Estamos conectados con el mundo y todas las personas, el otro y vos son lo mismo, porque somos como un espejo y nos refleja una versión de nosotros mismos.

Avanzamos cuando nos damos cuenta de esta conexión, cada relación nos eleva espiritualmente para reconocer que somos una unidad, todas las relaciones son experiencias tanto las amorosas o las que rechazamos.

Generalmente, rechazamos en el otro lo que no aceptamos en nosotros, si despiertas a esta realidad de ti mismo, no te molestaría. Al reconocer que nos vemos en el otro nuestra consciencia evoluciona.

Y cualquier característica hermosa que te atrae de la otra persona, está también en ti. 

Cuando negamos esas formas oscuras de nosotros mismo, sin saber que proyectamos esa negatividad atrayendo más personas con bajos valores. Si te das cuenta que el Universo te muestra tus defectos, entonces lo tomas como un aprendizaje, para poder corregir nuestra conducta ante los demás y empezamos a atraer personas con elevado desarrollo espiritual y social.

Hay que aceptar todo nuestra luz y oscuridad, para sanarnos y sanar las relaciones humanas. Entonces al aceptarnos como somos podemos conectarnos al Universo, para eso tenemos que estar en paz con nuestro propio ser que es tan ambiguo.

El poder está en nosotros porque vivimos en un mundo con polaridad negativa y positiva, por eso debemos conocernos a nosotros mismos y el espejo del otro nos marca el camino para mejorar todo nuestro entorno.

Generalmente ni nos damos cuenta que somos arrogantes, impetuosos, fastidiosos o cualquier característica negativa que molesta a otros, ser humildes y preguntar porque enojamos al otro y porque nos enojamos con el otro. Te sorprenderás lo similar que eres con esa persona. Y si no lo reconocemos seguimos año tras año atrayendo a las mismas personas con diferentes caras. Así que empieza a anotar todo lo que te molesta del otro, para no perder más tiempo repitiendo situaciones tristes.

Muchas veces queremos cambiar al otro, lo vemos dentro de nuestra propia experiencia y no desde sus experiencias, porque la otra persona vive esa situación y es de él, es una arrogancia creer podemos arreglar la vida del otro, esto genera dependencia uno del otro.

A veces es mejor callar y dejar que fluya es más constructivo escuchar con calma sin emitir juicios y porque también refleja que no nos escuchamos a nosotros mismos.

Tal vez dar consejos y preocuparte por los demás impidió darte mejor vida, preguntarse si fui feliz al dar un consejo que tal vez no fue tomado en cuenta por el otro.

Ayudar puede ser una necesidad de sentirse mejor y tener el control sobre el otro y no asumir nuestra propia vida, puede reflejar querer que las personas actúen de una manera que pueda controlar, eso nos da seguridad, porque algo de nuestro pasado no pudimos controlar y ahora controlo a los demás para que no me hieran.

Por lo tanto, conocernos a nosotros mismos es una tarea para sanar heridas y ser felices, cambiando desde mi interior , cambio el exterior.

Aprender es un desafío diario debemos recordar que somos una unidad de amor, que simplemente existe y esta en todas partes, y en todo momento. Debemos ser concientes de como reaccionamos ante las espejos que nos muestra la vida.

Si ignoramos a nuestro espejo reaccionamos pensando que somos victimas y no necesitamos sanar dejamos a nuestro Ego actuar pero si reaccionamos desde el corazón podemos resolver y sanar conflictos de nuestras vidas con amor. Más ignoras más atraes. Cada espejo es una gran oportunidad de Amor para sanar todo lo viejo que nos impide despertar en el ahora presente.

El objetivo es ver la DIVINIDAD en las personas y que todos son una chisma de Díos, eso nos mantiene conectados en Unidad Eterna para florecer en la vida y amar todo lo que existe, ser libre para nuestra victoria. Todos somos uno y cada uno es tú otro yo.

MANTENERSE ATENTO ES ESTAR DESPIERTO A LA REALIDAD.

NADA ES CASUAL TODO ES CAUSALIDAD.

Con amor, Rosara.