Alcoba de Athena, Santuario de Grecia.

Ya varias lunas han pasado desde el instante en que el mal ha vuelto a la vida en esta era. Diversos acontecimientos se han marcado alrededor del mundo como preámbulo de la ambición desmedida de un Dios por gobernarlo; y mucha sangre ya ha sido derramada hasta ahora por dicha causa. Desde los ventanales de su alcoba, Athena contempla intranquilamente los diversos resplandores que surcan  por el  firmamento dando fe de la violencia con la que se ha azotado la nueva guerra santa; sin embargo, la esperanza que alberga el corazón de la diosa no se desquebraja sino que más bien se enciende aun más pues la confianza que deposita en sus caballeros es más grande que cualquier oscuridad. Es así que, emprende inmediatamente con una decisión:

“Yo confió en ellos, estoy segura que harán lo imposible por impedir que la oscuridad se adueñe de este mundo”

Es la reflexión que nace desde su corazón al instante en que su cuerpo empieza a emanar un cálido resplandor que va expandiéndose por todo su templo y de esta manera establecer una conexión con los santos de bronce.

“Seiya, Shiryu, Hyoga, Ikki por favor vengan a mi templo, necesito hablar personalmente con todos ustedes….Por favor no demoren, estaré aguardando por ustedes…”

Mensaje que transmite directamente  a sus respectivos cosmos profundizando esta vez su mirada sobre el Santuario, aguardando la debida respuesta...






CONTINUARÁ...