JULIA NÚÑEZ, DAMA DE BLANCO :
"Sabemos que el mundo está conociendo
lo que pasa realmente en Cuba"
por patricia c. serrano madrid
Una de las mujeres cubanas miembro de la agrupación de las Damas de Blanco relata a
ESTRELLA DIGITAL desde La Habana cómo vivió los siete días de protestas
Asegura, como si no fuese una frase hecha, que la esperanza es lo último que se pierde, y que por eso continúa luchando en la calle. Julia Núñez es una de las Damas de Blanco cubanas que han participado durante los últimos días en las protestas contra el régimen de Castro, para pedir la liberación de los 53 opositores políticos condenados a años de cárcel desde 2003. Entre ellos está su marido, Adolfo Fernández, sentenciado a 15 años y a quien sólo puede ver una vez cada dos meses al permanecer confinado en una prisión situada a más de 500 kilómetros de La Habana. ESTRELLA DIGITAL compartió unos minutos con ella en sus primeros momentos de calma tras la intensidad vivida durante la última semana.
¿Cómo ha vivido los días de protesta de las Damas de Blanco en la isla?
Han sido días muy fuertes, de extrema represión. El Gobierno convocó a las hordas, poniéndoles hasta autobuses desde sus centros de trabajo, para que nos hicieran mítines de repudio y ofensa contra nosotras. Aprovecharon esto y pusieron a la Policía formando un cordón con la excusa de que ellos nos protegían. Estamos satisfechas, porque pudimos protestar los siete días, para que el mundo conozca nuestra causa, que somos mujeres indefensas, que marchamos por la calle con unas flores pidiendo la libertad de nuestros presos, injustamente encarcelados desde hace siete años.
¿Os sentistéis intimidadas o aisladas ante la presencia policial y las contramanifestaciones?
Me han contado personas que estaban en los alrededores de esos mítines de repudio que había gente que protestaba y que se indignaba por el abuso de poder contra nosotras, que sólo gritamos libertad por nuestros presos. Pero con ese cordón impidieron que se sumase gente del pueblo que puede simpatizar con nosotras.
¿Os habéis visto solas en algunos momentos de las protestas de estos días?
No, ya que al menos también había prensa extranjera. El objetivo es que el mundo entero sepa lo que está pasando con nuestros presos y con nuestra causa, que es bien justa: mujeres solas, con un gladiolo en la mano, y esa represión encima nuestra. Pero sabemos que el mundo está conociendo lo que está pasando realmente en Cuba.
¿Se les hace patente, entonces, el apoyo internacional?
Mucho, estamos muy agradecidas a todas las organizaciones, prensa extranjera, políticos, que han hecho algo por nosotras.
¿En algún momento de estas protestas tuvo miedo, debido a la violencia que arrancó de las manifestaciones pacíficas?
Sí, por supuesto, ha habido situaciones muy tensas, y el miedo es un sentimiento humano. Pero es tan injusto lo que han hecho con nuestros familiares, y ver la injusticia que están haciendo con nosotras te lleva a superar todo eso, a salir adelante y gritar libertad por nuestros prisioneros.
¿Han tenido constancia de que se hayan producido detenciones durante estos siete días?
En algún momento, grupos de opositores que estaban alrededor de nosotras sí que fueron detenidos. Tengo entendido que hasta fueron golpeados, pero las detenciones duraron horas y luego los soltaron. Se trata de personas marcadas ya por la Policía política, pero no gente del pueblo, que yo sepa.
¿Sufrió las agresiones policiales durante los actos de protesta?
Sí, sobre todo el día de la Iglesia de Santa Bárbara. En ese barrio hubo mucha represión policial y nos metieron a la fuerza en autobuses que puso el Gobierno. No queríamos subir y comenzó la violencia. A Laura Pollán (portavoz de las Damas de Blanco) le fracturaron un dedo, y luego tres hermanas más tienen también lesiones y están inmovilizadas. En mi caso, recibí algún manotazo y alguna patada, pero no más.
Las protestas han tenido lugar después del fallecimiento del preso político Orlando Zapata, ese suceso habrá influido en los acontemientos de algún modo.
Por supuesto, porque eso fue también muy injusto, como la manipulación que hizo el Gobierno de la figura de Orlando Zapata, que es un opositor de hace muchos años. Han tratado de ensuciar su imagen, diciendo que es un delincuente común, y eso es muy injusto porque, ¿qué delincuente común se inmola así por la causa de la libertad de sus hermanos presos?
¿Qué opina sobre la actitud de España ante la situación en la isla?
No tengo mucha información estos días, pero por comentarios de otras personas, me han dicho que, en España, todavía la protesta no es tan fuerte como la que necesitamos nosotras, sabiendo lo que está pasando aquí.