Página principal  |  Contacto  

Correo electrónico:

Contraseña:

Registrarse ahora!

¿Has olvidado tu contraseña?

EL VISLUMBRAR DE LA ERA DE ACUARIO
 
Novedades
  Únete ahora
  Panel de mensajes 
  Galería de imágenes 
 Archivos y documentos 
 Encuestas y Test 
  Lista de Participantes
 General 
 NAVIDAD 2.016 
  
 ¿QUE ES LA VERDAD? 
  
 EL EMBLEMA ROSACRUZ & The Rosicrucian Emblem 
  
  
  
 HERMANOS MAYORES 
 THE BROTHERS OF THE ROSE CROSS 
 The Rosicrucian Fellowsihip (CURSOS) 
 MAX HEINDEL 
 NORMAS DEL VISLUMBRAR 
  
 AUGUSTA F. DE HEINDEL 
 CORINNE HELINE 
 ADMINISTRACION 
  
  
  
 BIBLIOTECA ROSACUZ 
 MANLY P. HALL 
  
 PREG Y RESP. R.C. 
 FOLLETOS ROSACRUZ 
 LINKS ROSACRUCES 
  
 ROBERTO RUGGIERO 
  
 FRANCISCO NÁCHER 
 ALEXANDRA B. PORTER , 
 JOSÉ MEJIA .R 
 MARTA BRIGIDA DANEY 
 LIBRO DE URANTIA 
 SALUD Y CURACION 
 CUENTOS PARA NIÑOS 
 EL SITIO DE ACSIVAMA 
  
 NOTAS AL INTERIOR 
 LA BELLEZA DE LA VIDA 
 TUS REFLEXIONES 
 BIBLIOTECA 
 PPS ESOTERICOS 
 MUSICA 
 GRUPOS Y AMIGOS 
  
  
 Señor, haz de mi un instrumento de tu paz. 
 LA MORADA DE JESÚS 
  
 
 
  Herramientas
 
FRANCISCO NÁCHER: LA ILÓGICA E INTERMINABLE BÚSQUEDA DE LA FELICIDAD
Elegir otro panel de mensajes
Tema anterior  Tema siguiente
Respuesta  Mensaje 1 de 1 en el tema 
De: moriajoan  (Mensaje original) Enviado: 06/05/2010 18:42

 

(DESCARGAR TEXTO EN FORMATO POWER POINT

CLIC25252520AQU252525C32525258D.gif picture by vislumbrar
 
Circle20cream.gif picture by vislumbrar
 

LA ILÓGICA E INTERMINABLE BÚSQUEDA DE LA FELICIDAD

por Francisco-Manuel Nácher

La vida es hermosa. Pero no nos damos cuenta. Nos la pasamos

esperando que llegue algo que la hará feliz. Y, esperando ese algo, que

nunca llega, aunque miles de veces parece próximo, se nos pasa y se nos

acaba sin habernos proporcionado ese momento de felicidad.

Curiosamente, sólo hallamos atisbos de plenitud y de dicha

recordando momentos pasados, que entonces no nos parecieron

especialmente felices, o imaginando momentos futuros, adornados con

toda suerte de circunstancias deseables.

Sin embargo, ni el pasado ni el futuro existen. Y, por tanto, la

felicidad que pueden proporcionarnos es una felicidad artificial, de

ficción y que no acaba de satisfacernos.

Pero, ¿qué hacemos con el presente? Desgraciadamente, se nos

escurre entre los dedos sin que nos paremos a estudiarlo, de tan

preocupados como estamos por ese momento feliz, tan esperado y que,

no sé por qué misteriosa razón, ubicamos siempre en el futuro.

Tratemos, desde hoy, sin embargo, de mirar al presente, ese

presente que siempre está ante nosotros, en nosotros, y puede que nos

llevemos una grata sorpresa. Porque, mientras nos sentimos

desgraciados, el mundo que nos rodea está preñado de belleza, de

armonía, de gracia, de equilibrio, de música, de felicidad...Y, mientras,

ciegos a todo menos a nuestro egoísmo, nosotros lamentamos cualquier

contratiempo, a nuestro alrededor cantan los pajarillos y las plantas abren

sus capullos y ríen los niños y el sol transforma en diamantes las gotas de

rocío y las nubes dibujan mil figuras en el cielo y la mar arrulla

continuamente a la playa adormecida y las mariposas adornan el cielo y

las flores lo llenan todo con sus aromas...Y nosotros, ciegos y sordos y

ajenos a todo, excepto a nuestra fantasía egoísta, no vemos nada ni oímos

nada ni percibimos nada y nos sentimos solos y olvidados y

desamparados y desgraciados, en medio de la dicha y la plenitud y la

alegría y la vida, que lo llenan todo, que lo constituyen todo...

¿Por qué no damos un frenazo en esa estúpida huída hacia delante

en que hemos convertido nuestra existencia, y disfrutamos la belleza y la

plenitud y la armonía de que está repleto cada instante? Es sólo cuestión

de intentarlo, de mirar dentro de las cosas y dentro de nosotros mismos, y

pronto veremos la mano de Dios que, incesantemente, vela por nosotros,

nos ayuda, nos acaricia, nos protege y nos empuja suavemente hacia

delante posada en nuestro hombro...

Cada instante, pues, cada persona, cada animal, cada ser, cada

acontecimiento, están llenos de vida, de luz y de amor. Sólo tenemos que

mirar, y veremos. Y dejaremos de sentirnos desgraciados. Y de esperar

ese momento en que nos llegará la felicidad que ya tenemos y que no

habíamos aprendido a ver ni a disfrutar.

* * *

 

 
 


Primer  Anterior  Sin respuesta  Siguiente   Último  

 
©2024 - Gabitos - Todos los derechos reservados