El simbolismo masónico  redacta el catecismo de la imparcialidad y la sabiduría.

Pero estas nuevas logias “especulativas” se compusieron en  sus filas de  (aprendice, compañeros , maestros), de los ritos y de las herramientas de los trabajadores, permitiendo construir simbólicamente el “estado de perfección humana”, como se corta una piedra en bruto: el compás hace referencia a la integridad y la cognición, la escuadra a la rectitud, la regla representa la medida, la plomada sirve para el equilibrio, el mazo y la palanca evocan la fuerza, la paleta se relaciona con la fraternidad. Un guiño poco conocido de la historia: son estos rituales masónicos los que enriquecieron, a partir del siglo XIX, las costumbres esotéricas de la teosofía ...

Durante la elaboración de la masonería "especulativa", el orden iniciático cambió de naturaleza: la institución emergente reunió gradualmente a los artesanos, comerciantes y personajes élites del reino, sin barreras de rango o reclutamiento clerical o confesional . “Esto se explica por el contexto de aquellos años: Inglaterra y Escocia , que salían de una guerra civil, necesitaban de  un apaciguamiento y la diversidad de iglesias impedía el dominio de una sola de ellas”. Entre sus promotores, que se reúnen en logias londinenses, en clubes o en los círculos eruditos de la Royal Society, se encuentran el rico duque de Montagu, cercano a la corte, el ex hugonote exiliado de La Rochelle Jean-Théophile Désaguliers, su maestro científico Isaac Newton, el magistrado-enólogo de Burdeos Charles de Montesquieu, inició en Londres en mayo de 1730.

Gracias a las logias, que aparecieron en París a partir de 1725 o en Burdeos en 1732, se difundió por toda Europa el modelo parlamentario británico, un cierto liberalismo político, la tolerancia religiosa y el racionalismo científico. Iniciados de renombre, a los que se unieron Voltaire, Mozart, Goethe, La Fayette, Franklin y muchos otros, propagaron las ideas de la Ilustración que inspirarían en particular las revoluciones americana de 1776 y la revolución francesa de 1789. A pesar de sus ideales antidespóticos y antiabsolutistas, El movimiento intelectual no se opone a priori a los poderes establecidos ni a las Iglesias dominantes. Tradicionalmente, los masones son conformistas leales y bastante sabios”. Muchos aristócratas ingleses, como los de las cortes de Luis XV y Luis XVI, se unieron a las logias, y los Grandes Maestres generalmente formaban parte de séquitos reales, como el Duque de Antin y el Conde de Clermont. También fueron iniciados pastores y sacerdotes católicos , a pesar de la bula del Papa Clemente XII de 1738 que amenazaba con la excomunión a los católicos que se convirtieran en masones.

Por tanto, la cultura judeocristiana impregna la masonería desde sus orígenes. Según sus textos fundacionales - las Constituciones del pastor calvinista James Anderson, que datan de 1723 - el buen masón debe adherirse a "esta religión en la que todos los hombres están de acuerdo, dejando a cada uno con sus propias opiniones", sin ser "un ateo estúpido o un libertino irreligioso”. Si la masonería permite reunir a creyentes de todas las procedencias, “no comprender que las leyes de la armonía universal son obra de un gran arquitecto parece inconcebible para un discípulo de Locke y Newton”,. Con el tiempo, este “Gran Arquitecto del Universo” engrandecerá su significado eminentemente divino. Pera muchos este Gran Arquitecto del Universo  “Puede representar la conciencia, Dios o cualquier principio creativo, ya que la interpretación de los símbolos es libre”.

Esta herencia judeocristiana se materializa en multitud de referencias utilizadas por los iniciados. Comenzando por el templo de Salomón en Jerusalén, sinónimo de construcción perfecta; el personaje bíblico de Hiram, un  metalúrgico transformado por la albañilería en arquitecto del templo de Salomón y maestro ideal; los omnipresentes triángulos y tres puntos que marcan las firmas masónicas, que recuerdan la Trinidad; el delta radiante dotado de ojo divino, que encontramos en las iglesias; la presencia de un libro sagrado (la mayoría de las veces la Biblia) para abrir los "atuendos". Podríamos mencionar también la aparición, en determinadas logias deístas, de ceremonias masónicas de “agua lustral , para sustituir al bautismo ” luego aparecen los ritos para los niños pequeños lobatones o luvetones  y de “reconocimiento conyugal” para los recién casados... La lista no es exhaustiva.

Pero ¿Qué es el Catecismo Masónico?

El Diccionario Enciclopédico Larousse, en su versión castellana, nos otorga tres significados para la acepción “Catecismo”: 1. n. m. (bajo latín catechismus) Instrucción elemental. 2. Obra elemental que contiene, en preguntas y respuestas, la explicación del dogma y la moral. 3. Libro, volumen formado por la misma obra.

Etimológica y filológicamente, el Diccionario Etimológico y Filológico francés “Lexis”, nos indica que la palabra “Catecismo” [katefism], es un nombre masculino, que proviene del latín eclesiástico “catechismus” y del griego “Katékhismos”, siendo aquella una instrucción oral que data desde el año 1380. La cual era en un principio, una instrucción religiosa elemental, donada principalmente a los niños, en un libro que contenía, bajo la forma de preguntas y respuestas, una exposición sucinta de una doctrina religiosa. Pero es a partir del año 1700, que es considerado un “Resumen Dogmático”, un credo, que tiene los principios fundamentales de una doctrina, de una secta, como por ejemplo el famoso “Catecismo Republicano Francés” de la época de la revolución de 1789.

Luego de estas definiciones arriba detalladas, quizás nos sorprenderá, que dentro de la Masonería (“… la Masonería no es una Religión, ni un sustitutivo de la religión” según el concluyente Enunciado Fundamental del 21 de junio de 1985 de la Gran Logia Unida de Inglaterra), existan o tengan “Catecismos”… y que el título denominativo de “Catecismo (s) Masónico (s)” pueda dejarnos perplejos.

Catecismo masónico.- Antiguo nombre de la "Instrucción masónica" que se realiza por el juego de preguntas y de respuestas.

Tradicionalmente hemos creído que el Catecismo Masónico es sólo una particularidad del R:. E:. A:. y A:., cuando podemos apreciar todo lo contrario, en la historia de la Francmasonería inglesa, aparecen y encontramos varios de ellos, siendo quizás los más importantes, como conocidos por ejemplo, el Catecismo Masónico del año 1725, denominado “The Early Masonic Catechism” (“El Temprano Catecismo Masónico” - « Le Catéchisme Précoce Maçonnique »), y también el otro Catecismo Masónico Simbólico editado en el mes de abril del año 1760, llamado “Three Distinct Knocks” (“Tres Golpes Distintos” - « Trois coups distincts »).

En atención a lo indicado en el párrafo anterior, tenemos entonces, la versión en idioma francés del Catecismo del año 1760:

} Un catecismo simbólico (1760): Los tres golpes distintos.

Catecismo característico de los Antiguos Deberes de la Masonería Operativa Inglesa, fechado en 1760 y titulado “Los Tres Golpes Distintos”

Este texto es un reflejo de la corriente religiosa que ha animado desde 1756, comienzo mismo de la masonería especulativa en este país (publicación en esa fecha del Ahiman Rezon, un folleto como reacción a la masonería filosófica y aconfesional ilustrada por las Constituciones de Anderson de 1720).

En este sentido, marca una ruptura al posicionarse como un catecismo simbólico teñido de religiosidad. Da una nueva dirección a la Masonería  inglesa.

“Los tres trazos distintos” es uno de los primeros textos que evoca un cierto número de temas que experimentarán una extraordinaria difusión en la masonería mundial durante los dos siglos siguientes, en particular en el rito escocés antiguo y aceptado. Entre estos temas, conservemos entre otros el muy espiritual de las oposiciones encontradas en el camino.

Un catecismo simbólico (1760): Los tres golpes distintos.

Catecismo característico de los Antiguos Deberes de la Masonería Operativa inglesa, fechado de 1760 y titulado "Los Tres golpes distintos”.

Este texto es el reflejo de la tendencia religiosa que presentaba desde 1756, toda la principiante masonería especulativa en dicho país [Inglaterra] (por ejemplo la publicación en dicha fecha del Ahiman Rezon, panfleto impreso en reacción de la masonería filosófica y no confesional ilustrada por las Constituciones de Anderson de 1720).

A este respecto, aquel marca una rotura situándose como un catecismo simbólico mancillado de religiosidad. Aquel da una nueva orientación a la masonería inglesa.

"Los Tres golpes distintos”, es uno de los primeros textos que evocan un cierto número de temas que conocerán una difusión extraordinaria en la masonería mundial en el curso de los dos siglos siguientes, en particular al Rito Escocés Antiguo y Aceptado. Este tema, recoge entre otras cosas las grandes espiritualidades de oposición encontradas en el camino.

Se describe a continuación, en idioma francés, una primera parte de preguntas y respuestas del Catecismo denominado “Los Tres golpes distintos”:

La analogía es aún más marcada con el ritual de iniciación durante el cual el profano, con los ojos vendados, y al quitarle la venda ve abrirse un nuevo camino hacia la “Luz”. Despojado de sus prejuicios, se encuentra “reducido a un estado de sencillez primigenia ”. Más extraño aún, ciertos altos grados del antiguo y aceptado Rito Escocés (REAA), el más practicado, van acompañados de alegorías muy cristianas: así, el grado 18º de Caballero Rosacruz se obtiene al final de una ceremonia de la Última Cena, Fiesta de Pascua donde los hermanos comparten el cordero asado, o el pan eucarístico , directamente inspirado en la comida de la Pasión...

La espada es el símbolo de nobleza y doblaje iniciático para los caballeros.

Los masones franceses del siglo XVIII, empezando por el muy influyente Caballero André-Michel de Ramsay, se complacieron en recuperar, particularmente en las altas esferas, la abundante mitología templaria y caballeresca de la Edad Media, hasta el punto de propagar ciertas leyendas: Según ellos, los masones son descendientes secretos de los antiguos miembros de la Orden del Temple de la época de las Cruzadas, abolida por el Papa Clemente V y Felipe el Hermoso en 1312. “Se trata de una pura invención, pero efectiva  para alimentar fantasías”, pero no sirve para edificar lo masónico, sino sólo para tramar imaginarias venganzas templarias en los grados del 30º al 33º.

Aunque el Caballero Ramsay haya inventado un vínculo ficticio entre la masonería y los templarios, esto no impide que los iniciados masones celebren los valores de la caballería y se autoproclamen Gran Comandante del Templo, Caballero de Oriente y Occidente, Caballero del Águila Blanca y Negra es, en masonería, el nombre de un grado de los altos grados  masónicos del Rito Escocés Antiguo y Aceptado. Es el grado 30.º, en la escala de calificaciones de este rito, el término "Kadosh" proviene de la palabra hebrea "קדוש", que significa "sagrado" o "consagrado". "santificado". El título de Caballero Kadosh a menudo se abrevia en documentos o decoraciones masónicos como C∴ K∴ S∴ o C∴ K∴ H∴1​ Príncipe de Jerusalén o Caballero Kadosh. Este último grado, grado 30 de la REAA. Simbolizada por un águila con dos cabezas, una blanca y otra negra, pide simbólicamente la venganza de Hiram, arquitecto de Salomón asesinado por sus pares en la mitología masónica, y de vengar a  Jacques de Molay, gran maestre de la Orden del Temple, juzgado hereje y enviado a la hoguera en 1314...

Sin embargo afortunadamente , la masonería no se reduce únicamente a esta tradición. ¡Sus rituales citan a Moisés y Jesús, pero también a Mahoma, Buda, Confucio, Sócrates y Pitágoras! “Se basó en todo tipo de sabiduría, especialmente en pensadores y mitologías antiguas, ya fueran griegas, latinas o egipcias”. La forma de la estrella flamígera , decorada al centro con una G (de geometría, gloria, grande , gnosis o...God o dios en inglés) en el centro, recuerda los gráficos queridos por los seguidores de Pitágoras, al igual que las proporciones del rectángulo del templo, inspirado por el número áureo (1.618).

Bajo el Imperio, los rituales egipcios se extendieron

Los símbolos egipcios, presentes en ciertos ritos bajo la influencia del Cagliostro italiano en el siglo XVIII, se generalizaron bajo el Imperio, tras la expedición militar de Napoleón Bonaparte en 1799, que desencadenó una auténtica egiptomanía. Mientras las logias prosperaban bajo la estrecha supervisión de José Bonaparte, Jean-Jacques Régis de Cambacérès y los principales mariscales del Imperio, el culto a la civilización egipcia alimentaba las artes, la iconografía y la arquitectura. “Vimos aparecer diosas y pirámides en casi todas partes”. Los oficiales napoleónicos también fundaron una logia en El Cairo, Los Discípulos de Menfis. Uno de sus miembros, al regresar a Francia, continuó este linaje egipcio en 1815 con el nacimiento del rito de Memphis, que luego se fusionó con otro rito, el de Misraïm, procedente de tradiciones esotéricas.

Porque ciertas corrientes de la masonería también se han nutrido de fuentes místicas, eruditas y ocultistas en boga desde el Renacimiento: encontramos algunos préstamos alegóricos de la Cabalá hebrea, del hermetismo griego, de la literatura de los emblemas, una especie de juego de imágenes popular en el siglo XVI. , así como alusiones a alquimistas, astrólogos y otros adivinos. Uno de los masones lioneses más influyentes del siglo XVIII, Jean-Baptiste Willermoz, creó incluso el Rito Escocés Rectificado hacia 1780, mezclado con tradiciones templarias a las que añadió experimentos de hipnosis, inspirados en las teorías de la magia divina de su amigo Martinès de Pasqually. fundador de una extraña orden de Caballeros Masones Electos Coëns del Universo... También diversa, la Masonería sólo podía dividirse. Los “hermanos” más racionalistas y agnósticos se han distanciado de las corrientes deístas e “iluministas”. Es en Francia donde estas divisiones han sido más marcadas, con múltiples crisis y divisiones de lealtades.

RITO NACIONAL MEXICANO

Fue fundado el 26 de marzo de 1826, como una institución masónica con el “objeto primordial de cumplir con el sagrado deber de conservar puros los misterios de la orden y trasmitirlos de la misma manera a las futuras generaciones”.

Transcurrían los primeros años del México independiente y las diferencias políticas entre liberales y conservadores no lograban apaciguarse, la mayoría de los líderes políticos eran también miembros de la masonería y los enfrentamientos se volvían cada vez más intensos, enfrascándose en una lucha fratricida. En ese contexto nace el Rito Nacional Mexicano con el propósito de conservar la pureza de la masonería y unificar a los masones mexicanos.

Su fundación se lleva a cabo con la creación de la Gran Logia Nacional Mexicana “La Luz” y la conformación de sus primeras cinco Logias Simbólicas: Meridiano Anahuacense No. 1, Igualdad No. 2, Terror de los Tiranos No. 3, Despreocupación Indiana No. 4, Luz Mexicana No. 5

Años después los nombres de estas Logias cambiaron a: Reforma No. 1, Independencia No. 2, Libertad No. 3, Orden No. 4 y Constancia No. 5.

Un miembro muy destacado de este Rito fue Don Benito Juárez García, político liberal y presidente de México durante el periodo de 1858 hasta 1872. Don Benito Pablo Juárez García fue iniciado el 15 de enero de 1847 en la logia del Rito Nacional Mexicano “Independencia” No. 2, en la ciudad de México, días antes de partir a la ciudad de Oaxaca donde tomaría posesión de la gubernatura del Estado del mismo nombre, posteriormente y en su honor se declararía esta fecha del 15 de enero como Día Nacional de la Masonería Mexicana.

El Rito Nacional Mexicano A. C. continúa trabajando hasta la actualidad y está próximo a cumplir su primer bicentenario.

La alternancia de revoluciones y restauraciones agravó estas tendencias en el siglo XIX. El Gran Oriente de Francia, que abandonó toda referencia a Dios en 1877 después de tensos debates, se involucró en la política. “Sus camerinos eran entonces los únicos lugares donde expresarse libremente. El supuesto secularismo y el republicanismo progresista se forjaron como reacción a gobiernos conservadores que entonces contaban abiertamente con el apoyo de la Iglesia católica”. Cada vez más anticlericales, los hermanos del Gran Oriente apoyaron el advenimiento de la Tercera República. Sin embargo, este activismo “liberal” y “adogmático” de ciertos iniciados franceses sigue siendo una excepción dentro de la masonería: de más de cuatro millones de hermanos actualmente activos en el mundo, principalmente anglosajones, sólo algunas decenas de miles de francófonos reivindican su secularismo puro. Otros todavía adoran al Gran Arquitecto. Como lo llamen todos.

Obediencias, ritos y grados

Las denominaciones son federaciones de logias regidas por autoridades nacionales. Las principales obediencias francesas son: el Gran Oriente de Francia (GODF), cuyos estatutos datan de 1773, adogmático, a menudo clasificado de izquierda, que reúne a 50.000 hermanos; la Gran Logia Nacional Francesa (GLNF), fundada en 1913, espiritualista y reconocida por las logias anglosajonas regulares, más bien clasificadas de derechas, con alrededor de 40.000 hermanos; la Grande Loge de France (GLDF), nacida en 1894, espiritista, con 33.000 hermanos; la Federación Francesa de Derechos Humanos (DH), nacida en 1893, de obediencia adogmática mixta de 17.000 miembros; La Gran Logia Femenina de Francia (GLFF), nacida en 1952, obediencia espiritualista de 13.500 hermanas.

Los ritos codifican las prácticas gestuales y orales en las logias. Se pueden utilizar varios ritos dentro de una misma obediencia. En Francia, el más practicado, especialmente en el GLNF, el GLDF y el GLFF, es el antiguo y aceptado Rito Escocés, desarrollado por los anglosajones entre 1805 y 1820. El Rito Francés, desarrollado entre 1784 y 1801, se practica principalmente en el Gran Oriente y en el Derecho Humano. Hay otros ritos, como el rito escocés rectificado, el rito inglés estilo emulación, el rito de York, el rito Memphis-Misraim, etc. -, pero se utilizan de forma más marginal.

Los grados masónicos , representan las diferentes etapas del viaje masónico. Los iniciados se forman en los tres primeros grados (aprendiz, compañero y maestro) en logias “azules”. Una vez que se conviertan en “maestros”, en dos o tres años, los hermanos podrán contentarse con este altísimo estatus. Pero una minoría quiere experimentar más , con una sucesión de altos cargos. Existen talleres específicos de “perfección” que permiten obtener las diferentes “notas altas”, gestionados por “consejos supremos”. El antiguo y aceptado rito escocés otorga así 30 grados más , pero estos grados son inferiores a los grados azules , los grados filosóficos con títulos pintorescos y rimbombantes , desde el Maestro Secreto (cuarto grado) hasta el Soberano Gran Inspector General (33º grado), pasando por el Gran Electo de la Bóveda Sagrada, Jefe de la Tabernáculo o Caballero del Sol. El rito francés tiene sólo 4 altos grados, descritos como “órdenes de la sabiduría”: Maestro Electo, Maestro Escocés, Caballero de Oriente y Caballero Príncipe de los Rosacruces.

Los símbolos del templo.

Arquetipo idealizado del templo de Salomón en Jerusalén, el templo masónico -imagen de la construcción interior y universal que deben construir los hermanos- se rige por una precisa decoración y ordenamiento, que cada rito ha adaptado a su manera.

El Templo de Salomón en Jerusalén fue construido, según la Biblia, entre el 960 y el 953 a.C.

En la entrada occidental del templo, una sala rectangular sin ventanas, se encuentran las dos columnas marcadas con J y B (iniciales de Jachin y Booz, nombres de las columnas del templo de Salomón), que marcan el paso de lo profano a lo sagrado. Los hermanos se sientan frente a frente en la prolongación de las columnas, los aprendices en el lado B, simbólicamente el menos iluminado, al Norte, los compañeros, en el lado J, más cercano a la luz del mediodía, mientras los maestros se sientan donde quieren. En el centro, un mosaico ajedrezado  en el suelo evoca la dualidad del mundo y tres pilares alrededor del Ara Sagrada  representan la sabiduría, la fuerza y ​​la belleza. Al fondo, instalado en el Oriente , bajo el delta radiante (símbolo de la conciencia o principio creador) se encuentra el Venerable Maestro, presidente de la logia, quien dirige el trabajo bajo la bóveda estrellada (símbolo de la infinidad del trabajo por hacer). ). lograr), entre la Luna y el Sol. El Venerable Maestro está asistido en particular por dos vigilantes, el Maestro de Ceremonias, que abre la procesión, el Guarda Templo , que protege la entrada, el Orador , guardián de las tradiciones, el Tesorero, que lleva las cuentas, el Hospitalario, que recoge las donaciones, el Secretario, que redacta el acta, y  los expertos , que vigilan el ritual.

Alcoseri

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