Página principal  |  Contacto  

Correo electrónico:

Contraseña:

Registrarse ahora!

¿Has olvidado tu contraseña?

.мαяισlleттe eмpιяe.
 
Novedades
  Únete ahora
  Panel de mensajes 
  Galería de imágenes 
 Archivos y documentos 
 Encuestas y Test 
  Lista de Participantes
  
  
  
  
  
  
  
  
  
  
  
  
  
  
  
 
 
  Herramientas
 
♛ 「 ραlαcισ ιмρeяιαl 」: †Ađiεcтiσ. . ॥ Pгivαтe ● sαм-нisσкα
Elegir otro panel de mensajes
Tema anterior  Tema siguiente
Respuesta  Mensaje 1 de 22 en el tema 
De: Gabriel Yulian  (Mensaje original) Enviado: 16/09/2011 02:30
"Sangre" .El delicioso sabor de la sangre se vió en su boca y tiñó su rostro de rojo. Sosteniendo en sus manos la cabeza de aquel niño quien ya estaba sin vida en la oscuridad de aquel callejon oscuro. Sus ojos negros fijos en la luz de la cuidad en donde la genta iba y venia sin sospechar que la vida de un inocente estaba siendo arrebatada. Parecía un perro comiendose la carne de aquella criatura, su menton manchado en sangre joven y fresca. "Me encanta" Pensó. Le encantaba aquello, le encantaba servir de ejemplo a aquellos niños que desobedecían los limites de sus padres y caminaban alejandose de los mayores. Él no tenía la culpa, si habia asesinado a un muchacho inofensivo era porque sus padres jamás le enseñaron a no hablar con extraños, y nunca le enseñaron a desviarse del camino. La muerte de ese pequeño, serviría de enseñanza a otros -Alegrate por ello, frágil bastardito- Susurró dejando abandonado los restos sin vida, saliendo del callejon mientras se limpiaba la mandibula y la boca con un rostro imperturbable.
Como le encantaba aquel lugar, le encantaba el Imperio porque al haber tanta gente ocupada en hacer y deshacer, él podia desaparecer gente sin que nadie se enterara. Estaba encantado "Esto me encanta" . Sus ojos se acostumbraron a la luz de la cuidad nocturna y veía la gente pasar haciendo los ultimos quehaceres del dia, y lo que vió le dejó maravillado. La misma perfecta figura del mismisimo pecado. Los mismos vacios y desinteresados ojos le hipnotizaban de la misma exquisita forma. Nada habia cambiado en él. Su sangre empezó a burbujear en sus venas y su corazón oscurecido, vió la luz brillar nuevamente, pero no era los faroles del Imperio, no era los negocios por cerrarse, no era la luna. Aquella luz se vió reflejada en el resplandor del verde radiante de los ojos que le encontraron entre la multitud.


Primer  Anterior  8 a 22 de 22  Siguiente   Último  
Respuesta  Mensaje 8 de 22 en el tema 
De: Shounen Kait Enviado: 23/09/2011 01:46

Le observó fijamente cuando le oyó decir que él no había dicho nada. Dirigió su mirada fija, inmediata a su piel cuando se desnudaba, observando sus músculos marcados y su ancha espalda. El cuerpo del moreno era tal y como lo recordaba, ardiente... Su respiración era normal, sus ojos no demostraban ninguna emoción, pero se habían mantenido continuos en esa situación, en ese desnudo. Y en el agua, le observaba, le observaba sin decir una sola palabra. No iba a dejar ver absolutamente nada de lo que pensaba. Sus deseos ocultos, eso eran, ocultos y así se iban a mantener. Miró la ropa del moreno en la tierra, la noche hacía brillar sus ojos verdes. ¿Por qué estaba evitando meterse al lago si de todas formas no ocurriría nada? Miró fijamente los ojos oscuros desde allí. Apartando de sus hombros el kimono… dejándolo caer al suelo… -- sin decir nada y comenzó a caminar al lago, metiéndose suavemente en èl. Mirando a Sem… mirándolo hasta que se arrojó al agua por completo. Nadando hasta encontrarse màs cerca, para salir frente sus ojos, justo frente su rostro y a pocos metros… empapado. Sus pestañas largas aùn retenían el agua y sus ojos verdes miraron la boca ajena antes de continuar caminando alejarse lo suficiente… y dejarse caer al agua, para mirarlo desde allì en la parte màs profunda - …que – preguntó con severidad - ..tengo algo en la cara? – fue irónico con su mirada y con su voz.


Respuesta  Mensaje 9 de 22 en el tema 
De: Gabriel Yulian Enviado: 23/09/2011 02:50
Sus ojos fijos en el agua mientras se sentia limpio por completo. Sin embargo no levantó la vista cuando sintió
la ropa del menor resvalar por su cuerpo, tenia los sentidos tan desarrollados que era increiblemente exitante sentir
la tela resvalar por su cuerpo, haciendo un ruido diminuto, y éso solo significaba recordar la suavidad de aquel cuerpo.
Le miró de reojo mientras veia su desnudez entrar al lago y arrojarse al agua. Incluso su mirada se mantuvo en el
rubio debajo del agua mirando sus ojos, clavando su mirada en los iris verdes que salian a la superficie.
Su mirada se volvió filosa al estar otra vez cerca de su rostro, le estaba provocando demaciado, y parecia disfrutar aquello.
Se volvió a alejar mientras el moreno le miraba fijamente -tengo algo en la cara?Cortó la pregunta del menor para caminar
hacia él, directamente como si fuera una flecha dirijiendose al blanco y no hubiera otra alternativa distinta.
 
Se acercó a su cuerpo seductoramente
y acarició su rostro con la yema de sus dedos- Belleza... solamente belleza -respondió en un susurro y sus ojos se
vieron brillantes atravez de su flequillo. LLenos de amor. El ambiente tranquilo y el ruido del agua ante los movimientos de
los dos, le llenaban de paz.... O quizas solo era Hisoka quien le daba tanta paz. Su cuerpo no se acercó de más al
cuerpo que tenia frente a él, antes de pensar en su desnudez como algo increiblemente tentador, se limitó a tocar el rostro
ajeno por el tiempo que podia, tratando de aprovechar al maximo de él. Mientras su mirada enamorada se mantenia en los ojos
del rubio,  su mente se llenaba de recuerdos. Las pupilas del morocho empezaron a recorrer con devoción el rostro ajeno,
mirandole como si fuera una flor abriendose en primavera. Sus ojos, su frente, su nariz, su boca, sus mejillas, su barbilla, su nariz de nuevo.
Le recorria admirando su hermosura como si tuviera todo el tiempo del mundo o mejor dicho, como si el mundo se hubiera
detenido en su imagen. Su voz sonó en un susurro -Te heché tanto de menos.... Me hacias tanta falta.....-Sus labios se callaron
como si se hubiera arrepentido de romper el silencio. 

Respuesta  Mensaje 10 de 22 en el tema 
De: Shounen Kait Enviado: 23/09/2011 18:29
Cuando notó que el cuerpo ajeno se acercaba sigilosamente, levantó su cuerpo del agua, mirándole arrimarse. No iba a temerle, así que el Teufel no debería esperar que corriera y se aleje de él. Estiró su mano para tocarlo y entonces el rubio quiso apartarlo, pero instintivamente no respondió a su tacto.. solo se mantuvo mirándolo ojos oscuros mientras su rostro se veía acariciado por la yema de sus dedos. "Belleza... solamente belleza" respondió en susurros apenas audibles, y el rubio se sonrojó levemente al escucharlo así, hacía tiempo que nadie le decía algo como eso. Ladeó su rostro mirando a un lado, queriendo ignorarlo, pero no hubo caso. Enseguida sus orbes insensatos, verdes, volvieron a encontrarse con sus ojos. Había algo en ellos, un brillo quizás.. Que le mantenía atrapado en su mirada. Una duda perdida apareció en su cabeza de pronto ...¿Así conseguía atrapar a sus víctimas?. Apartó aquel pensamiento al escuchar el leve sonido que hacían ambos con sus cuerpos en el agua. Un momento... notó que Sem estaba arrimándose aún más y tragó saliva queriendo hablar o espantarlo, o algo para alejarlo de si! "Que se supone.. que está haciendo.." susurró, apretando sus dientes sin querer ser muy expresivo. Sus ojos, sus ojos de nuevo. Esa mirada tan impresionante... los ojos verdes volvieron a mirarlo y aunque sus labios se entreabrieron para decir algo.. no pudo más que permanecer boquiabierto al notarlo tan cerca y tan dócil. Levantó apenas su mano… para rozar el rostro del moreno pero se detuvo a pesar escuchó sus murmullos… “Te eché tanto de menos.... Me hacías tanta falta.....”. Sus ojos dieron enseguida a su boca, mirándola con atención. Los dedos ajenos rozaban la piel del rubio, y aquello se sentía increíblemente encantador. Disfrutaba de las caricias y de su voz… incluso volvió a ver su rostro y tragó saliva al darse cuenta que le estaba atrapando otra vez; él también le había extrañado, le había hecho falta, le había echado también de menos. Y sobre todo que él también le veía bello. Apenas apartó su rostro para que no le alcanzara con las manos, observando el cuerpo que tenía frente a él - …quién… te has creìdo para acercarte tanto a mí, Semyazza.. – habló, tratando de contenerse. No era una pregunta que debería responder. Su cuerpo recostó la espalda en unas rocas enormes que hacían de pared ya que el lago era pequeño… le observaba desde allí, las estrellas de la noche reflejadas en el agua daban hasta el vientre de ambos, incluso un poco más abajo a Sem, ya que era más alto. El vientre del rubio, respiraba tranquilo, también su pecho desnudo contra las piedras. Su cabello algo largo de color otoño muy claro, despeinado y empapado incluso goteaba por el anterior zambullón; sus ojos agudos no le sacaban la mirada de encima en ningún momento, y sus manos acariciaban la piedra con suavidad. Su cuerpo hablaba por si mismo, aunque el ojiverde no se dignara a aceptarlo. – Esas.. son todas las cosas que dices a tus victimas antes de atraparlas? – preguntó sonriendo levemente - …debo admitir, pobres diablos, sabes cómo hacerlo – susurró, hablando de ello pero tambien de otras cosas. De su forma de conquistar, de enamorar, de aturdir los oìdos ajenos con amabilidades absurdas que obviamente terminaban siendo mentiras. Las gotas de agua se deslizaban lentamente por el cuerpo ajeno y su mirada se mantenía fija en él.

Respuesta  Mensaje 11 de 22 en el tema 
De: Gabriel Yulian Enviado: 23/09/2011 23:27
Sus ojos se mantuvieron inamovibles, su mirada misteriosa triste y enamorada continuó
en su rostro aún cuando le vió recostarse en la roca y alejarse de él. Miró el rostro frente
a él aun cuando veía de reojo como la mano de Hisoka acariciaba la superficie dura, sintiendose
más bastardo que una simple materia sin vida. Sonrió en silencio, pues éso era en realidad,
un bastardo sin vida.  – Esas.. son todas las cosas que dices a tus victimas antes de atraparlas? –  
Su sonrisa se borró levemente, oyendole - debo admitir, pobres diablos, sabes cómo hacerlo –  
Su cuerpo se acercó al ajeno casi irrespetuosamente, pero sin rozarlo. Sin embargo una de sus piernas
se metió entre las ajenas mientras con su rodilla se apoyaba en la roca y su codo  cerca del
rostro ajeno. Acorralandolo definitivamente.  Su rostro se mantenia incorrejiblemente hermoso, pero
sin duda la luz de la luna en el cielo y en el agua iluminaba el rostro del menor,
haciendolo aún más hermoso de lo que era- A decir verdad... Todas estas cosas digo cuando me 
han atrapado a mi, debo admitir... Solo me ha pasado dos veces -hizo una pausa y miró los labios
ajenos, a centimetros de él- Una fué cuando te ví por primera vez y la otra hace un rato, cuando te ví una segunda -
Volvió su mirada a los ojos verdes, casi deborandolo con aquella forma de verlo, tan asfixiante,
tan encantadora. Su otro codo se posó tambien en la roca, encerrando la cabeza de Hisoka entre
sus brazos- Mi amor.. tu no me has extrañado? -Susurró casi seductoramente con sus labios sobre los ajenos. 

Respuesta  Mensaje 12 de 22 en el tema 
De: Shounen Kait Enviado: 24/09/2011 00:37
Volvió a arrimarse, "Cielos... cuando se va a cansar de intentarlo" preguntó para sì, alertándose de su acercamiento. Sobresaltándose cuando sintió su pierna entre las propias - ah! Semyazza.. que haces... - levantó su voz, aunque no pudo hacerle frente con su rostro pues se vio sorprendido mirando los ojos oscuros que le acorralaban contra aquella pared. Su cabello goteaba poco, estaba secándose... sus caderas anchas por el simple hecho de abrir sus piernas para no rozarlo un solo centímetro, pero no lo podía evitar. Si hasta lo olía... sentía su olor corporal muy cerca. Hasta sus propias siluetas estaban reflejadas en el agua, pero aún mas cercanas de lo que estaban los cuerpos en realidad. "A decir verdad... Todas estas cosas digo cuando me han atrapado a mi, debo admitir... Solo me ha pasado dos veces" habló entonces el moreno "Con qué saldrás ahora..." susurró para sus adentros, mientras mordía su propio labio inferior para soportar tenerlo tan cerca. El lugar era tan silencioso y vació, que sus susurros se oían perfectos "Una fue cuando te ví por primera vez y la otra hace un rato, cuando te vi una segunda" se sonrojó, afilando su mirada para verlo con los ojos entrecerrase y soltando lentamente su propio labio que mordía con fuerza. Observó de reojo, con sus pupilas como el otro codo de aquel muchacho le encerraba- .............. - volvió a sus ojos "Mi amor.. tu no me has extrañado?" murmuró en su boca, y el rubio entrecerró los ojos manteniendo los labios abiertos, para sentir sus palabras y su aliento. Sus impúdicos ojos verdes le miraron fijos en esa posición.. y ambas manos posaron las yemas de sus dedos en el pecho ajeno, deslizando suavemente hacia abajo... hasta su vientre, tocando el ombligo ajeno. Y entrecerrando sus ojos con atención, con intensidad.. - ...por supuesto que si, idiota - susurró en sus labios, sin moverse un centímetro más - no te hubieras ido nunca... - No quería hacer nada de lo que después podría arrepentirse, pero hablaba sobre la boca ajena tambien, mirando los ojos ajenos.

Respuesta  Mensaje 13 de 22 en el tema 
De: Gabriel Yulian Enviado: 24/09/2011 04:56
Su boca se abrió gustosa al sentir aquella caricia en su cuerpo, mientras
su mirada se hacia más filosa. Cuando miraba a otro lado, el morocho
aprovechaba para oler su piel ensimismadamente, incluso cerrando apenas
sus ojos.  -no te hubieras ido nunca...- Sonrió sobre la boca ajena,
presumidamente, pero en realidad solo estaba maravillado. Le habia
extrañado tambien, habia pasado noches enteras sin poder cerrar
los ojos por el dolor de no tenerlo a su lado? Habia buscado en otros cuerpos
el calor que solo encontraba en él? Su respiración se oia sutilmente entre
los labios ajenos, mientras su mano bajó a la pierna ajena para tocarla debajo
del agua, acariciarla, no rozarla. Acariciarla apacionadamente, con firmeza,
como si tuviera la intension de introducirse en él ante la presion de su mano y
la suavidad de la piel ajena. Su mirada se mantenia fija en los ojos de Hisoka,
Mientras sus labios rozaban la boca del menor, se deslizaron con suavidad por la
mejilla ajena, para bajar a su cuello, y abrir su boca, sexualmente besandolo con pasión y deseo
 
No esperó que pasara ni unos pocos minutos y su cuerpo se apoyó sobre Hisoka. Dejandole sentir
al rubio la temperatura de su cuerpo, tibia como habia sido siempre, su piel, cada textura de su 
cuerpo marcado. Exhaló al sentir él tambien el cuerpo del menor tocando el suyo, sus piernas,
su vientre plano, sus genitales, su pecho y sus manos tocandole. Mientras no apartaba su boca de la piel
ajena. Despues de todo no podía. Se alejó un poco con mucho esfuerzo -Hasta donde me dejarás llegar? -
Susurró para volver a su piel, y bajar por el pecho del menor. 

Respuesta  Mensaje 14 de 22 en el tema 
De: Shounen Kait Enviado: 26/09/2011 18:01
Le vió sonreír, le sintió como siempre tan audaz. Casi pudo imaginar que el moreno había logrado lo que quería: escucharlo decir eso. Las yemas de sus dedos aùn se encontraban en el ombligo ajeno y gracias a eso pudo notar que algo en el cuerpo del moreno se movía. Dirigió sus pupilas al brazo del mismo, notando que efectivamente estaba moviéndose. Y no solo eso, estaba tocándolo, acariciándolo con potencia, incluso acomodándolo para quien sabe, quizás, lograr rozar su entrepierna desnuda con la del rubio o buscando que le rodeara las caderas, pero no lo dejaría hacerlo!.. No dejaría que se aprovechara de lo irresistible que resltaba imaginarse jadeante con él entre las piernas. No dejaba de mirarlo, se veía en sus ojos reflejado e incluso parecía no haberse dado cuenta de si mismo, del suspiro agitado y anhelante que había escapado de su boca justo en el momento en el que le tocó. Dejarse domar por él resultaría "...fatal", susurró para sus adentros, las ganas le carcomían la cabeza, porque no solo había piel entre los dos... si no también ese sentimiento viscoso e insoportable del que tampoco podría escapar y que nunca se lamentaría de no nombrar en absoluto. Sabía como hacerlo, el demonio sabía como hacerlo perder la cabeza "Maldita sea.." sus pensamientos eran un desorden, y la boca ajena no abandonaba el frenesí de besarlo así en su parte más sensible, su cuello. Su perfecto cuello - Semya... nhg.. no sigas… idio… ahm…. - no podía, sus ojos se había cerrado y se encontraba con sus manos empujando levemente los hombros ajenos - ...làr-ga-te!! - hablò fastidiado, costosamente y entre jadeos pues sus caderas se entregaban sin dudarlo. El cuerpo ajeno se apoyò al del rubio, aún más apretados - aahh... ahgg... - se sostuvo fuertemente de los hombros e incluso clavó sus uñas levemente largas con fuerza al verse acorralado y sentir a un hombre como ese entre las piernas.. sentir a aquel hombre desnudo, tan caliente y sexual. Cuando lo alejó un poco sintió que podìa respirar, en ese entonces ¿el agua estaba màs caliente o era su impresión?... "Hasta donde me dejarás llegar?" su voz se oyò en el silencio, volviendo a la piel del rubio - te dije que te alejes de mi! – elevó su habla, rompiendo con el momento y apartando de empujón más, pero definitivo, al moreno.. Apartándose de èl sin duda alguna, alejándose con pasos apresurados y nerviosos, aunque lentos por la presión del agua. Sus delicados dedos acariciaban la zona que había sido besada, su cuello blanco que ahora se encontraba brillante por la saliva ajena, y sus ojos verdes, fijos, le miraban indignados - ...idiota, no has aprendido a obedecer? - fue lo único que pudo expresar, antes de tomar agua con ambas manos para echársela sobre su rostro, y empaparse el cuerpo de ella.. tratando de sacarse esa sensación tan extraña de la piel. La calidez de quién seguramente le mirara, tal vez no absorto como lo estaría cualquiera porque el demonio le conocía. Sabía que el rubio decía no, cuando en realidad es un si.
 
Correjido y editado <3

Respuesta  Mensaje 15 de 22 en el tema 
De: Gabriel Yulian Enviado: 28/09/2011 20:52
Su voz era múscia para sus oidos, escucharla hablar ya era suficientemente
tentador pero escucharle gemir, débilmente, prostestar sobre lo que le gustaba...
No había algo más seductor de oir que la voz de su Hioka susurrar.
Su respirácion era tranquila pero no ocultaba su sensualidad, mientras sentía la piel
del menor de nuevo.
Le encantaba acabar con las vidas de marionettas que jamás serían extrañadas.
De alguna forma así se cobraba lo que sus padres le habian hecho. Pero las veces
que tenía sexo con una, dos o trece mationettas al mismo tiempo, no podía matar a
quienes le daban placer, aunque no podía ni queria evitar esa sensación maravillosa de
ver la sangre en los cuerpos ajenos. Le encataría ver a Hisoka de esa manera, pero no
cualquier sangre... Le calentaba imaginarlo cubierto de su propios liquidos, verlo enrojesido
con su podrida y maldita sangre. Le encataría acabar desangrado ensima de su amado.
Pensamientos como ésos iban y venian en su cabeza mientras humedecía el cuello ajeno,
hasta que se vió empujado hacia atras -te dije que te alejes de mi!- Sonrió mirandole y oyendole
protestar - No has aprendido a obedecer? -Rió tapandose la boca con el revez de su mano y
caminó hasta él para pasar por su lado y dirijirse a la orilla- No puedo obedecer ordenes que
ni tu crees aceptables -Sonrió caminando de espaldas a él mientras se dirijia hasta su ropa
cambiandose y humedeciendola. Vistiendose elegantemente volviendo el negro, a opacar su
pálida piel. 
Caminó hasta la ropa del rubio para agacharse con una sonrisa y tomarla del cuelo,acercarla
a su rostro y olfatear su olor como un sahueso en celo. Y mirarlo atentamente ansioso por
verlo caminar desnudo hacia él- 

Respuesta  Mensaje 16 de 22 en el tema 
De: Shounen Kait Enviado: 29/09/2011 17:43
Le vio, empapado, esa sonrisa…. Apretó sus labios al verlo sonreír de sus protestas ¿Acaso no lo estaba tomando enserio? desde un principio le había dicho que no intentara nada con él. Le miró de reojo cuando pasó a su lado - hum ... - ladeo su rostro a otra parte y volvió a mirarlo, ya que había hablado. "No puedo obedecer ordenes que ni tu crees aceptables". Se sorprendió un poco - te equivocas, todas mis órdenes son completamente ciertas - indicó con calma, erguido. Le vio cambiarse, como la ropa le cubría pero a la vez no dejaba nada a la imaginación debido a que se apegaba a su cuerpo, delineándolo... repentinamente se sorprendió al verlo tomar su ropa del suelo, lo único que tenía era ese kimono rojo de seda y no sabía que era lo que iba a hacer. Dio unos pasos hacia él - no toq..... - fue interrumpido por la siguiente acción del teufel. Sorprendido aún más, su rostro tomó el mismo color que el kimono - qu...que haces? apártate de mi ropa! - ordenó, bajando la vista al suelo y tratando de actuar normalmente, caminando hasta él y tomando de mala gana del kimono, colocándoselo sobre la piel enseguida. Mirándole fríamente a los ojos - ...descarado, no has cambiado en nada - sonrió un poco, atándoselo. Su cabello húmedo estaba secándose, en cambio su cuerpo recién salido del lago aún seguía mojado. Se colocó sus sandalias y caminó unos pasos hacia cualquier parte, acomodando la seda de su ropa. Pensativo - ...Porque estás en estas tierras? no deberías estar aquí - le daba la espalda. Si cuidaba de él seguramente sería exiliado de los territorios y perdería todos los derechos como feuermaske e incluso como marioneta por ayudar a un tonto demonio a permanecer a salvo, pues él nunca entregaría a Sem - responde, Semyazza. Te gusta provocar a los reyes? - le miró desde aquella posición - ..o es que simplemente te encanta meterte en problemas - bufó elevando una de sus cejas - ..no me incluyas - aclaró, por su propio bien.

Respuesta  Mensaje 17 de 22 en el tema 
De: Gabriel Yulian Enviado: 29/09/2011 21:22
Su sonrisa se hizo enorme al verlo caminar hacia él, completamente enojado finjiendo
no tener verguenza, timidez o incluso asombro que el demonio le encante el olor que
desprendia su cuerpo. Casi al limite de reir dejo que Hisoka le arrebatara de las manos
aquella ropa y lo vió cambiarse ya sin ser tan simpatico, pues no le gustaba la idea. No
habia mejor vestido sobre el rubio que la piel aferrada a la figura perfecta y deseable sobre
él.- ...descarado, no has cambiado en nada - Le vió sonreir y sonrió él, por inercia. -Él tampoco
ha cambiado nada, me pregunto Sam, cuanto más vas a poder contenerte para besar esa
boca?- Pensó mirandole alejarse. ...Porque estás en estas tierras? no deberías estar aquí
Su sonrisa se fué levemente. Si, era verdad... No le gustaria estar causandole problemas a
Hisoka. - responde, Semyazza. Te gusta provocar a los reyes?  ..o es que simplemente te
encanta meterte en problemas... no me incluyas - Oía practicamente sin oir lo que el rubio le
decía mientras se dejaba llevar por sus pensamientos. 
 
Antes no era asi, cuando era un chico
normal podia estar de la mano con él por todo el Imperio sin robar las miradas de nadie. Antes no
tenia que ocultarse, antes podia estar con él sin preocupaciones. Se vió obligado a irse antes lastimar
a alguien cercano ante el poco control de sus nuevo poderes. Pero ahora volvia, que le hacia
pensar que las cosas volverian a ser como antes? Esos pensamientos lo arrstraban, mientras
su cabello se elevaba ante la energia que se comenzaba a descontrolar dentro de él. Igual que
su ropa, secandola por accion del viento. Su mirada fija en el lago, apretando sus dientes sin parpadear.
Su pecho comenzaba a agitarse mientras su poder se hacia más fuerte haciendo agitar los arboles. 

Respuesta  Mensaje 18 de 22 en el tema 
De: Shounen Kait Enviado: 02/10/2011 09:40
Le notó distante, aquello llamó su atención reciamente pues si bien el moreno era un ser extravagante y diferente a los demás, le conocía particularmente alguna
que otra cosa. Notó la presencia de aquella energía que constantemente mecía las copas de los árboles y hacía deslizar el agua del lago en otras direcciones. Se dio
vuelta completamente para verlo de frente y lograr notar su rostro serio, su mandíbula presionada y sus manos formando un puño. El rubio dejó que sus cabellos
bailaran también al ritmo del viento, y exhaló pues no había nada más hermoso que escuchar la melodía aquella; aunque fuese provocada por razones nada naturales
esta vez. Camino unos pasos, màs pasos, màs pasos, hasta conseguir encontrarse frente a frente con el Teufel. Estirando ambas de sus manos para tomar el rostro
ajeno con cariño y suavidad entre ellas - .....donde me esconderás esta noche? - susurró, perdiéndose en sus ojos oscuros. Sus dedos se rozaban con sus mejillas.
Sabía cuando debía ser sumiso, cuando le correspondía calmar a su diablillo...

Respuesta  Mensaje 19 de 22 en el tema 
De: Gabriel Yulian Enviado: 03/10/2011 03:34

Sus ojos se vieron casi desorbitados frente a los ojos verdes de Hisoka, calmandose de
una manera que jamas habia experimentado antes. Exhaló al sentir su piel nuevamente
y cerró los ojos relajado -.....donde me esconderás esta noche? - Oyó obligandole a abrir
los ojos, y sonreir. En ese momento sus ropas dejaron de flamear y el ambiente se calmó
rapidamente. Aquella brisa repentina podria atraer a los Reichmaske y Hisoka estaria en serios problemas.
 
Rozó la cintura ajena, apoyando en ella sus manos, grandes, fuertes, sexuales. Y se acercó al rostro del rubio
para posar frente con frente y cerrar los ojos. No queria que tuviera problemas, los Reyes le importaban
realmente poco, los Reichmaske le importaban realmente poco, Gaia le importaba realmente poco, incluso
sus padres que vivian en el Palacio Imperial tambien le importaba realmente poco. Pero Hisoka le importaba mucho.
Realmente mucho. No tenía intensiones de ser un peso para él, pero aún asi tampoco queria separarse - Ven conmigo...
-Abrió sus ojos y le miró profundamente- Ven conmigo a mi casa .... -Cerró sus ojos y suspiró aferrando el cuerpo del rubio 
al suyo, rodeandolo completamente con sus brazos- Ven y sé mio -
 (...)
 
Offrol: Proxima respuesta en el Carinal de Fuego : )
 


Respuesta  Mensaje 20 de 22 en el tema 
De: Shounen Kait Enviado: 03/10/2011 21:37
Él sonrió ante sus palabras, por lo que el rubio no pudo evitar dejar entrever una tímida sonrisa. Quien imaginaría que Semyazza se había convertido en la razón principal por la cual sería capaz de abandonar hasta a su apellido dejando atrás todos sus beneficios como Feuermaske. El Teufel tomó la cintura del joven rubio, hundiendo sus manos en la seda de la tela. Aquello logró que el menos abandonara su sonrisa y diera paso a sus mejillas sonrojadas, mirando aún los ojos ajenos. "Ven conmigo.." habló el moreno "Ven conmigo a mi casa" agregó cerrando sus ojos y exhalando con parsimonia. De repente sintió sus brazos rodear su cuerpo, fundiéndose en un abrazo protector y completo. El rubio se encontraba pasmado ante su reacción aunque no dudó en responder al abrazo rodeando su cuello con sus brazos, escuchándolo hablar "Ven y sé mio" fueron sus palabras, sus exactas palabras. Hisoka cerró sus ojos y sonrió un poco - ...no te creas que las tienes todas para ganar, galán... - abrió sus ojos y elevó ambas cejas, tratando de encontrar su mirada hasta finalmente chocar de frente con sus pupilas oscuras - ...Que estamos esperando? - murmuró, fingiendo impacientarse. Con el propósito de decirle "Si, llévame" pero lamentablemente y como en muchas ocasiones el rubio terminaba diciendo algo tan sarcástico como siempre. Aún así sonrió un poco, mirándolo fijamente, queriéndole demostrar lo que realmente quería decir. Y es que acaso no tenía boca para hablar? simplemente aquellos pensamientos no le salían...

Respuesta  Mensaje 21 de 22 en el tema 
De: Gabriel Yulian Enviado: 05/10/2011 15:11

- ...Que estamos esperando? – Oyó una vez más la voz del rubio y abrió
los ojos para mirarle, completamente enamorado. Se abrazó a la cintura de Hisoka como si
quisiera protegerlo de todo y todos, pero en vez de intentar tranquilizar al mismo, susurró cerrando los ojos- Prepárate Hisoka… A partir de ahora, vas a ser mío para siempre 

Y si más ambos desaparecieron.
(...)

 


Continuacion *** – Adiectio – Carinal de Fuego


Respuesta  Mensaje 22 de 22 en el tema 
De: MaryChain Enviado: 19/03/2013 15:26


Primer  Anterior  8 a 22 de 22  Siguiente   Último  
Tema anterior  Tema siguiente
 
©2024 - Gabitos - Todos los derechos reservados