórum interior donde habita el Alma Inmortal de cada uno de nosotros.  La espiritualidad es hacer contacto con el Yo Espiritual.

En el camino que lleva hacia el verdadero Yo Mismo Espiritual, no hay atajos , sólo hay sudor, lágrimas, fracasos , errores, caídas , desengaños y frustraciones que pavimentan el camino hacia el encuentro con uno mismo.

Quien cree poseer la verdad, se estanca. Quien opta por que las Ciencias Académicas le darán las respuestas se estanca y no va hacia la espiritualidad. Quien opta por aceptar a ciegas doctrinas religiosas, renuncia al desafío de encontrase a sí mismo. En cambio, el Masón buscador siempre encontrará una verdad mejor que la anterior.

Hay que admitir la habilidad de los líderes religiosos para hacerse con el patrimonio de lo espiritual, pero recordemos que una religión no otra cosas que un conjunto de ideas que tratan de administrar  los miedos y las esperanzas de las personas. Toda religión se basa en algo imaginario pero no persigue el conocimiento , porque ya lo cree tener , y no procuran la Libertad , sino el someter al pueblo.

La espiritualidad desde el punto de vista masónico requiere una gran dosis de valor , si de un valor para adentrarse  en la regiones inexploradas de uno mismo , a la búsqueda de la experiencia transcendente , que nos revela que nosotros somos un Ángel y un Diablo en eterno conflicto.

Las personas que las personas que no acepten la responsabilidad de la búsqueda personal , mientras necesite la tutela de una religión o una secta , mientras no acepte que no sabe,  es mejor que no sea masón , porque para ser masón debe partir en aceptar que lo ignora todo sobre sí mismo y sobre su interioridad.   El masón tiene la obligación de espiritualizarse pero sin dejar sus obligaciones materiales , ya no debe refugiarse más en la zona de confort de que es mejor ignorar que saber , o mejor dicho que es mejor ignorar lo que hay en su interior que saber que hay en su interioridad. El masón deberá abandonar el lugar donde  se siente fortalecido por la compañía de los muchos ignorantes , de los ignorantes que se limitan a aceptar lo que diga la ciencia,  lo que establezca la religión, lo que dicte la moda  o lo que imponga la política.

El masón espiritualizado , en cambio , es quien vive en la consciencia , que tiene necesidad de un verdadero conocimiento , quien se complace en arrancarse de la mente las falsas ideas de la ciencia moderna y de la religión , porque deshacerse de todo le dará con la verdad de sí mismo.

Para ser un francmasón espiritualizado , hay que desprenderse de muchas etiquetas y desprenderse de sí, un buen número de apriorismos atadores y  atavismos   subjetivos, antes de comenzar el viaje hacia el interior de uno mismo.

En el Camino Masónico hacia la Espiritualidad, de poco sirven las muy pesadas  maletas cargadas de suficiencia, vanidad, presunción y autoalabanza que algunos no pocos masones exhiben ostentosamente sobre sus lomos. Y, desde luego para llegar a la espiritualidad masónica  estorban mucho ese inmenso caudal de ideas deformadas sobre masonería, como esa idea de acumular grados masónicos, por sólo acumularlos sin jamás entender el excelso grado de eterno aprendiz de masón. Equivale a cero en la contabilidad de méritos masónicos para alcanzar la Espiritualidad: el Ego, la Envidia, la Vanagloria  y la Vanidad.

Alcoseri