Alguien preguntó qué era La Transformación hacia el Ser Perfecto - Masoneria

Alguien preguntó qué era La Transformación hacia el Ser Perfecto al que aspiraba la Masonería.

El primer paso hacia la transformación es conocerte, para conocerte obviamente tienes que observarte.

¿Qué es la Observación de sí mismo?

" La observación de sí". Es un ejercicio muy difícil y requiere que mucha concentración y mucha constancia tanta como fuese posible. Así la dificultad principal con este ejercicio, así como con la mayoría de los ejercicios, consiste en que para hacerlos correctamente era necesario no esperar resultados a corto plazo.

En este ejercicio específico, lo que era importante era verse a uno mismo, observar imparcialmente nuestro comportamiento mecánico, automático, reactivo, sin comentarios y sin hacer intento alguno de cambiar ese comportamiento; simplemente observarlo. Si cambias, entonces nunca ves la realidad de ti mismo. Ves sólo el cambio. Cuando uno comienza a verse a sí mismo, entonces vendrá el cambio, o puede hacer el cambio si desea, si tal cambio es deseable.

El trabajo sobre sí mismo para la Transformación no solamente era muy difícil, sino que también podía ser muy peligroso para algunas personas. "Este trabajo masónico no es para todos".

Por ejemplo, si deseas aprender a ser una persona millonaria, es necesario dedicar toda la vida temprana a esta meta y no a otra. Si deseas ser religioso, sacerdote, filósofo, maestro, político hombre de negocios, deberás dedicar toda tu vida a esa meta, para ser verdadero masón deberás dedicarte a ello con esmero.

En Masonería se enseña la posibilidad de cómo convertirse en Una Mujer o en Un Hombre tal como no se conoce en estos tiempos modernos, particularmente como se conoce en el mundo profano", usted en Masonería deberá convertirse en un Ser de Luz integro, en un Ser despierto y lucido.

La observación de sí mismo no es un método es simplemente una forma de llegar al nivel que uno se pueda conocer.

Entonces preguntó
¿Qué es la Transformación de sí mismo hacia la Luz?

Entonces le pedí que mirase por la ventana y le dijese lo que veía. Dijo que lo único que podía ver era un Nogal. Luego pregunté qué había en el Nogal. "Nueces", respondió. "¿Cuántas Nueces?". Cuando contestó vacilante que no sabía, él dijo impaciente: "No exactamente, no pregunto eso. Le dije Adivina cuántas". Supuso que habría varios miles de ellas. Estuvimos de acuerdo y entonces me pregunte cuántas de aquellas Nueces se convertirían en Nogales. Supusimos los dos que sólo cinco o seis se convertirían de hecho en árboles, si acaso. Así ambos asintamos . "Quizás sólo una, quizás ni siquiera una. Los Masones necesitas aprender de la naturaleza.

El género humano también es organismo colectivo. La naturaleza hace muchas nueces o en su caso muchos seres humanos. La gente se reproduce mecánicamente y sin control, lo mismo sucede en un nogal produce millones de Nueces, a lo lardo de su centenaria existencia, pero la posibilidad de convertirse en árbol existe para pocas nueces, lo mismo que un ser humano transcienda a ser verdaderamente un Ser Luz. Entiendes Hermano, le dije igual que con las nueces pasa con el ser humano, muchos seres humanos nacen, pero sólo algunos crecen hacia la Gran Luz de la Consciencia Absoluta.

La gente cree esto como desperdicio, piensan que la naturaleza desperdicia. No es así. El resto de los seres humanos se convierte en fertilizante, o alimento para gusanos, vuelven a la tierra y crean la posibilidad para más nueces, más seres humanos, de vez en cuando hay más árboles, más Seres Humanos reales.

Pero también hay que comprender que el fertilizante es necesario para la naturaleza. La posibilidad para el árbol verdadero, el ser humano verdadero, también depende precisamente de este buen fertilizante.

Después de esta explicación estuvimos en un silencio más bien largo, yo continúe: "En el mundo de los profanos, tu mundo, existe la creencia de que el Ser humano tiene alma inmortal desde su nacimiento, dada por Dios. No es así. Nada es dado por Dios, sólo la naturaleza da alguna posibilidad, lo demás dependerá de tu esfuerzo Hermano. Y claro la naturaleza solamente da la posibilidad de alma, no da alma. Hay que adquirir el alma a través de trabajo interior, se hace por fricción y por choque.

Recuerdas hermano la enseñanza masónica de la Acacia, que comienza con la frase: El árbol de la acacia me es conocida, y el significado de esa frase, que es cómo alcanzar la Inmortalidad del Alma.

Pero al revés que el árbol sea de la acacia, el nogal u otro, el Ser Humano tiene muchas posibilidades. Tal como el hombre profano existe ahora tiene también la posibilidad de crecer mediante la iniciación y la instrucción masónica, o por lo contrario crecer en forma equivocada.

El hombre profano o la mujer profana pueden convertirse en muchas cosas, no solamente en fertilizantes, no solamente es hombre verdadero. Pueden convertirse en lo que se llama buenos o malos, o en cosas no adecuadas. El ser humano verdadero no es bueno, no es malo. El ser humano verdadero es sólo consciente, solamente desea inmortalizar el alma para el desarrollo adecuado.

Observe a mi hermano concentrado y se esforzaba en comprenderme, su sentimiento notaba era de confusión, incomprensión. Percibía y sentía la importancia de lo que estaba diciendo, pero no lo entendía.

Le dije piensa en el bien y el mal como la mano derecha y la mano izquierda. El Ser humano siempre tiene dos manos, dos lados de sí mismo, buena y mala. Una puede destruir a la otra. Necesitan tener una meta para hacer que ambas manos trabajen juntas, necesitan adquirir una tercera cosa, cosa que hace la paz entre las dos manos, entre el impulso hacia el bien y el impulso hacia el mal. El Ser humano que es todo "Positivo" o el hombre que es todo "Negativo" no es hombre completo, es unilateral. La tercera fuerza es la consciencia: la posibilidad de adquirir conciencia ya está en el Ser humano cuando nace; esta posibilidad es dada, gratis, por la naturaleza. Pero es sólo posibilidad. La consciencia real solamente puede ser adquirida por el trabajo, aprendiendo a comprenderse a sí mismo en primer lugar.

Incluso tu filosofía, la filosofía profana tiene esta frase: "Conócete a tí mismo". Esta frase es de lo más importante en todas las religiones y filosofías. Cuando comienza a conocerse a sí mismo, ya comienza a tener la posibilidad de convertirse en hombre genuino.

O sea, la primera cosa a aprender es conocerse a sí mismo mediante este ejercicio, la observación de sí mismo. Si no haces esto, entonces será como la Nuez que no se convierte en árbol: fertilizante; fertilizante que vuelve al suelo y se convierte en posibilidad para un ser futuro.