Salomón es el segundo hijo que David tuvo con Betsabé, la que fue mujer de Urías. Este Salomón fue amado por IEUE, a diferencia del primer hijo que ella le dio a luz a David, porque Dios hiriéndolo murió. (2 Sm. 12:15-24).

   David rey de Israel, en las últimas palabras de agradecimiento a su Dios IEUE, él antes de culminar su reinado de 40 años y de morir dijo: “Da a mi hijo Salomón corazón perfecto, para que guarde tus mandamientos, tus testimonios y tus estatutos, y para que haga todas las cosas, y te edifique la casa para la cual yo te hecho preparativos (1 Cr. 29:19):”.

   Como vemos en esa pequeña fracción escritural, ya David rey de Israel, estaba prácticamente en su último momento, y su deseo más ferviente era que su Hijo Salomón tuviera corazón perfecto, para guardar los mandamientos y estatutos de IEUE Dios, así como sus testimonios e hiciera todas las cosas, y edificara el Santuario del Eterno.

   Más adelante se señala que después del pueblo israelí haber celebrado con comida y bebida delante de IEUE) Dios, dieron por dos ocasiones la investidura del reino a Salomón, hijo de David, y de hecho con la avenía del mismo Dios, le ungieron por príncipe, y a Sadoc por sacerdote (1 Cr. 29:21-22). De esta manera Salomón asumió el reinado de Israel, sentándose en el estrado israelí, en lugar de su padre biológico David.

Salomón en tanto fue prosperado y le obedeció todo Israel, al extremo de que los príncipes y poderosos, y todos los hijos del rey David, prestaron homenaje al rey Salomón, y que inclusive IEUE lo engrandeció enormemente a los ojos de todo Israel, y le dio gloria en su reino, cual ningún rey la tuvo antes de él en Israel (1 Cr. 29:23-25).

   Con esas premisas que sirven de comienzo a la historia de Salomón, lo importante de ello era que debía tener un corazón perfecto, para guardar los mandamientos de IEUE Dios, y sus testimonios y estatutos, e hiciera todas las cosas, y edificara el Santuario del Eterno. De modo que con Salomón en principio así fue, convocó una Asamblea que se celebró en un lugar alto de Gabaón, porque allí estaba el tabernáculo de reunión de Dios, que Moisés le hizo hacer en el desierto. Para la Asamblea todo el pueblo de Israel fue convocado, y de entre los cuales jefes de millares y de centenas, jueces, príncipes y jefes de familia. El propósito de Salomón con esa Asamblea, era consultar a IEUE Dios, quien de noche se le apareció y le dijo: “pídeme lo que quieres que yo te dé”. Entonces Salomón en base a ciertas palabras que le había expresado, pidió le diera desde el mismo momento sabiduría y ciencia para presentarse delante Israel; y así por lo grande que era su pueblo, poder gobernarlo. Este pedimento del reciente monarca e hijo de David, fue muy bien acogido por Dios, ya que en respuesta afirmativa se lo concedió con beneplácito, porque vio que en su corazón no propuso para requerir riquezas, bienes o gloria, ni la vida de los que le querían mal, ni pidió muchos días, sino más bien para gobernar a su pueblo, que sobre lo había puesto IEUE Dios como rey, pidió sabiduría y ciencia. Pero Dios de su generosidad, no sólo le concedió sabiduría y ciencia, sino que además de la fortuna dejada por David, le dio riquezas, bienes y gloria, como nunca tuvieron los reyes que fueron antes de Salomón, ni tendrían los que vendrían después de él.

La gestión de Salomón como rey de Israel, a comienzos de su reinado fue muy excelente, se destacó sobre las siguientes áreas:

1)  Área Militar: Juntó carros y gentes de acaballo (1400 carros y 12000 jinetes) que puso en las ciudades.

2)  Economía: Acumuló oro y plata en Jerusalén como piedras. También cedros como cabrahígos de la Sefela en abundancia. Y los mercaderes del rey compraban por contrato caballos y lienzos finos en Egipto para Salomón. Y subían y compraban en Egipto un carro por seiscientas piezas de plata, y un caballo por 150, así compraban por medio de ellos todos los reyes de los heteos, y para los reyes de Siria.

3)  Construcción. Edificación del Templo de Dios en el Monte Moriah, con el trabajo de 153.600 extranjeros residentes en Israel, divididos así: 70.000 para llevar cargas; 80000 canteros en las montañas, y 3000 seiscientos por capataces para hacer trabajar al pueblo. La construcción estaba a cargo de Hiram-abi, quien según lo suplicado por Salomón a IEUE Dios, le fue encomendado por el Rey de Tiro, para trabajar en oro, plata, bronce y hierro, en piedra y en madera, en purpura y en azul, en lino y en carmesí; asimismo para esculpir toda clase de figuras, y sacar toda forma de diseño que se le pidiese, con la ayuda de hombres peritos de Salomón, y con los de su señor David.

   Acabada la construcción del templo, Salomón introdujo las cosas que David su padre había dedicado; y puso la plata, y el oro, y todos los utensilios, en los tesoros de la Casa de Dios. También hizo que a esta, todos los príncipes de las tribus, los jefes de las familias de los hijos de Israel, trajesen el arca del pacto de IEUE de la ciudad de David, que es Sión.

   Fueron tiempos bastante emotivos y de grandeza para el pueblo de Israel, ya que levitas con instrumentos musicales alababan y daban gracias a IEUE diciendo: “Porque Él es bueno, porque su misericordia es para siempre”. Al tiempo que la casa de IEUE se llenó de humo, y por tanto los sacerdotes no podían estar allí, ni ministrar, por causa de la nube; porque la gloria de IEUE había llenado toda la casa.

   Salomón entre tanto ello ocurría, y una vez de haber vuelto su rostro, bendijo a toda la congregación de Israel, dio su discurso estando todos de pies, y de entre su oración de rodilla estando en el atrio del Templo, dijo algo bastante significante por la importancia que revisten las siguientes palabras: “Ahora pues IEUE Dios de Israel, no hay Dios semejante a ti en el cielo ni en la tierra, que guardas el pacto y la misericordia con tus ciervos que caminan delante de ti de todo corazón”. Ahora, pues IEUE Dios de Israel, cumple a tu siervo David mi padre lo que le has prometido, diciendo: “No faltará de ti varón delante de mí, que se siente en el trono de Israel, con tal que tus hijos guarden su camino, andando en mi ley, como tú has andado delante de mí”. En resumen descriptivo a otras cosas importantes que dijo Salomón fueron (1 Cr. 6:25-42):

-  Tú oirás desde los cielos y perdonarás el pecado de tu pueblo Israel, y le harás volver a la tierra que diste a ellos y a sus padres.

-  Si los cielos se cerrasen y no hubiere lluvias, por haber pecado contra ti, si oraren a ti hacia este lugar, y confesaren tu Nombre, y se convirtieren de sus pecados, cuando los afligieres, tú los oirás en los cielos, y perdonarás el pecado de tus siervos y de tu pueblo Israel, y les enseñarás el buen camino para que anden en él, y darás lluvia sobre tu tierra, que diste por heredad a tu pueblo.

-  Tu oirás desde los cielos, desde el lugar de tu morada, y perdonarás, y darás a cada uno conforme a sus caminos, habiendo conocido su corazón; porque sólo tú conoces el corazón de los hijos de los hombres; para que te teman y anden en tus caminos, todos los días que vivieren sobre la faz de la tierra que tú diste a nuestros padres.

-  Y también al extranjero que no fuere de tu pueblo Israel, que hubiere venido de lejanas tierras a causa de tu Gran Nombre y de tu poderosa mano, y de tu brazo extendido, si viniere y orare sobre esta casa, tú oirás desde los cielos, desde el lugar de tu morada, y harás conforme  a todas las cosas por las cuales hubiere clamado a ti el extranjero; para que todos los pueblos de la tierra conozcan tu NOMBRE, y te teman así como pueblo Israel, y sepan que tu NOMBRE es invocado sobre esta casa que yo te he edificado.

- En cuanto al pueblo de Israel: “Si pecaren contra ti (pues no hay hombre que no peque ), y te enojares contra ellos, y los entregares delante de sus enemigos para que quienes lo tomaren los llevaren cautivos a tierra de su enemigos, lejos o cerca, y ellos volvieren en sí en la tierra donde fueran llevados cautivos; si se convirtieren, y oraren a ti en la tierra de su cautividad, y dijeren: “Pecamos, hemos hecho inicuamente, impíamente hemos hecho”; si se convirtieren a ti de todo corazón y de toda su alma en la tierra de su cautividad, donde los hubiesen llevado cautivos, y oraren hacia la tierra que tú distes a sus padres , hacia la ciudad que tu elegiste, hacia la casa que he edificado a tu NOMBRE, tú oirás desde los cielos, desde el lugar de tu morada, su oración y su ruego, y ampararás su causa y perdonarás a tu pueblo  que pecó contra ti.

-  Ahora, pues, oh Dios mío, te ruego que estén abiertos tus ojos  y atentos tus oídos  a la oración en este lugar.

-  Oh IEUE Dios, levántate ahora para habitar en tu reposo, tú y el arca de tu poder; oh IEUE Dios, sean vestidos de salvación tus sacerdotes, y tus santos se regocijen en tu bondad.

-  IEUE Dios, no rechaces a tu ungido; acuérdate de tus misericordias para con David tu siervo.

   Salomón entonces al culminar su oración, descendió fuego del cielo y consumió el holocausto y las victimas; y la gloria de IEUE llenó la casa, de modo que los sacerdotes no podían entrar en la casa de IEUE, porque la gloria de IEUE la llenó toda. Este día tan impactante ante los ojos impresionados de todos los presentes, el pueblo de Israel por el fuego venido del cielo y por esta gloria sobre manera abundante, se postraron sobre sus rostros en el pavimento y adoraron, y alabaron a IEUE, diciendo: “Porque Él es bueno, y su misericordia es para siempre” (2 Cr. 7:1-3). 

   En ese día maravilloso de la inauguración del templo de Dios y tan impacte por la demostración del poder Divino, se sacrificaron en ofrecimiento a IEUE, 22.000 bueyes y 120.000 ovejas; y así el rey Salomón y todo el pueblo dedicaron la casa de IEUE (2 Cr. 7:4-5). Durante siete días consecutivos estuvo el pueblo en fiesta, y aunque el día 23 del mes séptimo todos se tornaron a sus hogares alegres y gozosos de corazón por los beneficios que IEUE había hecho a David y a Salomón, y a su pueblo Israel, Dios de noche se le aparece a Salomón por segunda vez, y le dice:

“Yo he oído tu oración, y he elegido para mí este lugar por casa de sacrificio. Si yo cerrare los cielos para que no haya lluvia. Y si mandare a la langosta que consuma la tierra, o si enviare pestilencia a mi pueblo; sí se humillare mi pueblo, sobre el cual mi nombre es invocado, y oraren, y buscaren mi rostro y se convirtieren de sus malos caminos, entonces yo oiré desde los cielos, y perdonaré sus pecados, y sanaré su tierra. Ahora estarán abiertos mis ojos y atentos mis oídos a la oración en este lugar; porque ahora he elegido y santificado esta casa, para que esté en ella mi nombre para siempre; y mis ojos y mi corazón estarán ahí para siempre. Y si tú anduvieres delante de mí como anduvo David tu padre e hicieras todas las cosas que yo te he mandado, y guardares mis estatutos y mis decretos, yo he confirmaré el trono de tu reino, como pacté con David tu Padre, diciendo: No te faltará varón que gobierne en Israel. Más si vosotros os volviereis, y dejareis mis estatutos y mandamientos que he puesto delante de vosotros, y fuereis y serviréis a dioses ajenos, y los adorareis, yo os arrancaré de mi tierra que os he dado; y esta casa que he santificado a mi nombre, yo la arrojaré de mi presencia, y la pondré por burla y escarnio de todos los pueblos. Y esta casa que es tan excelsa, será espanto a todo el que se pasare, y dirá: ¿Por qué ha hecho así IEUE a esta tierra y a esta casa? Y se responderá: Por cuanto dejaron a IEUE Dios de sus padres, que los sacó de la tierra de Egipto, ya ha abrazado a dioses ajenos y los adoraron y sirvieron; por eso él ha traído todo este mal sobre ellos (1 R. 7:12-22)”.

Otras construcciones de Salomón (2 Cr. 8:1-7,11):

   A veinte años de Salomón edificar la casa de IEUE, y su propia vivienda, hizo las siguientes reedificaciones y edificaciones:

-  Reedificación de las ciudades que Hiram le había dado.

-  La toma de Hamat de Soba.

-  Tadmor en el desierto y todas las ciudades de aprovisionamiento que edificó en Hamat

-  Reedificó a Bet-Horón la de arriba y a Bet Horón la de abajo, ciudades fortificadas con muros, puestas y barras.

-  Balaat, y a todas las ciudades de provisiones que Salomón tenía; también todas la ciudades de los carros y las de la gente a caballo, y todo lo que Salomón quiso edificar en Jerusalén, en el Líbano y en toda la tierra de su dominio. Y a todo el pueblo que había quedado de los heteos, amorreos, ferezeos, heveos y jebuseos que no eran de Israel. Aún Salomón pasó a la hija de Faraón de la ciudad de David a la casa que él había edificado para ella; ya que dijo: Mi mujer no morará en la casa de David rey de Israel, porque aquellas habitaciones donde ha estado el arca de IEUE, son sagradas.

La Fama, Sabiduría de Salomón y la reina de Sabá (1 R. 10:1-13; 2 Cr. 9:1-12):

   Por la Sabiduría que IEUE) Dios le dio a Salomón era un hombre sabio tanto que la Reina del Sur lo visitó, y quedó impresionada. Con lo que Salomón sabía le pudo contestar preguntas difíciles, y como rey justo y dado a la majestuosidad, todo estaba tan bello y ordenado, que la reina de Sabá, viendo la casa que él había edificado, y las viandas de su mesa, las habitaciones de sus oficiales el estado de sus criados y los vestidos de ellos, sus maestresalas y sus vestidos, y la escalinata por donde el rey subía a la casa de IEUE, se quedó asombrada. Con lo cual se convenció de todo cuanto escuchó de él, de boca de los habitantes de su tierra. Esto que no creía, era tan sólo la mitad de la gran sabiduría que había visto de Salomón, percibiendo por tanto que superaba la fama que de él había oído. La reina del Sabá entonces a Salomón dijo:

“Bien aventurados tus hombres, y dichosos estos siervos tuyos que están siempre delante de ti, y oyen tu sabiduría. Bendito sea IEUE tu Dios, el cual se ha agradado para ponerte sobre su trono como rey para IEUE tu Dios; por cuanto tu Dios amó a Israel para afirmarlo perpetuamente, por eso te ha puesto por rey sobre ellos, para que hagas juicio y justicia.”

   La reina en su gratitud dio a Salomón veinte (20) talentos de oro, y gran cantidad de especias aromáticas, y piedras preciosas. A esto se sumó el oro de Ofir, la madera de sándalo y las piedras preciosas que siervos de Hiram y siervos de Salomón habían traído. El favor de Salomón hacia la reina de Sabá, no se hizo esperar, porque Salomón le dio todo cuanto quiso y le pidió; e inclusive más de lo que ella a él le había dado; y así después la reina del Sabá se fue a su tierra con sus siervos.

Riquezas de Salomón (1 R. 10:14-29; y 2 Cr.9:13-28):

-  Peso de oro a él traído de año en año, era de seiscientos sesenta y seis (666) talentos.

-  Oro traído a Salomón por mercaderes, negociantes y reyes de Arabia, y gobernadores de la tierra traían plata además de oro.

-  Doscientos (200) paveses de oro batido, cada uno de los cuales tenía seiscientos (600) siclos de oro labrado.

-  Un gran trono de marfil, y lo cubrió de oro puro. El trono tenía seis (6) gradas, y un estrado de oro fijado al trono, y bazos a uno y otro lado de asiento y dos leones que estaban junto a los brazos.

-  Doce (12) leones sobre las seis (6) gradas, a uno y otro lado. Jamás fue hecho trono semejante en reino alguno.

-  Trecientos (300) escudos de oro batido, teniendo cada escudo trescientos siclos de oro y plata a Salomón.

-  Toda vasija del rey Salomón era de oro, y toda vajilla de la casa del bosque del Líbano, de oro puro. En los días de Salomón la plata no era apreciada, porque la plata del rey iba a Tarsis con los siervos de Hiram, y cada tres (3) solían venir las naves de Tarsis, y traían oro, plata, marfil, monos y pavos reales.

-  Presentes, alhajas de plata, alhajas de oro vestidos, armas, perfumes, caballos y mulos, todos los años, traídos a él por los reyes de la tierra.

-  Cuatro mil (4.000) caballerizas, para los caballos y carros, y doce mil (12.000) jinetes, los cuales puso en las ciudades de los carros, y con el rey en Jerusalén.

-  En cuanto a plata y cedros: Acumuló plata en Jerusalén como piedras, y cedros como lo cabrahígos de la sefela en abundancia.

-  La Compañía de mercaderes traían también caballos  y lienzos para Salomón de Egipto, y de todos los países. Y  venía y salía de Egipto, el carro por seiscientas piezas de plata, y el caballo por ciento cincuenta; y así los adquirían por mano de ellos todos los reyes de los heteos, y de Siria.

Desobediencia e Idolatría de Salomón (1 Reyes 11:1-13):

  Salomón hijo de su extinto padre biológico (David), no conforme con tener amoríos con la hija de Faraón de Egipto, profundizó su desobediencia a IEUE en cuanto a otras mujeres extranjeras, pues amó a las de Moab, a las de Amón, a las de Edom, a la de Sidón y a las heteas; gentes de las cuales IEUE Dios había dicho a los hijos de Israel: “No os llegareis a ellas, ni ellas se llegarán a vosotros; porque ciertamente harán inclinar vuestros corazones tras sus dioses.” E hizo Salomón lo malo ante los ojos de IEUE, y no siguió cumplidamente a IEUE como David su padre, sino que en cuanto a esas mujeres extranjeras tuvo una unión descontrolada, ya que tuvo setecientas  (700) mujeres reinas y trescientas (300) concubinas. Todas las cuales cuando ya era viejo, extraviaron e inclinaron su corazón tras dioses ajenos; y su corazón no era prefecto  con IEUE su Dios, como lo fue el de David su padre.

Los dioses ajenos a los que adoró y siguió Salomón fueron:

• Astoret (Astharot), diosa de los sidonios (es decir, fenicios).
• Milcom (Moloch o Melek), ídolo abominable de los amonitas.

Entonces edificó Salomón un lugar alto a Chêmos (Quemos), en el monte que está cerca de Jerusalén (Nota: Esto es el Monte de los Olivos), y a Moloc, ídolo abominable de los hijos de Amón. De modo que así les hizo a las mujeres extranjeras, las cuales quemaban incienso y ofrecían sacrificios a sus dioses.

   Esto suscitó el enojo de IEUE contra Salomón, a este no le importó todo cuanto Dios le dijo en las dos oportunidades cuando se le apareció y le advirtió acerca de no seguir a dioses ajenos, más él no guardó lo que IEUE le mandó. Por tanto en una tercera ocasión IEUE le dijo:

“Por cuanto ha habido esto en ti, y no has guardado mi pacto y mis estatutos que yo te mandé, romperé de ti el reino, y lo entregaré a tu siervo. Sin embargo, no lo haré en tus días, por amor a David tu padre; lo romperé de la mano de tu hijo. Pero no romperé todo el reino, sino que daré una tribu a tu hijo, por amor a David mi siervo, y por amor a Jerusalén, la cual yo he elegido.”

      Entre la idolatría en que Salomón también calló, se cuenta un símbolo trazado en el centro del llamado “sello de Salomón”, lo cual es una estrella de seis puntas, y que algunos engañadores y manipuladores han dicho que es la estrella de David. David nunca utilizó la figura de una estrella de seis puntas como supuesta representación de Jesucristo, y cuando se refirió a la estrella de la mañana, lo hizo refiriéndose al Mesías en un sentido metafórico, no se estaba refiriendo a la estrella de seis puntas ni tampoco ordenó hacer una para que fuera un símbolo israelí. Hay que recordar que David, a pesar de lo que ocurrió con la mujer de Urías, tuvo un corazón recto para con IEUE, no cayendo en idolatría ni en otras desobediencias, guardando así los mandamientos, estatutos y decretos de Dios.

Esa estrella es la famosa “estrella del dios Remfán”, que adquirió de su esposa egipcia, puesto que en Egipto se veneraba casi siempre, y fue la que en tiempos pasados hizo caer a los israelitas en pecado contra IEUE Dios, a poco tiempo de haber salidos de Egipto.

Vemos los relatos bíblicos, mediante Dios reprocha lo que Israel hizo a poco tiempo de salir de Mitzraim (Egipto):

“Oh casa de Israel”, ¿acaso me ofrecieron sacrificios y ofrendas en el desierto durante 40 años?

Sino que transportaron el tabernáculo de mílcom (Moloch) y la imagen de Quiún (Remfán), estrella que para ustedes hicieron un dios.

Haré que los lleven cautivos aún más allá de Damasco...” (Amós 5:26-27, Peshitta)

Por lo tanto Esteban dijo: “Entonces hicieron un becerro, y ofrecieron sacrificio al ídolo, y en las obras de sus manos se regocijaron. Y Dios se apartó, y los entregó a que rindiesen culto al ejército del cielo; como está escrito en el libro de los profetas: ¿Acaso me ofrecieron sacrificios y ofrendas en el desierto por cuarenta años, oh casa de Israel? Sino que llevaron el tabernáculo de Moloc (Melek) y la estrella del dios Remfán, imágenes que ustedes mismos hicieron para postrarse ante ellas. Por esto, los llevaré más allá de Babilonia” (Hechos 7:41-43).

Adversarios que IEUE Dios, hizo surgir a Salomón (1 R. 11:14-40):

IEUE hizo surgir Hadad edomita de sangre real como adversario a Salomón. La adversidad de Hadad, ya tenía un precedente en contra de David y sus soldados, pues cuando este se encontraba en Edom, y su general  Joad acabó de enterrar los muertos que tuvo el ejército de Israel, se dispuso por espacio de seis meses a matar todo varón de esta ciudad. En esta oportunidad Hadad con otros edomitas siervos de su padre, logró huir a Egipto, donde se le dio comida y tierra, y hallando gracias a ojos del monarca egipcio, pudo contraer nupcias con la hermana de Tahpenes, mujer reina de Faraón. Así Hadad tuvo hijo, y oyendo Hadad en Egipto que David había dormido con sus padres y que era muerto Joad el general del ejército de Israel, le pidió a Faraón le permitiese ir a su tierra. Lo cual no le pareció bien a Faraón, pero quien luego lo dejó ir.

También Rezón hijo de Eliada, el cual había huido de su amo Hadad-ezer, rey de Soba, fue otro adversario que IEUE le hizo levantar a Salomón. Este adversario se fue a Damasco donde le hicieron rey, y fue un enemigo de Israel todos los días de Salomón; y fue otro mal con el de Hadad, porque aborreció a Israel, y reinó sobre Siria.

Otro enemigo o adversario que IEUE Dios hizo levantar contra Salomón fue a su siervo Jeroboam, hijo de su madre Zerúa y de Nabat, efrateo de Sereda. Jeroboam era un hombre valiente, esforzado y activo; motivo por el cual Salomón le encomendó todo el cargo de la casa de José. La rebelión de Jeroboam contra su rey, fue por dos razones: 1) Porque Salomón al edificar Milo, cerró el portillo de la Ciudad de David su padre biológico: y 2)  Porque Jeroboam en ese mismo tiempo cuando saliendo de Jerusalén, le encontró en el camino el profeta Ahías solonita, y este estaba cubierto con una capa nueva; y estaban los dos solos en el campo. Y tomando Ahías la capa nueva que tenía sobre sí, la rompió en doce pedazos, y dijo en tanto a Jeroboam: Toma para ti los diez (10) pedazos; porque así ha dicho IEUE Dios de Israel: “He aquí que yo rompo el reino de la mano de Salomón, y a ti daré diez (10) tribus, y el tendrá un tribu por amor a David mi siervo, y por amor a Jerusalén, ciudad que yo he elegido de todas las tribus de Israel; por cuanto me han dejado, y han adorado a Astoret diosa de los sidonios (fenicios), a Quemos dios de Moab, y a Moloch (Melek) dios de los hijos de Amón; y no han andado en mis caminos para hacer lo recto delante de mis ojos, y mis estatutos y mis decretos, como hizo David su padre. Pero no quitaré nada del reino de sus manos, sino que lo retendré por rey todos los días de su vida, por amor a David mi siervo, al cual yo elegí, y quien guardó mis mandamientos y mis estatutos. Pero quitaré el reino de la mano de su hijo, y lo daré a ti, las diez (10) tribus. Y a su hijo daré una tribu, para que mi siervo David tenga lámpara todos los días delante de mí en Jerusalén, ciudad que yo me elegí para poner en ella mi nombre. Yo pues te tomaré a ti, y tú reinarás en todas las cosas que deseare tu alma, y serás rey sobre Israel. Y si prestares oído a todas las cosas que te mandare, y anduvieres en mis caminos, e hicieres lo recto delante de mis ojos, guardando mis estatutos y mis mandamientos, como hizo David mi siervo, yo estaré contigo y te edificaré casa firme, como la edifique a David, y yo te entregaré a Israel. Y yo afligiré a la descendencia de David a causa de esto, más no para siempre.”  

   Por ello Salomón procuró matar a Jeroboam, pero Jeroboam se levantó y huyó a Egipto hasta la muerte de Salomón.

Muerte de Salomón (1 R. 11:40-41; y 2 Cr. 9:30-31):                                                                            

  Le llegó el tiempo de morir a Salomón, cuando ya tenía cuarenta (40) años reinando sobre Israel. Durmiendo pues lo sepultaron con sus padres en la ciudad de su padre David; y reinó en su lugar Roboam su hijo.

En Resumen conclusivo:

 Tiempos apoteósicos de sabiduría y de gloria tuvo Salomón. Acerca del cual lo más que quería David su padre biológico, era que tuviera un corazón perfecto, para que guardara los mandamientos, testimonios y estatutos de IEUE Dios, y para que hiciera todas las cosas, y edificara la casa sagrada para la cual había hecho preparativos. Dios le dio extremada sabiduría, riquezas y encanto delante de los hijos de Israel y de las tierras circunvecinas, que inclusive la reina de Sabá, lo visitó y entre ambos se dieron elogios y regalos.

   Salomón fue durante un largo tiempo, bastante justo y buen rey con los de su pueblo, pero al no obedecer a Dios en todo cuanto le había dicho en dos ocasiones que se le apareció, cayó en el desenfreno de las apetencias de la carne y en la más vil y abominable idolatría, que incluso hizo lugares altos a dioses ajenos en honor a las deidades que adoraban sus mujeres. Cuyas mujeres quemaban incienso a sus dioses abominables y les hacían sacrificios humanos de recién nacidos.

   Fast (2014) elabora en qué consistía el culto a Moloch (también conocido como Quemos por los Moabitas y Ba'al por los Filisteos): “Estos sacrificios no tenían cuchillos o armas, usaban fuego para rendir culto a los dioses falsos. Por lo que sabemos se ofrecían infantes varones y femeninas primogénitos (2ª de Reyes 23:10) para ser quemados y consumados en fuego.”