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PAZ VERDADERA Y DURADERA
(Agosto de 1952)
Entre las cosas que la gente más pide, y que menos sabe cómo conseguir, está la PAZ. Pareciera estar la Paz en ese grupo de actividades que "alguien" hace o debería hacer, siempre y cuando no se trate de uno mismo ("qué pasa que no recogen la basura"..."la vigilancia en las calles es un desastre".... "debería haber más agentes de tránsito para que 'la gente' no maneje tan loca e irresponsablemente"... etc.). Y al estar ocupado en la traducción del "Diario de El Puente a la Libertad- El Morya" , encontré esta selección del Amado Maestro El MORYA, en la cual resulta evidente que la Paz dependerá de cuánto aceptemos y asumamos la responsabilidad de auto-convertirnos en presencias pacificadoras. El balón está en nuestro lado de la cancha:
«"Y el gobierno descansará sobre sus hombros." [Isaías 9:6] La raza está pasando de los días irresponsables de la infancia -con sus requeridas restricciones de fuerza- al auto-gobierno mediante el cual cada individuo habita en la Ley de Amor, y asume como su constante responsabilidad personal el gobernar, calificar e irradiar energía a nuestro universo, de manera tal que no perturbe la paz. «Cuando la raza ACEPTE esta responsabilidad individual, y ASUMA su gobierno individual sobre sus propios hombros, hacer la Voluntad de Dios será un júbilo, no una tarea plagada de dificultades sobrehumanas. «El individuo debería cultivar a diario que esa paz que sobrepasa todo entendimiento, y cuando se convierta en un centro irradiador de paz, sabrá lo que es la verdadera felicidad; y más aún, está haciendo la Voluntad de Dios, convirtiéndose por ello en un co-trabajador consciente de la Gran Hermandad Blanca.»
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