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General: ¿Podría ser la Masonería el Anticristo?
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De: Kadyr  (message original) Envoyé: 08/06/2025 22:42
¿Podría ser la Masonería el Anticristo?

La idea de que la Masonería es el Anticristo es una teoría que ha sido especulada , abordada y debatida por algunos grupos místicos, esotéricos , religiosos  y personas, especialmente en el contexto de la maquinación y las teorías de la conspiración. Sin embargo, es importante destacar que no hay evidencia creíble que respalde  o niegue  esta afirmación.

La Masonería es una organización fraternal que se enfoca en la filosofía, la moralidad y la filantropía, y sus miembros provienen de diversas creencias y trasfondos políticos . Aunque algunas personas pueden tener preocupaciones o críticas sobre la Masonería, no hay pruebas de que sea una organización maligna o que esté trabajando para lograr objetivos siniestros.

Es importante abordar este tema con una perspectiva crítica y objetiva, y considerar lo siguiente: La Masonería es una organización que acepta miembros de diversas religiones e ideologías políticas , y no tiene una agenda política o religiosa específica.
La Masonería se enfoca en la filantropía, la moralidad y la filosofía, y muchos masones están involucrados en obras de caridad y servicio comunitario, aunque para muchos antimasones esto sería solamente una fachada.
No hay evidencia creíble que respalde la afirmación de que la Masonería es parte de una maligna conspiración global o que esté trabajando para lograr objetivos siniestros.
Pero, vayamos por partes  ¿Quién o qué  es el anticristo? No nos referimos a cuál es su   identidad humana, sino a la entidad malvada  en sí. ¿Cuál es su poder? ¿Qué se supone   que hará? ¿Cómo se le puede identificar?  

Todos hemos oído hablar en alguna ocasión del  anticristo, ya que es una figura mencionada   en numerosos libros, la biblia, revistas,  películas y series de  televisión. Pero al  escuchar un debate sobre hipótesis acerca de que   el anticristo podría ser tal o cual líder mundial, una organización   –o incluso un papa– nos dimos cuenta de que,   en realidad, se sabe  muy poco acerca de esa  figura antagonista de Cristo.

 ¿Qué o quién es ese   personaje? ¿Es humano? ¿Podría ser una Organización como lo es la Masonería? ¿De dónde surge? ¿Qué se  supone que hará? ¿Tiene algo que ver con Satanás?   

Nos motiva la curiosidad y desde hace muchos años he  comenzado  a investigar.  Y hemos decidido resumir y ordenar en un solo   vídeo todo lo que hemos encontrado para que  vosotros, que sabemos que también son investigadores,  podrían  conocer con rigor los orígenes de la figura  del anticristo y las profecías que lo involucran.
 Antes de seguir adelante , queremos recalcar que en Masonería se respetan  todas las creencias y no se pretende posicionarse   a favor ni en contra de ninguna de ellas.  Simplemente vamos a hablar del anticristo   desde un punto de vista de la investigación   como un tema interesante de la cultura general.
 El término 'anticristo' procede del griego 'anti',  que significa “opuesto o sustituto” y khristós,   “ungido o mesías”, por lo que, literalmente,  podría traducirse como “aquel que sustituye al   Mesías”. Pero también se puede interpretar  como “aquel que se opone al Mesías”.   Este dato es relevante porque, de las cinco veces  que aparece la palabra anticristo en la Biblia   –todas ellas en dos de las epístolas de San Juan y en el Apocalipsis  se nombra a la Gran Bestia , que para muchos es una alusión al Anticristo –,  tres de ellas hacen referencia a la anticipación   de la manifestación del anticristo a través de la  acción de apóstatas que reniegan del cristianismo. 

Ya, suena un poco confuso, pero enseguida lo  entenderán . Por ejemplo, en la primera epístola   de Juan, capítulo 4, versículo 3, se dice: “Y  todo espíritu que niega a Jesús no es de Dios;   es del Anticristo. El cual habrán  oído que iba  a venir; pues bien, ya está en el mundo”. Al   decir que “ya está en el mundo” se refiere al  espíritu de ir en contra de Cristo de aquellos   que rechazaban las enseñanzas de Jesús, no a que  ya estuviese en la Tierra el anticristo singular   que se menciona en el Apocalipsis y  del que hablaremos largo y tendido. También en la primera epístola de Juan, un  poco antes, en el capítulo 2, versículo 18,   se puede leer: “Hijos míos, es la última hora.  Habrán  oído que iba a venir un anticristo;   pues bien, muchos anticristos ya han aparecido,  y por eso sabemos que ha llegado la última hora”.   Y cuatro versículos después, Juan recalca: “¿Quién  es el mentiroso, sino el que niega que Jesús es   el Cristo? Ese es el Anticristo, el que niega al  Padre y al Hijo”. Por si os lo estáis preguntando,   se estima que las epístolas de Juan fueron  escritas entre los años 85 y 100 de nuestra era   y tal vez el texto, al hablar de anticristos,  apuntase a aquellos primeros cristianos que   no estaban de acuerdo con el dogma de  que Jesús fuese tanto dios como hombre,   un tema muy debatido por aquel entonces. 
 La secta judeocristiana de los ebionitas,   por ejemplo, consideraban a Jesús  un hombre virtuoso, pero no divino. De acuerdo, ya hemos visto que, por un lado,  Juan usaba la palabra anticristo para designar   de manera general a cualquiera que se opusiera  a los dogmas acerca de la naturaleza de Jesús, y   que muchos de esos anticristos ya pululaban por la  Tierra. Pero también alertaba de que vendría –en   el futuro– el anticristo en singular, una entidad  antagonista de Cristo, la misma de las profecías   apocalípticas –supuestamente escritas también  por el apóstol Juan–. Y es en ese personaje   en el que pensamos todos cuando oímos la palabra  anticristo, así que vamos ya a centrarnos en él. Pero antes, una duda que puede ser relevante  plantear: ¿escribió realmente el apóstol Juan   el Apocalipsis, el último libro del Nuevo  Testamento y, por tanto, de la Biblia? 

En   el primer versículo del Apocalipsis, su autor  se identifica como “Juan, siervo de Dios”,   y en el noveno precisa que se encontraba en  la isla de Patmos “por causa de la Palabra de   Dios y del Testimonio de Jesús” cuando un ángel  enviado por Dios le reveló lo que está a punto   de contar. Eso coincidiría con algunos textos  redactados por los primeros padres de la Iglesia,   según los cuales el apóstol Juan fue desterrado  a la isla de Patmos por el emperador Domiciano   a causa de sus prédicas. Por ello, aunque  el autor no se identifica como apóstol o   discípulo de Jesús ni como el autor del  evangelio de Juan ni de sus epístolas,   en el IV Concilio de Toledo, celebrado en el  año 633, la Iglesia decidió que el Apocalipsis   era obra del mismo Juan, el evangelista,  y que quien lo negara sería excomulgado.

 A pesar de que, como hemos dicho, la palabra  'anticristo' solo aparece en las cartas de Juan,   el ser maligno que aparecerá poco antes  del Juicio Final es mencionado en otras   partes de la Biblia, aunque empleando  diferentes nombres y entremezclando su   presencia y acciones con las de  otras entidades opuestas a Dios. 
Así, el profeta Daniel cuenta en el capítulo 7  de su libro que, durante un sueño, tuvo visiones   del futuro, en las que surgían del mar cuatro  grandes bestias. La primera era “como un león   con alas de águila”; la segunda, “semejante  a un oso, con tres costillas en las fauces”;   la tercera, “como un leopardo con cuatro alas de  ave y cuatro cabezas”. Pero la más terrorífica   de todas era la cuarta, a la que describe con  las siguientes palabras: “Vi una cuarta bestia,   terrible, espantosa, extraordinariamente fuerte;  tenía enormes dientes de hierro; comía, trituraba,   y lo sobrante lo pisoteaba con sus patas. Era  diferente de las bestias anteriores y tenía   diez cuernos. Estaba yo observando los cuernos,  cuando en esto despuntó entre ellos otro cuerno,   pequeño, y tres de los primeros cuernos  fueron arrancados delante de él. Tenía   este cuerno ojos como los de un hombre,  y una boca que decía grandes cosas”.
 Más adelante, en el mismo capítulo, Daniel cuenta  que contempló cómo aquel cuerno hacía la guerra a   los santos y los iba subyugando, y que le fue  revelada la interpretación de sus visiones:   “La cuarta bestia será un reino que habrá en la  tierra, diferente de todos los reinos. Devorará   toda la tierra, la aplastará y la pulverizará.  Y los diez cuernos son diez reyes de ese reino,   y otro saldrá después de ellos; será diferente de  los primeros y derribará a tres reyes; proferirá   palabras contra el Altísimo y pondrá a prueba a  los santos del Altísimo. Tratará de cambiar los   tiempos y la ley, y los santos serán entregados en  sus manos por un tiempo y tiempos y medio tiempo”.
 O sea, que dominará la tierra durante un tiempo...  y tiempos... y medio tiempo... ¿Cuánto tiempo   es eso? Un tiempo hace referencia a un año. Y al  decir “tiempos”, en plural, se refiere a dos años.   De modo que un tiempo y tiempos y medio  tiempo equivale a un año, más dos años,   más medio año. Total, tres años y medio. Es decir,  que ese cuerno, ese rey de un reino procedente del   mar que alzará su voz contra Dios, controlará el  mundo durante tres años y medio.
 Una estimación   que parece confirmada al final del Libro de  Daniel, por el versículo 11 del capítulo 12,   que da la siguiente cifra acerca de la duración  del dominio de la bestia: “Contando desde el   momento en que sea abolido el sacrificio perpetuo  e instalada la abominación de la desolación:   mil doscientos noventa días”. 
Es decir,  tres años y seis meses y medio, más o menos. Aunque lo más habitual es entender estas visiones  de Daniel como profecías de algo que está por   venir, del fin de los tiempos, también podrían  tener una lectura contextualizada en su época,   al igual que sucedía con las palabras de Juan  acerca de los anticristos en plural. Porque, si   bien los relatos originales y la primera  versión del Libro de Daniel parecen datar   de la época en que los israelitas regresaron de  su exilio en Babilonia –donde habían permanecido   cautivos tras la conquista de Jerusalén por el rey  babilonio Nabucodonosor II, en el siglo VI a. C.–,   la mayoría de los eruditos coinciden en que su  elaboración no se completó hasta el siglo II d.   C. 

Eso quiere decir que podría incorporar añadidos  hechos durante la época del primer alzamiento de   los judíos contra el Imperio romano, entre los  años 66 y 73 de nuestra era. ¿Y qué emperador   romano derrotó a los judíos en aquel conflicto?  Vespasiano. El periodo imperial de Roma se había   iniciado con el triunvirato formado por  César Augusto, Lépido y Marco Antonio,   a quienes siguieron Tiberio, Calígula, Claudio y  Nerón. Llevamos siete. 

Tras la muerte de Nerón,   Roma sufrió un periodo de gran inestabilidad,  con tres emperadores en menos de un año: Galba,   Otón y Vitelio. ¿Y quién se hizo con el poder a  continuación? Vespasiano, el feroz e implacable   azote de los judíos. Por tanto, según esta línea  de pensamiento, la cuarta bestia procedente del   mar sería el Imperio romano, sus diez cuernos, sus  diez primeros regentes, tres de los cuales cayeron   para que surgiera el undécimo, Vespasiano, quien  inició su implicación en la guerra contra los   judíos el mismo año en que fue nombrado emperador,  el 69, que fue conocido también como el año de los   cuatro emperadores. 

Al año siguiente, el hijo  de Vespasiano, Tito –quien una década más tarde   sería también emperador–, al frente de las tropas  en Judea ordenó la destrucción del segundo Templo   de Jerusalén, que había sido reconstruido  por los judíos tras su primera destrucción   por los babilonios de Nabucodonosor II. 

Por tanto, el Libro de Daniel podría   entenderse desde una perspectiva  historicista en lugar de profética. De hecho, aunque el Libro de Daniel forma parte  del Antiguo Testamento de la Biblia y, por tanto,   también del Tanaj –el conjunto de los 24  libros sagrados canónicos de los judíos–,   en el judaísmo no aparece la figura del  anticristo. En el cristianismo se vincula   al anticristo con ese undécimo cuerno de la cuarta  bestia descrita por Daniel porque, como veremos,   se parece mucho a las profecías del Apocalipsis  descritas por Juan en el Nuevo Testamento,   pero el judaísmo considera a Jesús un falso  profeta. Según la creencia judía tradicional,   el Mesías aún no ha llegado, y prohíbe  la adoración a Jesús, que era un hombre,   como una forma de idolatría, ya que Dios es  para los judíos una unidad absoluta y singular. 


  La escatología judía, es decir, el área de su  teología que trata acerca de los acontecimientos   que tendrán lugar hacia el final de los días,  señala –a partir de lo que se cuenta en Isaías,   capítulo 2– que la venida del Mesías a la Tierra  estará asociada a una serie de eventos como el   retorno de los judíos a su tierra natal,  la reconstrucción del Templo de Jerusalén   y una era mesiánica de paz y comprensión. Y  como creen que nada de esto sucedió durante   la vida de Jesucristo, deducen que él no pudo  ser el Mesías, y que este aún está por llegar. Ese punto de la reconstrucción  del Templo de Jerusalén resulta   especialmente llamativo por algo que  comentaremos más adelante. Recordadlo. Retomando la concepción cristiana del anticristo,  en Apocalipsis, capítulo 13, versículos 1 y 2,   podemos leer: “Y vi surgir del mar una Bestia  que tenía diez cuernos y siete cabezas,   y en sus cuernos diez diademas, y en sus  cabezas títulos blasfemos. 



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De: Kadyr Envoyé: 08/06/2025 22:43

La Bestia que   vi se parecía a un leopardo, con las patas  como de oso, y las fauces como fauces de león:   y el Dragón le dio su poder y su trono y  su gran poderío”. El Dragón es Satanás,   según se indica en el capítulo anterior: “Y fue  arrojado el gran Dragón, la Serpiente antigua,   el llamado Diablo y Satanás”. Por tanto,  el anticristo toma su poder de Satanás.   Esto también se expresa en la segunda carta  que supuestamente Pablo de Tarso, san Pablo,   escribió a los habitantes de Tesalónica –y decimos  supuestamente porque los expertos están divididos   casi a partes iguales entre quienes creen que  la escribió él y quienes opinan lo contrario–.   El caso es que en los versículos 9 y 10 del  segundo capítulo de la segunda epístola a los   tesalonicenses, se dice: “La venida del Impío  estará señalada por el influjo de Satanás,   con toda clase de milagros, señales, prodigios  engañosos, y todo tipo de maldades que seducirán   a los que se han de condenar por no haber aceptado  el amor de la verdad que los hubiera salvado”.

 La mayoría de exégetas de la Biblia,  aquellos que la interpretan, vinculan a   este impío del que habla Pablo con la bestia del  Apocalipsis, ambos imbuidos de poder por Satanás.   Y tal vez la bestia apocalíptica sea, al igual  que en el libro de Daniel, una metáfora amplia   para hacer referencia a un humano concreto. Porque  un dato curioso es que en el evangelio de Mateo,   capítulo 4, se narra que cuando Jesús se  encuentra en el desierto, es tentado por Satanás,   quien le ofrece todos los reinos del mundo y toda  su gloria a cambio de que lo adore a él. Jesús,   por supuesto, rechaza la tentación. 

Pero...  ¿y si el anticristo fuese una persona que,   al contrario que Cristo, aceptase la  oferta de Satanás? Eso explicaría por   qué Satanás le otorgaría el poder necesario  para controlar todos los reinos del mundo. Volviendo a las visiones de Daniel,  este asegura que, tras situarse como   líder mundial, el Anticristo “concertará  con muchos una firme alianza una semana;   y en media semana hará cesar el sacrificio  y la oblación –es decir, la ofrenda a Dios–,   y en el ala del Templo estará la abominación de  la desolación, hasta que la ruina decretada se   derrame sobre el desolador”. Sobre este versículo  –Daniel 9:27–, los exégetas suelen coincidir en   señalar que la palabra semana hace referencia  a un periodo de siete años, no de siete días,   si bien debaten acerca del significado de ese  pacto “con muchos”, que algunos interpretan   como un pacto con el pueblo de Israel y  otros lo consideran más amplio.
 También   hay debate acerca de si firma un pacto  nuevo o solo confirma uno ya existente. En cualquier caso, el anticristo, el dirigente de  una feroz bestia procedente del mar que simboliza   un gran Estado, acordará, ratificará o prometerá  mantener un periodo de paz durante siete años,   quizá solo en Oriente Medio o quizá en  todo el mundo, según se quiera interpretar. Ese momento de guerra en el que llega se  correspondería con la gran tribulación   mencionada en el Apocalipsis y profetizada también  por Jesucristo en Mateo, capítulo 24, versículo 15   y siguientes: “Cuando veáis, pues, la abominación  de la desolación anunciada por el profeta Daniel,   erigida en el Lugar Santo (el que lea, que  entienda), entonces, los que estén en Judea, huyan   a los montes; el que esté en el terrado, no baje a  recoger las cosas de su casa; y el que esté en el   campo, no regrese en busca de su manto. 

¡Ay de las  que estén encinta o criando en aquellos días! Orad   para que vuestra huida no suceda en invierno ni  en día de sábado. Porque habrá entonces una gran   tribulación, cual no la hubo desde el principio  del mundo hasta el presente ni volverá a haberla.   Y si aquellos días no se abreviasen, no se  salvaría nadie; pero en atención a los elegidos   se abreviarán aquellos días. Entonces, si alguno  os dice: 'Mirad, el Cristo está aquí o allí', no   le creáis. Porque surgirán falsos cristos y falsos  profetas, que harán grandes señales y prodigios,   capaces de engañar, si fuera posible, a los  mismos elegidos. ¡Mirad que os lo he predicho!”. 
El Anticristo en la época actual 
Pongamos por caso la actual situación  de Oriente Medio. Si apareciese ahora un   dirigente de un Estado poderoso que lograra  la firma de una paz duradera en la región,   sin duda sería acogido con alegría por la mayoría. Pero aún sucederá un nuevo evento destacado  que provocará la fascinación de las masas,   ya que en Apocalipsis, capítulo 13, versículo 3 y  siguientes podemos leer otra hipotética señal para   identificar al anticristo: “Una de sus cabezas  parecía herida de muerte, pero su llaga mortal   se le curó; entonces la tierra entera siguió  maravillada a la Bestia. Y se postraron ante   el Dragón –recordemos que el Dragón era Satanás–  porque había dado el poderío a la Bestia, y se   postraron ante la Bestia diciendo: '¿Quién como  la Bestia? ¿Y quién puede luchar contra ella?'.   Le fue dada una boca que profería grandezas  y blasfemias, y se le dio poder de actuar   durante 42 meses –es decir, tres años y medio–;  y ella abrió su boca para blasfemar contra Dios:   para blasfemar de su nombre y de su morada y de  los que moran en el cielo. Se le concedió hacer   la guerra a los santos y vencerlos; se le concedió  poderío sobre toda raza, pueblo, lengua y nación.   Y la adorarán todos los habitantes de  la tierra cuyo nombre no está inscrito,   desde la creación del mundo, en el libro  de la vida del Cordero degollado”. O dicho   con otras palabras, todos los que no sean  seguidores de Jesús, adorarán al anticristo. Pero no creáis que el anticristo actúa solo,  ayudado únicamente por el poder de Satanás.   En el capítulo 13 del Apocalipsis, tras  la aparición de la bestia surgida del mar,   podemos leer: “Vi luego otra Bestia que surgía  de la tierra y tenía dos cuernos como de cordero,   pero hablaba como una serpiente. Ejerce todo el  poder de la primera Bestia en servicio de esta,   haciendo que la tierra y sus habitantes adoren  a la primera bestia, cuya herida mortal ha sido   curada. Realiza grandes señales, hasta hacer  bajar ante la gente fuego del cielo a la tierra;   y seduce a los habitantes de la tierra con  las señales que le ha sido concedido obrar   al servicio de la Bestia, diciendo  a los habitantes de la tierra que   hagan una imagen en honor de la Bestia que,  teniendo la herida de la espada, revivió”. Según esto, la bestia surgida del mar –el  anticristo– colaborará con la bestia de la tierra,   el falso profeta, para lograr que el mundo se  someta a ellos. Y el falso profeta intentará   que todos tengan una marca en la frente o  en la mano derecha para poder controlarlos:   la marca de la bestia. Así se cuenta en  los versículos 15 a 18 de Apocalipsis 13,   retomando la descripción de las atribuciones  del falso profeta: “Se le concedió infundir   el aliento a la imagen de la Bestia, de  suerte que pudiera incluso hablar la imagen   de la Bestia y hacer que fueran exterminados  cuantos no adoraran la imagen de la Bestia.   Y hace que todos, pequeños y grandes, ricos y  pobres, libres y esclavos, se hagan una marca   en la mano derecha o en la frente, y que nadie  pueda comprar nada ni vender, sino el que lleve   la marca con el nombre de la Bestia o con la  cifra de su nombre. ¡Aquí está la sabiduría!   Que el inteligente calcule la cifra de la Bestia;  pues es la cifra de un hombre. Su cifra es 666”. Pero ¿realmente es el 666? En la mayoría  de manuscritos del Nuevo Testamento,   así como en las traducciones al español de la  Biblia, se dice que el número es ese, traducido a   partir de los tres números griegos que representan  el número 600, el 60 y el 6 (χξϛ). Sin embargo,   en el conocido como Papiro 115, el manuscrito  del Apocalipsis más antiguo que se conserva,   del siglo III, el número de la bestia está escrito  con los números griegos correspondientes a 600,   a 10 y a 6 (χιϛ), por lo que debería traducirse  como 616. Ese mismo número es el que aparece en   otras fuentes antiguas, como el Códice  Ephraemi Syri Rescriptus, del siglo V,   uno de los cuatro manuscritos  unciales de la Biblia Griega. Volviendo a los acontecimientos descritos en el  Apocalipsis, el anticristo llega, domina el mundo   con la ayuda de Satanás y el falso profeta, logra  que gran parte de la población lo adore y mata al   resto. Pero entonces... ¿Cómo es posible que sea  derrotado? ¿Por qué su reinado solo dura tres años   y medio? ¿Quién es capaz de enfrentarse a él y  salir victorioso? Pues sí, lo habrán  adivinado:   Jesucristo, en su segunda venida. Según se  narra en el Apocalipsis, aparecerá a lomos de   un caballo blanco. En el capítulo 19, a partir  del versículo 11, Juan hace una descripción de   Jesús muy distinta a la imagen habitual que  se tiene de él, con las siguientes palabras:   “Luego vi el cielo abierto y apareció un caballo  blanco. Su jinete se llama Fiel y Verdadero. Con   justicia dicta sentencia y hace la guerra. Sus  ojos resplandecen como llamas de fuego y muchas   diademas ciñen su cabeza. Lleva escrito un nombre  que nadie conoce sino solo él. Está vestido de un   manto teñido en sangre y su nombre es “el Verbo  de Dios”. Lo siguen los ejércitos del cielo,   montados en caballos blancos y vestidos de tela  de lino fino, blanco y limpio. De su boca sale una   espada afilada, con la que herirá a las naciones.  'Las gobernará con cetro de hierro'. Él mismo   exprime uvas en el lagar para sacar el vino del  furor del castigo que viene de Dios Todopoderoso.   En su manto y sobre el muslo lleva escrito este  nombre: rey de reyes y señor de señores. Vi a un   ángel que, parado sobre el sol, gritaba a todas  las aves que vuelan en medio del cielo: 'Vengan,   reúnanse para la gran cena de Dios, para que coman  carne de reyes, de jefes militares y de magnates;   carnes de caballos y de sus jinetes; carne  de toda clase de gente, libres y esclavos,   grandes y pequeños'. Entonces vi a la Bestia  y a los reyes de la tierra con sus ejércitos,   reunidos para hacer guerra contra el jinete de  aquel caballo y contra su ejército. Pero la Bestia   fue capturada junto con el falso profeta. Este es  el que hacía señales en presencia de ella, con las   cuales engañaba a los que habían recibido la marca  de la Bestia y adoraban su imagen. Los dos fueron   arrojados vivos al lago de fuego y azufre. Los  demás fueron muertos por medio de la espada que   salía de la boca del que montaba a caballo. Todas  las aves se saciaron devorando la carne de ellos”. Y ya está, ese es el destino final del anticristo,  según la Biblia. Acaba para siempre atormentado en   el lago de fuego y azufre, junto al falso profeta  y Satanás, aunque este se liberará transcurridos   mil años solo para volver a ser derrotado y ser  arrojado nuevamente al lago de fuego y azufre,   donde los tres seres malvados serán atormentados  día y noche por los siglos de los siglos. Ahora, el detalle acerca del Templo de Jerusalén  que os prometimos comentar. Si os habrán  fijado,   en la cita de Mateo 24:15 y siguientes, Jesús  decía: “Cuando veáis, pues, la abominación   de la desolación anunciada por el profeta  Daniel, erigida en el Lugar Santo (el que lea,   que entienda)...”. Y es que en Daniel 9:27  se vaticinaba: “(...) Y en el ala del Templo   estará la abominación de la desolación”.  Además, en Daniel 11:31, podemos leer:   “De su parte surgirán fuerzas armadas, profanarán  el santuario-ciudadela, abolirán el sacrificio   perpetuo y pondrán allí la abominación de la  desolación”. Esto sucedería a mitad del periodo   del pacto de siete años que el anticristo había  acordado, lo que coincide con su reinado de tres   años y medio, que empezarían a partir de ese  momento, el momento en que sean abolidos los   sacrificios y ofrendas en el Templo y se erija en  el Lugar Santo la abominación de la desolación. La abominación de la desolación... ¿Qué quiere  decir? Tal vez se refiera al anticristo en sí   mismo o tal vez esté haciendo referencia a  algún acto contra Dios, algo tremendamente   blasfemo. Podría tener relación con este otro  pasaje que podemos leer en el capítulo 2 de   la Segunda Epístola a los Tesalonicenses:  “(...) Por lo que respecta a la Venida de   nuestro Señor Jesucristo y a nuestra reunión  con él, os rogamos, hermanos, que no os dejéis   alterar tan fácilmente en vuestro ánimo, ni os  alarméis por alguna manifestación del Espíritu,   por algunas palabras o por alguna carta  presentada como nuestra, que os haga suponer   que está inminente el Día del Señor. Que nadie  os engañe de ninguna manera. Primero tiene que   venir la apostasía y manifestarse el Hombre  impío, el Hijo de perdición, el Adversario   que se eleva sobre todo lo que lleva el nombre  de Dios o es objeto de culto, hasta el extremo   de sentarse él mismo en el Santuario de Dios  y proclamar que él mismo es Dios”. Entonces...   ¿Será esa la gran blasfemia, la abominación?  ¿El anticristo proclamará que él es Dios? ¿Y cuál es el Lugar Santo? Casi todos los  eruditos consideran que los textos bíblicos   hablan del Templo de Jerusalén, y el Lugar Santo  podría hacer referencia en concreto a una zona del   primer templo, el conocido como Templo de Salomón  –aquel que fue destruido por Nabucodonosor II–,   que estaría anexa al Lugar Santísimo, la cámara  donde según la tradición se guardaba el Arca   de la Alianza, a la que ya dedicamos un vídeo  completo. En realidad, se desconoce cuál era la   estructura del Templo de Salomón, pero es posible  que se inspirara en el Tabernáculo de Moisés,   el templo móvil construido por los israelitas  en el que Yahveh conversaba con Moisés a   salvo de oídos o miradas indiscretas. Y  como la Biblia, en el Libro del Éxodo,   explica que el tabernáculo se dividía  entre el Lugar Santo y el Lugar Santísimo,   muchos defienden que el Templo de Jerusalén  también pudo contar con espacios similares. Para aquellos que crean que las profecías  apocalípticas de la Biblia son ciertas y   todos estos sucesos están por venir, la buena  noticia es que el Templo de Jerusalén ya no   existe. Por tanto, sería imposible hoy por hoy que  el Anticristo hiciera ninguna abominación en él.   Además, aunque se desconoce la ubicación exacta  del Templo de Salomón, el primer templo de   Jerusalén, se cree que pudo estar situado en el  mismo lugar en el que se levantó el segundo, el   que fue destruido por los romanos. Es decir, en el  actual Monte del Templo, un lugar también conocido   como la Explanada de las Mezquitas, donde se alzan  actualmente la Cúpula de la Roca, la Cúpula de   la Cadena y la Mezquita de al-Aqsa. Por tanto, si  los judíos pretendieran volver a construir hoy el   Templo de Jerusalén se generaría un gran conflicto  con los países musulmanes vecinos. No obstante...   como mencionábamos antes, en el judaísmo se cree  que el Tercer Templo será restaurado en el futuro,   en la época de la llegada del Mesías, y  la reconstrucción del Templo de Jerusalén   es un viejo anhelo que los judíos nunca han  abandonado. A pesar de que el gobierno de   Israel no participa en nada que tenga que ver con  la construcción de un Tercer Templo –precisamente   para evitar disputas–, sí hay diversas  organizaciones privadas no gubernamentales,   como el Instituto del Templo, que trabajan en  la preparación de un proyecto de reconstrucción. Resultaría paradójico que las creencias de  judíos y cristianos se conectaran de ese modo:   que los judíos reconstruyeran el Templo de  Jerusalén y, como creen los cristianos, el   anticristo tomara posesión de él para que, después  de tres años y medio, llegara el Mesías tal y como   ambas religiones creen –la segunda venida en el  caso cristiano o la primera, en el caso judío–.   ¿Y los musulmanes? ¿Qué opinan ellos del  anticristo? En el islam, el nombre de Jesús   es Isa, y lo consideran uno de los profetas  y mensajeros de Dios; es el Mesías enviado   para guiar al pueblo de Israel con una nueva  escritura, el Evangelio. También creen que nació   de Maryam –María– como resultado de una concepción  virginal, pero, a diferencia de los cristianos,   los musulmanes no consideran que Isa fuera  hijo de Dios, ni la encarnación de este. Y   tampoco creen que fuera crucificado, que expiara  los pecados de la humanidad ni que resucitara.   En la sura 4 del Corán, en concreto en  las aleyas 157 y 158, se menciona que,   en realidad, Isa no murió, sino que Dios lo  elevó hacia Él de manera corpórea, estando vivo. Eso sí, los musulmanes coinciden  con los cristianos acerca de que,   cuando esté próximo el Juicio  Final, Isa regresará a la Tierra   para restablecer la justicia y derrotar  a Al-Masih ad-Dajjal, el falso mesías,   una figura análoga al Anticristo. ¿Y qué nos  cuenta el Corán sobre Al-Masih ad-Dajjal?   En realidad, nada: no aparece mencionado en sus  páginas. Donde sí se le menciona y describe es   en los hadices, los libros de tradiciones  y relatos de la vida del profeta Mahoma. Se trata de una figura maligna que aparecerá  antes del Día del Juicio fingiendo ser el   Mesías prometido. Será capaz de hacer milagros  y su llegada será anunciada por diversos signos,   como, por ejemplo, que la gente dejará de  ofrecer oraciones, que la mentira se convertirá   en una virtud, que los gobernantes serán  corruptos, que mucha gente adorará a Satanás,   que no habrá respeto por las personas de edad  avanzada o que los imbéciles gobernarán sobre   los sabios. Al-Masih ad-Dajjal aparecerá en algún  lugar entre Irán e Irak, y viajará por el mundo   predicando su falsedad, pero no será capaz de  poner un pie en La Meca ni en Medina. Reunirá un   ejército con el que combatirá contra Isa –Jesús–,  el cual regresará a la Tierra para ponerse al   frente de un ejército de los justos. Según la  tradición suní, será Isa quien acabe con su vida   de una lanzada en el pecho; según la tradición  chiíta, Al-Masih ad-Dajjal reinará durante   cuarenta días hasta que el Mahdi, un descendiente  de Mahoma, lo mate con la ayuda de Isa. No es de extrañar que la figura del anticristo,  con su identidad misteriosa y malvada y toda la   amalgama de interpretaciones que se han  formulado y se pueden seguir elucubrando   en el futuro acerca de ella, haya dado pie  a tantas obras de ficción. ¿Descubriremos   alguna vez si realmente existe? Por la  cuenta que nos trae, esperemos que no... ¿Y vosotros? ¿Qué opináis de la figura  del anticristo? ¿Creéis que ya camina   entre nosotros? 

¿Es la Masonería el Anticristo?
Tal vez muchos esperan al Anticristo como una persona , pero no como una organización o institución; pero qué tal si el Anticristo es una Organización , tal como lo es la Masonería .  Con esto no estoy afirmando que la Masonería sea el Anticristo , pero tampoco que no lo sea, simplemente lo pongo a consideración para que ustedes lo analicen. Es difícil o casi imposible, o mejor dicho imposible  que un No Masón entienda de que va lo Masónico; desde fuera es imposible entender lo que hay dentro de las Logias Masónicas , incluso masones con 10 o 15 años en logias , habiendo obtenido altos grados llegando incluso al grado 32º o 33º  les es claro de lo que trata la Francmasonería; la mayoría de las veces esto se debe a que hermanos masones simplemente no trabajaron los grados masónicos , no los ponderaron ni los meditaron , y simplemente se dieron por acumular grados y más grados en una carrera sin sentido para llegar a una meta que se auto fijaron. Todos los grados no funcionaran si no se trabajó bien y a consciencia el primer grado Masónico, el grado de aprendiz de masón, así opera la mecánica masónica .
Pero volviendo al punto   ¿Es la Masonería el Anticristo? , bien yo dude en poner como títulos alternos, estos: ¿Es la Masonería Anticristiana? ¿Es la Masonería cosa del Demonio? ¿La Masonería intenta destruir al Cristianismo?  .
Lo que yo piense al respecto no importa por ahora , ya que en última instancia este es un llamado a que usted sea masón o no lo sea investigue por su propia cuenta y saque sus conclusiones .
Pero vamos desde el principio , lo consideren o no así, todo el andamiaje de la Masonería se basa en tres Liturgias o libros de la ritualística masónica que son , lo básico sobre los tres grados masónicos , el de aprendiz de masón, el de compañero y el del sublime grado de Maestro Masón, en estos 3 grados nunca se habla contra Cristo , ni contra religión alguna , solo señala los peligros que implicaría ser un fanático religioso , o fanático   político , o bien fanático de cualquier cosa. ( En la página 579  del tomo 5 del Diccionario Enciclopédico de la Masonería . Editorial del Valle de México ,1977 ) habla del fanatismo político .
En Los grados filosóficos , la figura de Jesucristo es relevante sobre todo en el Grado 18º Masónico.
Pero vayamos, más a lo se vive en Logias Masónicas al día a día, yo  me inicie masón hace 30 años , tengo 23 años moderado y presidiendo foros masónicos por la internet , al principio eran pequeños foros en MSN allá en el año 1998 . Y en logias masónicas mexicanas el clima es y siempre ha sido anticlerical , y en instantes hasta anticristiano, el ambiente en logias masónicas mexicanas es muy antirreligioso al extremo . Pero igual existen masones muy religiosos , recuerdo a un hermano de mi Logia , de que de la Logia se iba a la Iglesia ( y se pasaba toda la noche velando al Santísimo) y en ocasiones saliendo de la misa católica se iba a las tenidas masónicas, después  pidió su carta de quite de mi madre logia , para integrarse a una Logia Masónica de Policías , porque el es policía , en realidad es un muy buen masón .
En cuanto a mi , yo fui un niño al que llevaban a Misa los domingos mi mamá , mi tía y me abuela ; me parecía maravillosa la Religión Católica , pero yo quería saber más allá de lo que simplemente me decía la Religión Católica.  Cuando ingrese a la Masonería , se me ampliaron los horizontes , y curiosamente comprendí dentro de la Masonería de forma más clara al Cristianismo, comprendí porque Jesucristo se enfrentó al Clero de su Época y que por ello se ganó el odio del Clero , a tal punto que lo asesinaron . Cristo era el prototipo del buen masón anticlerical ; de hecho Cristo en los evangelios es llamado el Carpintero , pero la palabra carpintero está mal traducida , la palabra correcta es Tekton albañil en Griego , o sea cristo era un albañil y no un carpintero , como en castellano se menciona, esto es era un masón cantero.
Ahora si se analiza lo masónico en el plano político, la Masonería tuvo, tiene y tendrá siempre una marcada influencia en la Política Mundial, es más de aquí a unos 1000 años en el futuro , considerarán a esta época como el imperio masónico. Pero no sé si por fortuna o por desgracia , lo político masónico ha salido de las Logias , para instalarse fuera de las Logias Masónicas. En un diagnostico que se pudiera dar sobre si la Masonería es el Anticristo o no , bien pudiéramos considerar que esa no fue ni es la intención de la Masonería, sino que en el devenir de lo masónico esto su fue dando así , ya que la masonería se basa en el análisis lógico , en el raciocinio y esto choca con lo religioso en muchas ocasiones.
Vamos a poner un ejemplo de esto, en el Cristianismo se considera que ciertas enfermedades mentales con producto de una posesión demoniaca,   pero , hoy gracias a la ciencia en su análisis lógico y razonado sabemos que estas enfermedades mentales no son producto del demonio , sino son enfermedades explicables mediante el método científico , como de origen físico o  fisiológico, a veces cosas tan simples como algo hormonal o endocrino  , y que se pueden tratar con medicamentos y terapias, a esto del avance en las ciencias tuvo mucho que ver la masonería  . Y así , como este ejemplo podemos ver muchos más .
Pero vamos a otro punto, la Masonería es Científica a la Vez que Esotérica e investigadora del ocultismo , y sí   , mientras la Masonería impulsaba a la Ciencia  a través de los masones que conformaban   La Real Sociedad de Londres para el Avance de la Ciencia Natural —mundialmente conocida por su nombre en inglés, la Royal Society— es una de las sociedades científicas más antiguas de Europa. En su caso, se sabe que al menos cinco de sus doce miembros fundadores fueron masones, entre ellos su primer presidente fundador , el matemático el masón William Brouncker.   Otros muchos masones investigaban el Ocultismo y el Hermetismo , o lo que la ciencia moderna no puede explicar.  La Masonería afortunadamente  siempre fue rebelde , y no se ciñó exclusivamente ni a las Ciencias Modernas , ni a las Ciencias Ocultas o esoterismo.
Podemos ver por toda la Red de internet páginas web señalando que los masones somos diabólicos, estas páginas son de fanáticos religiosos , que supongo hacen dinero asustando a las personas , y también hay muchos videos YouTube con la misma temática antimasónica. Muchos de estos fanáticos religiosos , no dudarían en señalar que de la Masonería saldrá el Anticristo .
He leído que algunos antimasones , relacionan al 666 con lo masónico , usando una serie de códigos , muy complicados , pero para ellos certeros. Lo mismo en el Código de la Biblia aparece el nombre francmasonería cruzado con el nombre del demonio Belial.
En el Islam al Anticristo se le llama Dajjal y curiosamente el Anticristo en el islam  solo tiene un solo ojo ,  esto lo podrían relacionar con el ojo dentro del triangulo , símbolo muy utilizado en Masonería.
Vayamos al contexto del Antiguo Egipto .
La alegórica resurrección del Masón en el tercer grado (Grado de Maestro Masón), procede directamente de los misterios del antiguo  Egipto. En la imagen que mostramos fue tomada de una antigua tumba en Egipto que muestra que el culto de la Masonería existía en el culto de Isis, en la imagen vemos que la garra del León toma la mano de Osiris para devolverlo a la vida eterna .
Se dice que estos juramentos  masónicos son idénticos a aquellos que se realizan en el Antiguo Egipto . Una vez se realiza este juramento, la persona debe acordar pronunciar estos juramentos solemnes , cosas  que para muchos cristianos , todas estas ideas de juramentos y rituales  serian cosa del anticristo .
Alcoseri   


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De: Kadyr Envoyé: 08/06/2025 22:44

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De: Kadyr Envoyé: 08/06/2025 22:47


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De: Kadyr Envoyé: 08/06/2025 22:54


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De: Kadyr Envoyé: 08/06/2025 22:55


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De: Kadyr Envoyé: 08/06/2025 22:57



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