Sin lugar a duda todos necesitamos pedir ayuda y con este programa aprendemos a pedir ayuda porque nos damos cuenta que todos nos necesitamos. Pero al mismo tiempo tenemos que aprender a desapegarnos emocionalmente, quiero decir a no tener dependencia de tener siempre que recurrir a alguien en un momento dado. Con este programa podemos dirigirnos a nuestro Poder Superior y dejar en sus manos nuestros problemas y pedirle fuerzas para cumplir su voluntad y aprender a conocer su voluntad. El es quien más nos va a ayudar.
Ojalá, que aprendamos a desapegarnos emocionalmente, no solo de las personas sino también de lo bienes materiales. Ello no significa no disfrutar de nuestras amistades, parejas y el poder compartir con ellos.
Practicando los pasos adquirimos la serenidad y cuando nos damos cuenta que estamos descontrolados hay que recordar y trabajar los tres primeros pasos.
A Tenacho le deseo que encuentre su paz mental.