Algunos empezamos la recuperación con la impresión de que las contrariedades de la vida son una serie de pruebas cósmicas destinadas a enseñamos algo. Esta creencia se ve claramente cuando sucede algo traumático y nos lamentamos: «!Mi Poder Superior me está probando!» Cuando algo sucede estamos convencidos de que es una prueba a nuestra recuperación, o una prueba a nuestro carácter cuando nos enfrentamos a una situación en la que podríamos hacer algo incorrecto sin que nos descubran. Puede que hasta pensemos que sufrir terriblemente por alguna tragedia de la vida sea una prueba a nuestra fe.
Pero un Poder Superior bondadoso no pone a prueba nuestra recuperación, nuestro 'carácter ni nuestra fe. En la vida simplemente pasan cosas, y algunas son dolorosas. Muchos hemos perdido un amor sin tener la culpa. Algunos hemos perdido todos nuestros bienes materiales. Unos pocos hasta hemos sufrido la pérdida de nuestros hijos. A veces la vida puede ser terriblemente dolorosa, pero no es el Poder Superior quien nos hace sufrir., Más bien, ese Poder está constantemente a nuestro lado, listo para llevamos en brazos si no podemos caminar solos. No hay daño que cause la vida que el Dios que concebimos no pueda sanar.

