La Enseñanza masónica se imparte en Secreto

Se le preguntó a un maestro masón:

-Mientras la Masonería es conocida universalmente, las enseñanzas masónicas permanecen secretas, se dan únicamente a los que han sido iniciados y a nadie se le permite asistir a las sesiones masónicas  como observador a sus ceremonias, ceremonias que se realizan siempre  a puertas cerradas, en contraste con las prácticas de otras filosofías o religiones que permiten, más aún, acogen de buen grado la presencia de toda clase de oyentes. ¿Qué explicación le  das a esto?

El maestro masón respondió:

-¡Luz y más intensa y refulgente Luz! La enseñanza masónica es como la Luz intensa que cegaría al que aún no está debidamente preparado: la masonería no es una Luz tenue, por lo tanto  se debe dar en secreto, pues su exhibición pública sería  mala para el que la imparte, para el que la recibe y para el observador que al final la malinterpreta. La enseñanza masónica es como un medicamento y sus efectos no son visibles en el momento en que se la proporciona, de modo que no tiene sentido que haya un observador cuando a alguien se le suministra un medicamento, esto no ayudaría al aquejado, salvo que con el paso del tiempo  se noten sus resultados, y esto es lo que debe ver el No Masón.

Al mismo tiempo, no deben considerarse las enseñanzas masónicas independientemente de las circunstancias en que se la imparte. Por lo tanto, la presencia de observadores curiosos  altera las circunstancias y, por consiguiente, también el producto de la enseñanza masónica. Si la presencia de un público morboso aumentara el beneficio derivado de la enseñanza, entonces yo y todos los demás masones  daríamos la bienvenida a ese público y exigiríamos su presencia, pero la masonería no es un circo o un teatro de guiñoles para hacer que le gente al vernos hacer nuestros rituales masónicos se divierta.

 En otro sentido, la enseñanza varía según sea la apreciación Masónica  de la necesidad en cuanto a «momento adecuado, lugar adecuado y gente adecuada». El mero pedido de información acerca del conocimiento masónico es como arrojar un montón de perlas a los puercos con la intención de que estos  las valoren: la intención puede ser buena, pero el resultado será siempre inadecuado.

Hay muchos, debemos admitirlo que quieren de forma seria  informarse sobre masonería, pero de ellos no requiere la masonería, la masonería requiere de personas que quieran formarse masones y no solamente sólo informarse.

El No masón que interrogaba al maestro masón dijo:

-Entiendo bien  lo que dices maestro masón, pero deseo hacerte notar que ésta no es la forma en que se lleva a cabo la impartición de una  enseñanza superior que beneficie a la Humanidad.

El maestro masón replicó

-¡Quiera Dios “El Gran Arquitecto del Universo” que algún día la enseñanza a la que tu llamas superior ya esta  sea filosofía , académica , religiosa o política se imparta de esta adecuada manera, nos evitaríamos tantas deformaciones del cognitivas! ¡Cuando ello ocurra, no tendremos necesidad de advertir ninguna diferencia entre la enseñanza  Masónica y otras!

Alcoseri